Mario Pergolini pidió una reforma laboral: “Es muy complicado cómo están armadas las estructuras de trabajo”

El conductor consideró que el Gobierno debería apoyar y legislar en favor de los emprendedores que venden sus productos por Internet, para que haya menos informalidad. Su visión sobre la televisión y el consumo de medios en la pandemia

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Mario Pergolini habló sobre la necesidad de implementar una reforma laboral

Consultado sobre cómo la pandemia del coronavirus puede acelerar la reconversión de negocios e las industrias tradicionales, el conductor y empresario Mario Pergolini habló de la necesidad de plantear algún tipo de reforma laboral, que adapte mejor las estructuras formales de trabajo, sobre todo a los nuevos tipos de empresas, que surgen cada vez más en la Argentina.

Primero, como país, tenemos que hablar de reforma laboral porque es muy complicado como están armadas las estructuras formales de trabajo en la República Argentina”, señaló en diálogo con Jorge Lanata en Radio Mitre.

Nos vamos a comer un problema muy grande de desocupación, de impuestos

Según su visión, el Gobierno debería darle un apoyo a todos las personas que emprenden a través de las plataformas de comercio electrónico. “Todo este mercado está funcionado y, cada vez más, se está volviendo informal porque no quieren legislarlo. Estamos siendo bastante ciegos ahí", expresó Pergolini, que en los años ’90, además de conducir programas de radio y televisión, fundó la productora de contenidos Cuatro Cabezas.

“Nos vamos a comer un problema muy grande de desocupación, de impuestos”, agregó. Y señaló que en contexto actual los empresarios no deberán ser tan mal vistos. “Le dicen que es el momento en que tienen que poner. Pero esa gente tiene mucho miedo de cómo va a salir de esto —destacó—. Vamos a tener que cambiar varias reglas de juego y adaptarla a un juego que ya se está jugando en el país".

Pergolini y cambios profundos en la industria de los medios de comunicación

Pergolini, de 55 años, se refería a la creciente cantidad de emprendedores locales que vender sus productos a través de Internet. Un fenómeno que consideró que no está siendo tomado en cuenta por el Gobierno. “Uno tiene una mirada atrasada de ciertas cosas. El 80% de la utilizacion de Facebook en la Argentina es para tener contacto con empresas o de las propias empresas. Es increíble la cantidad de gente que por una indemnización, o lo que sea, se puso un negocio muy chiquito y usa Facebook para vender con una facturación promedio de $60.000 o $70.000. Hay casi 13 millones de cuentas de ese tipo en la Argentina”, detalló.

“Formal e informalmente, muchos están trabajando y teniendo sus propios negocios, que no los podamos censar o ver en la Avenida Santa Fe solo habla del cambio de los tiempos. Si armaste un negocio para vender por redes y tu estructura es muy chica, lo vas a mantener. El problema es qué hacés con el que tienen que pagar alquiler del local, ABL, cargas sociales. Ese, como todos, se tiene que reconvertir. Pero sale caro reconvertirse”, advirtió.

Esa pasividad que daba la televisión, con programas donde todos opinan, ya no entretiene. Pasó. Qué le vamos a hacer... no es ni bueno ni malo

Pergolini también habló sobre los profundos cambios en la industria de los medios de comunicación. “Todo el mundo está en su casa pero no se vio más televisión, no se está escuchando más la radio y están aumentando otras cosas como juegos, trafico de voz sobre red móvil. Creemos que ciertas cosas van a volver, que son más sólidas y esos cambios de actividad son muy fuertes”, opinó.

Luego, contrastó los números de la televisión con el crecimiento de plataformas como Netflix y como Flow, que hoy son más elegidas por los usuarios. De acuerdo a su opinión, la gente encuentra en la velocidad de YouTube o en plataformas como Instagram —que en algunos vivos pueden tener hasta 140.000 espectadores al mismo tiempo— lo que los horarios formales de la televisión hoy no le ofrecen.

“Esa pasividad que daba la televisión, con programas donde todos opinan, ya no entretiene. Pasó. Qué le vamos a hacer... no es ni bueno ni malo”, concluyó.

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