Como era previsible, el impacto del coronavirus ya comenzó a afectar los niveles de recaudación producto de la menor actividad. La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) informó hoy que los ingresos tributarios crecieron 35,3% respecto del mismo mes del año pasado, lo que implica una caída de unos 12 puntos frente a la inflación.
De acuerdo con la planilla del organismo recaudador, los ingresos tributarios alcanzaron a $443.636,7 millones. Por lo tanto, en el primer trimestre la recaudación ascendió a 1,4 billones, que implica un incremento del 41%. “Al condicionamiento que imponía sobre la recaudación el bajo dinamismo en el nivel de actividad arrastrado desde el año pasado, se sumaron las consecuencias económicas de la pandemia del coronavirus”, aseguró la AFIP en el comunicado.
El IVA fue uno de los impuestos que más impacto tuvieron por la pandemia. Su recaudación creció 25,6% frente al mismo mes del 2019, afectada por los efectos del aislamiento social, preventivo y obligatorio implementado para prevenir la propagación del virus. También se vio afectada, aclaró el organismo, por las compensaciones realizadas hacia otros tributos, como Ganancias y Combustibles, y las mayores devoluciones efectuadas a las empresas exportadoras y al sector agropecuario, que ascendieron casi a $7.000 millones.
Concretamente, los ingresos por IVA alcanzaron en marzo los $136.170,4 millones, de los cuales $99.168,7 millones correspondieron al IVA impositivo, que mostró un alza de apenas 21,2% interanual. “En el principal impuesto al consumo, es decir el IVA, se pudo notar una aceleración respecto a la caída de febrero. Para repetir la performance de aquél mes, en el que cayó un 7,9% en términos reales, el IVA neto debería haber crecido en marzo 35,4% nominal, y en realidad mostró una variación mucho menor, del 26,8%. La diferencia es de $9.100 millones”, precisó el economista del IARAF, Nadín Argañaraz.
A su vez, los ingresos provenientes del Impuesto a las Ganancias anotaron un aumento del 30,9% en relación a marzo de 2019, hasta los $79.462,3 millones. Según precisó la AFIP, los ingresos asociados al tributo se vieron afectados por la disminución de la tasa del impuesto para las Sociedades, así como la actualización anual del mínimo no imponible y la tabla de alícuotas en Personas Humanas.
Los recursos vinculados con el Sistema de Seguridad Social treparon 40% en relación con el mismo mes del año anterior. Ascendieron a $119.929,2 millones, de los cuales $48.533,9 millones fueron en concepto de Aportes Personales y $69.703,1 millones, de Contribuciones Patronales, que representan aumentos del 40,3% y 41,9%, respectivamente.
En cuanto al Impuesto PAIS, durante su tercer mes de vigencia generó ingresos por $6.399,9 millones. El monto recaudado por el nuevo tributo a lo largo del primer trimestre supera los $17.000 millones.
Los Derechos de Exportación alcanzaron en marzo los $28.999,1 millones, un incremento del 59,6% frente al mismo mes del año pasado. Entre los factores que incidieron de manera positiva sobre la recaudación, se destaca la modificación del esquema de alícuotas. No obstante, aseguró la AFIP, los pagos extraordinarios registrados durante los últimos dos meses de 2019, ante la expectativa de cambios en la fórmula de cálculo, afectaron los ingresos por este concepto. La variación en el tipo de cambio también incidió de manera favorable sobre la recaudación. En tanto, los Derechos de Importación y Tasa de Estadística ascendieron a $13.623,3 millones en marzo del 2020, lo que reflejó un alza interanual de 44%.
En cuanto al impuesto al cheque, recaudó en marzo $32.316,5 millones, un 44,7% más que el mismo período del año anterior, en tanto que ingresaron al fisco en concepto de Bienes Personales $1.613,9 millones, 366,4% más que en marzo de 2019 debido a que el mes pasado ingresó el pago a cuenta establecido para los contribuyentes con bienes en el exterior por el período fiscal 2019.
El informe del IARAF sostiene que parte de la menor recaudación observada en marzo, principalmente la de IVA, se vio afectada por la falta de liquidez derivada del aislamiento obligatorio que se ha hecho para prevenir la propagación del contagio. “Es decir que a nuestro criterio, parte de lo no recaudado obedece a un aumento de deuda por parte de contribuyentes”, remarcó la consultora, al agregar que será clave analizar la recaudación de abril.
Este mes -explicó Argañaraz- va a caer el devengado de los impuestos sobre la actividad porque van a incidir las menores ventas de marzo (en abril se paga saldo IVA de marzo), a lo que se sumará el no pago por falta de liquidez de los contribuyentes.
“Dada la coyuntura actual, sería esperable pensar que la administración resigne las metas fiscales que se había planteado. Descartada la recaudación extra esperada por la Ley de Solidaridad debido a la caída de la actividad, se han anunciado algunas medidas para contener la crisis y cuidar los puestos de trabajo, aunque podrían restar aún medidas tributarias más fuertes”, finalizó el informe del IARAF.
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