La Argentina está entre los países de la región que más sufre el shock económico de la pandemia

De los que dieron a conocer sus datos, sólo Perú sufre una caída mayor y Ecuador va en ese camino. La duración de las cuarentenas influye en el resultado, pero también pesan mucho los paquetes fiscales y monetarios, la posibilidad de dejar flotar la moneda y las condiciones previas

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Una imagen de la cuarentena en la ciudad de Buenos Aires
Una imagen de la cuarentena en la ciudad de Buenos Aires

Los primeros datos del impacto sobre la actividad económica como resultado de la pandemia de coronavirus Covid-19 fueron publicados por algunos de los países más importantes de América Latina. El panorama es tan negativo como se esperaba, con caídas sin precedentes en el producto de todas las economías de la región, entre las que el golpe que sufrió la Argentina en abril figura entre las primeras. Como contrapartida, los datos de muertos cada 100.000 habitantes ubican a la Argentina entre los menos afectados por la enfermedad.

No todos los países informan sus números de actividad de la misma manera, ni al mismo tiempo. Pero entre aquellos que dieron a conocer sus datos de actividad de abril, el peor mes en la historia desde que se empezó a publicar la actual serie de actividad económica en 1993, se puede comparar la distinta suerte que corrió cada uno.

Según números compilados por el Instituto Internacional de Finanzas (IIF), entre las economías de la región más afectadas a nivel económico por la epidemia global se destaca por encima de todo el resto el desempeño de Perú. En términos interanuales, el Producto Bruto Interno cayó 40% interanual en abril.

En esa lista de países con datos disponibles, la Argentina se ubica segunda entre las que más perdieron. El derrumbe de 26,4% interanual que registró el Indec a través de su Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) de abril fue el más grande alguna vez registrado.

Colombia y México, por su parte, mostraron retrocesos del 20% en comparación con mismo mes del año pasado. Brasil, mientras tanto, se contrajo 14% en el mismo período mientras que Chile cayó 12%.

Los datos interanuales son una forma de verlo, pero los especialistas advierten que se necesitan plazos mayores e indicadores múltiples para evaluar cómo le fue a cada país. Por caso, Chile publicó ya sus datos de mayo y mostró que la economía cayó más en ese mes que en abril: se desplomó 15,3%. Esto fue después de que el gobierno trasandino tuviera que decidir una cuarentena más estricta en la capital, Santiago, ante un crecimiento acelerado de los casos de coronavirus.

Hay tres factores que mirar para, entiendo yo, saber cómo puede afectar la pandemia a la actividad. Uno es el avance de la enfermedad en sí, si se descontrola no vas a evitar una caída de la economía”, dijo el economista Luis Palma Cané a Infobae. “Otra es la duración y la intensidad de la cuarentena, es lógico que cuanto más duras sean las medidas, mayor será el freno. Pero tercero, y también muy importante, está el tamaño de los paquetes fiscales y monetarios que pueden aplicar los países para limitar el impacto. Ahí, el paquete de estímulo argentino es pequeño porque no tiene la posibilidad de acceder al mercado para financiarse, no tiene ahorro y no tiene superávit fiscal, tuvo que recurrir a emisión monetaria y el paquete es de 2% a 4% del PBI. En Estados Unidos ya se acerca al 14% del PBI”, agregó.

Otra forma de ver las diferentes suertes que corrieron las economías ante la pandemia es ver el dato mensual en forma exclusiva. Tiene a favor que aísla cómo le fue al resto del mundo mientras la Argentina transitaba su período de aislamiento más severo pero, por el mismo motivo, capta también momentos distintos en las medidas sanitarias de países similares (otra vez el caso de Chile, que se aisló con mayor intensidad en mayo que en abril).

Por la forma en que presentan los datos, varios de esos países se quedan fuera de la comparación. México, por ejemplo, sólo se puede comparar gracias a que el secretario de Hacienda dio a conocer públicamente su estimación, porque por otro lado publica oficialmente sólo datos trimestrales.

En ese nuevo ranking, la Argentina es la que más cae con el 17,5% de retroceso que sufrió la actividad en abril en comparación con marzo. El dato es “desestacionalizado” para tratar de borrar ruidos que generan las actividades que se concentran en ciertos momentos del año, por ejemplo la cosecha. En la misma lógica, México cayó en abril 17,3%, Colombia 14,4%, Brasil 9,7% y Chile 8,7%.

Pero dado que las curvas de contagio se han comportado diferente en cada país, con picos y cuarentenas aplicadas con distinta intensidad y en distintos momentos, información de plazos más largos puede ser más útil. Con lo cual, una forma más de comparar desempeños es mirar las previsiones económicas: el informe mundial de perspectivas del FMI (WEO) ubica a la Argentina entre las que más van a sufrir en la región, con un 9,9% de caída, pero no a nivel global. España e Italia, por caso, tienen bajas pronosticadas del 12,8%. EEUU, -8%. En el otro extremo, pero muy cerca, Uruguay caerá apenas 1,5%, según el Fondo.

La forma en que los países sufren el impacto de la crisis está influida por múltiples factores. Es una crisis que golpea a todos, se va a sentir, pero algunos factores pueden influir para que el efecto sea menor o mayor según el caso. Para empezar, las condiciones iniciales en las que el shock encontró a cada país luego de años de crecimiento muy marco, pesó para que el impacto sea mayor”, dijo Martín Castellano, jefe de Investigaciones de América latina del IIF. “Después, es una cuestión de margen de política económica, tanto fiscal como monetaria, como para responder con intervenciones directas. También es importante el efecto de la flotación cambiaria, porque los países que pudieron dejar flotar a sus monedas pudieron absorber mejor el shock que los que tienen tipos de cambio más rígidos”, agregó el economista, ex investigador del Banco Central.

“Por último, es más difícil de medir, pero lo que vemos es que los países que han tenido que cerrar de manera más estricta y por tiempo más prolongado van a tener un mayor impacto”, dijo Castellano. “De esos factores, en Brasil se destaca el muy agresivo rol que tuvo el Banco Central para inyectar liquidez y moderar el impacto, en Perú la falta de flexibilidad cambiaria parece haber sido la causa clave de que la caída en la actividad sea más notoria, lo mismo que en Ecuador -sumado a todo un proceso de falta de liquidez, deuda externa en renegociación y otros factores”, agregó Castellano.

En el caso de la Argentina, mientras tanto, el impacto fue tan importante por múltiples factores. Condiciones iniciales más débiles para enfrentar el shock, menor espacio fiscal, monetario y cambiario que han llevado también a tomar medidas de contención del shock más estrictas que otros países, más allá de frentes todavía abiertos que generan incertidumbre sobre la política económica futura”, concluyó.

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