Las ventas minoristas cayeron 50,8 % en mayo, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) a 1.100 comercios realizado entre el 1 y el 6 de junio.
Se trata del tercer mes de fuerte declive dentro de una mucho más larga serie recesiva (Gráfico) y abarca la totalidad de las ventas: aquellas realizadas en forma presencial y por la modalidad de venta electrónica . “Todos los rubros finalizaron en baja frente al menor consumo generalizado que provoca el declive en los ingresos, la menor circulación de gente en las calles, y la incertidumbre”, señaló un comunicado de la entidad.
Los registros se refieren tanto a las ventas presenciales como por medios electrónicos. “Hay fuerte preocupación en los negocios por la falta de ventas; la mayoría ya implementó la modalidad electrónica, algunos invirtieron en publicidad en redes, aun así, la salida es poca y no se cubren los gastos fijos”, señaló CAME que también destacó problemas con los proveedores que se reflejan, por ejemplo en entregas que llegan a tiempo y van trabando cada vez más a los distintos sectores.
La caída abarcó a los 13 sectores relevados: 10 de ellos cayeron más que el promedio y 3 retrocedieron más del 70% respecto de mayo de 2019, en plena recesión. Algunos de los comercios, dice un comunicado de CAME, tuvieron caídas del 100%. Esto es, estuvieron cerrados o no lograron vender nada.
Incluso los tres sectores que menos mal la pasaron registraron fuertes caídas. Se trata, precisamente, de los tres sectores que fueron considerados “esenciales” desde el inicio de la cuarentena, el 20 de marzo pasado. El rubro Farmacias registró una caída de ventas de 12,9%, Alimentos y Bebidas, de 14,8% y Ferreterías, Materiales Eléctricos y de Construcción 35,5%.
La caída del consumo en estos rubros, que concentran una demanda focalizada en lo más urgente o indispensable y liberada de gastos en rubros todavía inactivos, como salidas a comer, indumentaria y calzado o esparcimiento (cine, teatro, etc) coincide con evaluaciones preliminares sobre la venta en supermercados durante el mes de mayo, que luego de registrar un “espejismo” de demanda en marzo, por el sobrestockeo al inicio de la cuarentena, vio caer sus ventas en abril y mayo.
Los declives más pronunciados fueron Perfumería y cosmética (-55,3%), Ropa y artículos de deportivos (-61,6%) y Librerías y Jugueterías (-64,1%).
Con desplomes superiores al 70% aparecen Relojerías, Joyerías y bijouterie (-75,6%), Indumentaria (-77,5%) y Mueblerías, decoración y artículos para el hogar (-73,2%).
El informe de CAME destaca además que hubo gran disparidad de ventas entre ramos, entre ciudades y entre comercios de un mismo sector, según la política de la provincia o localidad del comercio respecto de la cuarentena. “Hubo negocios que cerraron al 100% y no vendieron nada, otros que se abocaron al e-commerce, algunos que abrieron con rangos horarios más largos y otros más cortos. Todos eso estuvo determinado por las medidas de cada ciudad frente a la pandemia y la presencia o no de casos de coronavirus”, señaló CAME.
Nada menos que 85% de los comercios relevados tuvo caídas en las ventas, 2,8% “empató” los registros de mayo de 2019 y sólo 12,2% vendió más. Los únicos comercios que tuvieron subas fueron principalmente de los rubros Farmacias y Alimentos y Bebidas.
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