Las acciones y los bonos argentinos terminaron negociados con tendencia negativa este viernes, por el efecto arrastre de las caídas que se observaron en los índices de las bolsas de Nueva York.
Aunque el balance semanal es aún favorable para los títulos públicos y privados de la Argentina, con un beneficio promedio del 2,9% para los ADR de compañías operadas en dólares en el exterior, este viernes las bajas rondaron el 2,5% en promedio, con un Dow Jones de Industriales que resignó un 2,8 por ciento.
Los papeles argentinos que más cayeron fueron los de la distribuidora eléctrica Edenor, Banco Macro e IRSA, en torno al 6 por ciento.
El panel de acciones líderes S&P Merval de ByMA (Bolsas y Mercados Argentinos) retrocedió un 3,4%, a 40.589 puntos.
En cuanto a los bonos, las principales referencias en dólares reflejaban un ajuste de precios de 1%, con un riesgo país de JP Morgan que al cierre bursátil subía 19 unidades para la Argentina, a 2.546 puntos básicos.
TIEMPO DE DESCUENTO PARA UN CANJE
Los bonos de Argentina son negociados con limitadas y selectivas bajas, en un mercado que opera en modo wait and see según operadores, en momentos en que el gobierno de Alberto Fernández busca alternativas para alcanzar un acuerdo con acreedores para reestructurar deuda en moneda extranjera por unos 65.000 millones de dólares.
El Gobierno continúa negociando, aunque todavía hay una “distancia por cubrir” en términos económicos y legales, dijo el ministro de Economía, Martín Guzmán. El país, que en mayo cayó en la novena cesación de pagos de su historia y propuso dos veces mejoras a su oferta, extendió hasta el 24 de julio el plazo límite para llegar a un acuerdo.
“Las tensiones se trasladan en especial ahora en la solicitud de las cláusulas incluidas en los bonos del canje del 2005, dado que resultan más protectivas, aunque cabe destacar que ya no son habituales”, explicó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.
RECEPCIÓN NEGATIVA DE NOVEDADES EN WALL STREET
Las bolsas de EEUU se inclinaron por las pérdidas luego de la publicación de los últimos resultados decepcionantes de las pruebas de estrés bancario realizadas por la Fed, el banco central norteamericano.
“Algunos bancos podrían acercarse a los niveles mínimos de capital ante el escenario adverso producto de la pandemia de coronavirus. Debido a esto, los bancos deben suspender los programas de recompra de acciones y mantener los pagos de dividendos en los niveles actuales para el tercer trimestre”, describieron desde Research for Traders.
En paralelo, el número de casos de coronavirus sigue aumentando en ciertos estados como Florida, Arizona y Texas, donde su gobernador dijo que el estado pausaría sus planes de reapertura.
Las bolsas de Nueva York profundizaron los números en rojo junto con las noticias sobre la caída del 5% del PIB de Estados Unidos en el primer trimestre del año y de la decisión de la Reserva Federal –banco central estadounidense– de limitar el pago de dividendos y recompra de acciones a la banca.
En tanto, las acciones europeas cerraron con bajas el viernes, ya que las pérdidas en Wall Street tras el incremento en los casos de coronavirus en Estados Unidos aumentaron la preocupación sobre el ritmo de la recuperación económica global.
El índice paneuropeo STOXX 600 cayó un 0,4% tras de moverse en territorio positivo más temprano en la sesión. El sector bancario presentó el de mayor declive, con una pérdida de 2,2%. Sus pares al otro lado del Atlántico se vieron afectados por la decisión de la Reserva Federal de poner límites a los dividendos.
SEGUÍ LEYENDO: