Después de un sábado intenso en la Residencia Presidencial de Olivos, donde el presidente Alberto Fernández dedicó la mayor parte del tiempo a la reunión del gabinete económico encabezada por Santiago Cafiero, el Gobierno dispuso la publicación de emergencia en el Boletín Oficial de la Decisión Administrativa 458, con la firma del Jefe de Gabinete y del titular de Economía, Martín Guzmán, destinado a atender las mayores exigencias presupuestarias originadas por la propagación de la COVID-19 en el territorio nacional.
Las mayores partidas están orientadas a la construcción de hospitales modulares en provincias y la adquisición de elementos de seguridad e higiene en el marco de la pandemia ocasionada por el virus COVID-19, además de otorgar avales a los sectores de la producción para que puedan acceder a líneas de crédito especiales para afrontar el pago de salarios y restablecer la cadena de pagos, en particular en las micro, pequeñas y medianas empresas; y reforzar el Plan Nacional de Seguridad Alimentaria.
Las mayores partidas están orientadas a la construcción de hospitales modulares y la adquisición de elementos de seguridad e higiene en el marco de la pandemia
El escenario observado en los primeros dos días de pago del Ingreso Familiar de Emergencia, al que adhirieron más de 11 millones de personas con ingresos insuficientes para enfrentar el aislamiento y generación de ingresos derivado de la cuarentena generalizada que ya lleva 20 días, habría sido clave para acelerar las medidas de asistencia a los sectores más vulnerables.
De la lectura de los 158 folios anexos a la Decisión Administrativa 458, se puede detectar el aumento de la partida total de gastos para lo que resta del año en $138.062 millones y de recursos adicionales por $40.890 millones, de los cuales $1.410 millones se originaron en el cobro del Impuesto PAIS y el resto en recursos del Sistema de la Seguridad Social.
De ahí surge que, en caso de ejecutarse plenamente el Presupuesto 2020, se amplía el déficit fiscal en $97.172 millones, el cual se cubre con $60.000 millones de disponibilidades del Ministerio del Interior y $37.172 millones con aplicaciones financieras (deuda) del Tesoro Nacional, a partir de Adelantos Transitorios del Banco Central.
Detalle de las nuevas partidas
1. $60.000 millones para “incrementar las transferencias a Provincias correspondientes al Fondo de Aportes del Tesoro Nacional, financiado con recursos remanentes de ejercicios anteriores”, por parte del Ministerio del Interio. Es una cifra que supera con holgura la pérdida de ingresos en los últimos 15 meses que recibieron las 24 jurisdicciones, estimados en unos $51.000 millones, por el deterioro de la recaudación de impuestos coparticipables, según datos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal;
2. $30.000 milllones “con destino al Fondo de Garantías Argentino (FoGAr), conforme las disposiciones del Decreto 326/20, por parte del Ministerio de Desarrollo Productivo;
3. $4.100 millones para “atender acciones en el marco del Plan Nacional de Seguridad Alimentaria, en el contexto de la emergencia sanitaria por la COVID-19”, a cargo del Ministerio de Desarrollo Social;
4. $3.000 millones “destinados al Correo Oficial de la República Argentina (Corasa)”, a cargo del Tesoro;
5. $1.400 millones “para reforzar la partida destinada al Ministerio de Turismo y Deportes”, se nutre de un monto similar originado en el Presupuesto PAIS; y
6. $72,2 millones, a cargo del Poder Legislativo de la Nacional, para el “Plan Defensa de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes”.
En la reunión de Gabinete Económico, en Olivos, participaron los ministros de Economía, Martín Guzmán, de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y de Trabajo, Claudio Moroni, además del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y su segunda, la vicejefa Cecilia Todesca; la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont, y la secretaria Legal y Técnica de la Presidencia, Vilma Ibarra, además del viceministro de Economía, Haroldo Montagú y el jefe de Gabinete del ministro Guzmán, Gonzalo Güiraldes. Por el contrario, estuvo ausente con aviso el presidente del Banco Central, Miguel Pesce.
De ahí surgió que se esperan nuevas medidas, al ritmo de los acontecimientos y de las prevenciones que requiera la muy probable flexibilización de la cuarentena a partir del 13 de abril, según se analizó en la reunión que el viernes mantuvo Presidente con dirigentes de la CGT, la Unión Industrial Argentina y la Cámara Argentina de Comercio. Todos ellos participarán de un “comité de crisis” para definir precisamente de qué modo distintos sectores y actividades podrán comenzar a operar, según resuelva el comité de emergencia que integran el ministro de Salud, Ginés González García, el de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, junto con científicos del área sanitaria.
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