La comunicación B 12020 del Banco Central logró simplificar el trámite para importar al unificar los distintos formularios. La incógnita es si al final de ese recorrido se consiguen los dólares a precio oficial porque el Banco Central iniciará un trámite para ver si todas las empresas cumplen con los requisitos de no haber comprado dólares alternativos o tener divisas en el exterior. Como esa decisión es discrecional, el éxito de la medida depende de la agilidad de la autoridad monetaria. Caso contrario, los importadores al no tener crédito en el exterior, deberán seguir comprando dólares alternativos para pagar sus compras.
La desconfianza creció en la tarde del lunes cuando el Central se comprometió con los importadores de fertilizantes y herbicidas a garantizarles dólares al precio del Mercado Unico de Cambios (MULC) que ayer estaba en $69,08 después de haberse devaluado 9 centavos. “Nos liberan los insumos cuando estamos cosechando y no los necesitamos”, dijo un emprendedor agropecuario que participó de la reunión donde le señalaron que el principal problema que tienen es el atraso cambiario. La respuesta fue que la inflación de junio va a venir baja e imaginan hasta deflación.
“El Gobierno primero tiene que arreglar el frente de la deuda para tener menos presión sobre el tipo de cambio y las reservas en un contexto de financiamiento monetario del déficit fiscal y así, paulatinamente, ir revirtiendo los controles a los importadores para acceder al dólar oficial. El daño colateral de las restricciones puede terminar en una remarcación de precios”, señaló el economista Federico Furiase de la consultora Eco Go y profesor de la Universidad Di Tella.
Otro tema que los preocupó es la posible estatización de Vicentin, una de las más grandes empresas del agro que está en concurso preventivo de acreedores. Son pocos los que creen que esa medida nació del Presidente. “No se lo escuchó convencido a Alberto Fernández cuando hizo el anuncio. Hasta olvidó el nombre de la senadora que hizo la propuesta. Parece que la idea de la diputada Fernanda Vallejos de quedarse con parte de las grandes empresas está avanzando por otro sendero”, señaló un empresario que lo conoce en su intimidad.
Un importador, ante la situación, señaló sin ironía que “por lo menos con (el ex secretario de Comercio) Guillermo Moreno teníamos más previsibilidad. Ahora no sabemos si vamos a conseguir los dólares y si no aprovecharán la pandemia para avanzar sobre el sector privado. Cada vez tenemos más dudas sobre quién tiene el poder”.
Por eso el mercado no es optimista en cuanto a que esta medida contenga el alza de los dólares alternativos. De hecho, el contado con liquidación aumentó $1,03 a $116,37 y el dólar Bolsa subió 14 centavos a $110. El dólar libre se mantuvo en $125 porque los compradores no fueron tantos como amagaban el fin de semana.
El problema que va a tener el Central es que la demanda de dólares para importar se va a incrementar. Hasta ahora, las reservas crecieron porque la mesa de dinero del Central fue la única compradora porque le prohibieron el acceso a la plaza a los importadores.
Si agilizan el trámite para hacerse de dólares oficiales, la demanda puede ser intensa y va a ser regulada demorando los trámites de las nuevas declaraciones. Los dólares de libre disponibilidad no superan los USD 7.000, millones un monto magro para las necesidades que hay que cubrir. Si se le agrega el oro y los Derechos Especiales de Giro del FMI que integran las reservas, esa disponibilidad sube a USD 9.000 millones. Pero hay deudas con empresas que importaron o pagaron Obligaciones negociables (deuda por bonos emitidos en divisas) con dólares propios y a los que hay que restituírselas porque en su momento, cuando tomaron los dólares, se los vendieron al Banco Central.
En tanto, el dólar en bancos y casas de cambio aumentó 39 centavos a $ 71,87 y elevó el dólar solidario a $ 92. El dólar mayorista aumentó 9 centavos a $ 69,08 con compras del Central, que sigue prohibiendo el acceso de los importadores a esos dólares, por casi USD 80 millones. Fue así como las reservas aumentaron USD 69 millones a USD 42.884 millones.
Los dólares de libre disponibilidad no superan los USD 7.000 millones un monto magro para las necesidades que hay que cubrir.
Los bonos de la deuda, por su parte, vivieron una jornada de cautela, aunque el Gobierno está mejorando la propuesta a los acreedores. El riesgo país perdió 67 unidades (-2,6%) a 2.472 puntos básicos. Entre los bonos en dólares con legislación argentina, el Bonar 2020 aumentó 2,51% y el Bonar 2024, perdió 2%. Los bonos largos con legislación extranjera, tuvieron un comportamiento irregular. El Discount cedió 0,14% y el Par aumentó 0,98%. A favor del riesgo país jugó la baja de los Bonos del Tesoro de Estados Unidos. Ahora los emitidos a 10 años rinden 0,88% contra 0,67% de hace una semana porque los inversores norteamericanos volvieron a volcarse a las acciones. Los tres principales índices de la Bolsa de Nueva York subieron entre 1,20 y 1,70%.
A nivel global, el dólar cedió 0,25% ante las seis principales monedas del mundo y está en su nivel más bajo desde el 11 de marzo pasado.
En la Bolsa local se vivió otra jornada de euforia porque apuestan al éxito de la negociación y saben que están comprando papeles de empresas que medidos en dólares cotizan al 10% de su valor real. Apuestan a ganancias en el largo plazo. Aunque la situación económica en el futuro no sea la mejor, saben que pasada la pandemia recuperarán parte del valor que perdieron en esta crisis.
Por eso el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, subió 8,31% con negocios por $ 3.140 millones, es decir triplicó el volumen habitual y en seis ruedas el crecimiento promedio del indicador fue de casi 30%. Claro, si a ese crecimiento se lo dolariza, es menos significativo. Telecom (+13,90%), Edenor (+13,72%) e YPF (+11,46%) fueron las más destacadas. La gran coincidencia es que son las empresas que tienen un enorme retraso en sus precios.
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en dólares en Wall Street- tuvieron una rueda similar con alzas de hasta 14,46% en YPF y de 14,06% en Telecom. Los ADR’s de los bancos subieron hasta poco más de 13%.
Los inversores juegan con las contradicciones del Banco Central y apuestan a todo por distintas razones. A la Bolsa por las bajas cotizaciones en dólares de las acciones. Al dólar, para cubrirse y esta cobertura se está volviendo más intensa. Los bonos ya tuvieron su momento de euforia y ahora hay alzas selectivas.
La rueda del martes no será distinta en volatilidad y puede haber toma de acciones en la Bolsa porque fueron demasiados los inversores que entraron al mercado.
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