La rueda financiera consolidó la mejora para acciones y bonos y cierta calma en la plaza cambiaria formal, sujeta a regulaciones cada vez más estrictas.
Como es habitual desde que Miguel Pesce comanda la entidad monetaria, el dólar interbancario volvió a subir unos diez centavos, a un renovado nivel máximo de 68,81 pesos.
No obstante, al BCRA se le dificulta sumar reservas, a pesar de haber ampliado las restricciones a partir del 28 de mayo. El monto operado en la plaza de contado (spot) volvió este miércoles al nivel de USD 200 millones, un monto mediocre para la época del año, que concentra entre abril y junio el saldo exportador de la cosecha gruesa, y muy inferior a los USD 380 millones negociados el viernes pasado.
Después de un mayo muy negativo, cuando las reservas cayeron USD 980 millones, la autoridad monetaria consiguió recomprar entre el viernes y el martes unos USD 300 millones, aunque este miércoles el saldo neto a favor habría alcanzado apenas los 20 millones. Incluso, agentes del sector privado aseguran que la entidad pudo haber finalizado su intervención del día con saldo negativo.
El dólar MEP o dólar Bolsa, cotización implícita en la compraventa de bonos y acciones que cotizan en el mercado local y el exterior, subió 1,77 peso o 1,7%, a 107,77 pesos. La operatoria de contado con liquidación, en tanto, promedió los 114,30 pesos por cada dólar, mientras que el dólar blue, en un reducido mercado marginal, restó un peso o 0,8%, a 123 pesos, con una brecha de 78,8% respecto del oficial mayorista.
Apuestas por una reestructuración consensuada
Las acciones y los bonos de Argentina finalizaron con importantes mejoras este miércoles, en una plaza financiera que aguarda novedades positivas sobre la reestructuración de deuda soberana en moneda extranjera por unos USD 65.000 millones que impulsa el gobierno de Alberto Fernández.
Con el empuje de una alza de 2,1% en el Dow Jones, por encima de los 26.000 puntos por primera vez en tres meses, los bonos argentinos concretaron leves ganancias que sirven para afianzar la ganancia de 40% obtenida en mayo.
Este miércoles, los bonos en dólares registraron un ascenso promedio de un 1%, para acomodar las paridades en un rango de 36 a 54 dólares para las emisiones con ley argentina, y de 41 a 70 dólares para aquellas amparadas por ley de Nueva York.
Mientras, los ADR de compañías argentinas que se negocian en Wall Street, saltaron hasta 10%, como fue el caso de la agencia de turismo online Despegar, junto con los títulos bancarios que treparon un 8% en promedio.
“Los activos locales continúan ensayando una fuerte recuperación alentados por la positiva expectativa que despierta el acercamiento en las negociaciones con los acreedores, aún cuando resten limar algunas diferencias en busca de alcanzar los niveles de aceptación necesarios para cerrar exitosamente el canje”, comentó Gustavo Ber, economista de Estudio Ber.
Operadores señalaron a Reuters que la mejora también se ve alentada por un mayor apetito al riesgo global por una abundante liquidez y la esperanza en torno a la reactivación de la economía mundial en medio del coronavirus, pero analistas sugieren cautela porque dudan que lo peor haya pasado.
El riesgo país de Argentina, medido por el banco JP Morgan, caía 99 puntos básicos a 2.477 unidades en el cierre del mercado local, un mínimo desde el 6 de marzo, frente a los 1.770 puntos anotados a finales del 2019.
Por su parte, los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) subieron en promedio un 2% en peso, en una plaza liderada por las emisiones dolarizadas en mayor plazo.
Goldman Sachs dijo en un reporte que es muy probable alcanzar un acuerdo con acreedores en las próximas semanas, aunque advirtió sobre los riesgos si el Gobierno no mejora la propuesta.
El índice S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires se disparó un 4,3%, a un cierre provisorio de 43.853 unidades, con lo que acumula una mejora superior al 15% en las últimas tres sesiones de negocios.
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