Carlos Rodríguez: “Se está ejecutando un plan económico sistemático que nos lleva a un populismo caribeño”

El ex viceministro de Economía considera que no todos los peronistas que integran el Gobierno están de acuerdo con las medidas puestas en marcha en el marco de la pandemia

Carlos Rodríguez, fundador y rector del CEMA.

El economista Carlos Rodríguez elaboró una lista de las más de diez medidas que el Gobierno determinó a partir de la declaración de la pandemia del coronavirus y que, según su visión, son parte de un plan sistemático para una economía populista con “tintes caribeños”.

Entre ellas, el ex viceministro de Economía y ex rector de la Universidad del CEMA, enumeró los programas de precios cuidados y controlados, la Ley de Góndolas, las retenciones a la soja, el control de cambios (que llevó a una brecha del dólar oficial e informal del 70%), el proyecto de impuesto a las grandes fortunas, el default de la deuda pública en dólares, la doble indemnización y la prohibición de despidos, la emisión descontrolada, los problemas con el Mercosur, las tasa mínima pasiva para bancos y forzar a los fondos de inversión para vender dolares.

— ¿Cuáles son los riesgos de estas medidas tomadas en el marco de la pandemia?

— Estas medidas empezaron antes de la pandemia, con el aumento a la alícuota para el impuesto a los bienes personales para los que tienen bienes declarados en el exterior. Esa fue una primera medida con la que jorobaron a los que ya habían declarado sus bienes. Si se mira cada medida en particular estás tapando el sol con los dedos o dejando que el árbol tape al bosque. Una sola sería justificable pero al mirar todas juntas se ve que hay un plan sistemático económico que está siendo ejecutado.

El tuit de Rodríguez

— ¿Y cuál es ese plan?

Son pasos hacia una economía populista. No es comunismo porque no se basa en el control público de los medios medios de producción. Esto es meter la mano donde se puede. A eso lo llamo “populismo caribeño”. Están imitando algo que ya se hizo, ninguna medida es nueva. Se ha hecho en Cuba, Nicaragua, Venezuela.

Si se mira cada medida en particular estás tapando el sol con los dedos; pero al mirar todas juntas hay hay un plan sistemático económico que está siendo ejecutado

— ¿Considera que las medidas responden a la emergencia por los contagios de coronavirus?

— Estas medidas se hubieran tomado con coronavirus o sin coronavirus. Son la base ideológica del kirchnerismo camporista, que es la ideología de Hugo Chávez y Fidel Castro. La vicepresidenta Cristina Fernández comparte la ideología de ellos.

— ¿No cree que algunas de las medidas son necesarias para aliviar los efectos económicos de la pandemia?

— Son todas no necesarias. Se empezó con los Precios Cuidados y después Precios Controlados. La Ley de Góndolas es de antes del coronavirus y ¿cuál es la necesidad de decirles a los supermercados dónde tienen que comprar los productos? Son todas medidas ridículas, para atacar a los grandes porque queda bien frente a los votantes. La doble indemnización y la prohibición de despidos es atacar a los que emplean en blanco. Y a todos los que están afuera, en negro, no les importa. El exportador de soja es poderoso, pero los productores son cientos de miles. El control de cambios también afecta a un pobre jubilado que tiene ahorros en dólares.

El economista está de acuerdo con mantener la cuarentena por el riesgo de contagios en los barrios más pobres (REUTERS/Agustin Marcarian/File Photo)

— ¿Qué opina del resto de las medidas, las que apuntan a empleados informales, monotributistas o que ayudan al pago de salarios del sector privado?

— Esa parte no la estoy criticando. Es algo que se ha hecho en todo el mundo. Algo está llegando. Los planes sociales ya lo tenían estructurados y en marcha y es más fácil acreditar la plata emitida. Hay un programa social, no había más remedio porque mucha gente que estaba en negro se quedó sin trabajo. Pero hacerles llegar la plata a un monotributista o alguien que vendía servicios o a las empresas que no están produciendo es más difícil y está llegando mal o con cuentagotas. Pero simplemente porque no estaba estructurado. Vamos a una inflación alta, pero eventualmente no hay más remedio.

Vamos a una inflación alta, pero eventualmente no hay más remedio

— ¿Qué medidas económicas cree que se deberían haber tomado?

— Las medidas que mencioné son son todas medidas a costa de los demás. El sector público no se ha ajustado y el gasto populista no ha bajado. No voy a decir ahora qué medidas tomar, lo vengo haciendo hace décadas. Veo una crisis adentro del peronismo porque no todos los peronistas que están en el Gobierno están de acuerdo con estas medidas.

— ¿Está de acuerdo con la extensión de la cuarentena?

— Si, yo estoy de acuerdo con la cuarentena. No es cierto que todos los liberales o centristas o promercado están en desacuerdo. Somos un país muy pobre. Otros países pueden darse el lujo de no tener cuarenta porque tienen excelentes hospitales y salas de terapia intensivas pero nosotros no tenemos. Por suerte, hasta ahora, la tasa de mortalidad es baja y la mayoría de los casos locales no llegan al hospital. Pero yo tengo miedo de salir de la cuarentena por la situación que se está extendiendo en los barrios carenciados. Es un problema gravísimo. Está bien sacar la cuarentena en zonas bien monitoreadas en el interior del país pero no en la Capital Federal y el conurbano. Lo critico en la parte económica a Alberto Fernández, porque creo que la está haciendo el ministro Martín Guzmán que es el “pichón” de Cristina y de La Cámpora. Alberto es el verdadero ministro de Salud.

Carlos Rodríguez remarcó que el default no afecta solo a los acreedores extranjeros

— ¿Vislumbra alguna chance de que la Argentina no caiga en default?

— Hay una confusión porque el Gobierno habla de defender nuestra bandera nacional, pero no todos los acreedores son extranjeros. Yo soy un ahorrista nacional que compré bonos de mi país y no me están pagando lo que ahorré para mi vejez, pero el Gobierno me cobra los impuestos. Ofrecer pagar casi 0 y que se haga cargo el Gobierno que viene lo veo como una avivada de las de siempre. Tienen que hacer un ajuste político, un ajuste del gasto populista y un ajuste estructural. Todavía hay muchos dólares en el Banco Central. Pero yo creo que van a arreglar algo.

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