Expertos internacionales vaticinan una recesión generalizada, pero no hay consenso sobre su magnitud y extensión

Dos economistas de London Business School observan una visión más negativa en los analistas de Europa que los de EEUU, mientras que los de países emergentes aún parecen no tener muy claro cuál será el impacto final

Parques públicos, y también fábricas, se cierran transitoriamente, ante el avance del coronavirus y las recomendaciones de aislamiento de las personas (Reuters)

Luego de un primer trimestre en que se esperaba una desaceleración del crecimiento del PBI europeo en 0,1 punto porcentual respecto al esperado, para el segundo cuarto del año se pasó a una contracción de entre 0,3% y 0,4%, en particular a partir del punto de giro que marcaron las expectativas desde la última semana de febrero, cuando la pandemia comenzó a extenderse a un ritmo inquietante, en especial en Italia y España.

Los impactos más relevantes de la crisis se repiten en los países más afectados, y también ahora en la Argentina: en restaurantes, hoteles, todos los servicios vinculados al turismo de cabotaje e internacional, y venta de bienes durables, como automotores, motos, muebles, electrónicos, y también productos de consumo masivo prescindibles, y por extensión en las industrias y en los trabajos personales en la marginalidad.

Esas son las primeras reflexiones que en un paper de 92 páginas describen Paolo Surico y Andrea Galeotti, profesores de Economía en London Business School, sobre “la economía de la pandemia: el caso del Covid-19”, efectos y recomendaciones de medidas de gobierno.

Los impactos más relevantes de la crisis se repiten en los países más afectados y ahora también en la Argentina

Y como ya se observa en la Argentina, el trabajo describe que muchas empresas comenzaron a reconsiderar y aumentar la aceptación del trabajo a distancia, y más flexibilidad horaria para los trabajadores, y consideran “podría derivar en un cambio persistente, que vino para quedarse, pero se trata de oportunidades desiguales: porque solo las personas más calificadas pueden trabajar desde casa (educación, servicios, empleos corporativos, con exclusión de los dedicados al sistema de salud), pero no en otras tareas, como el servicio doméstico, la construcción, y muchas tareas en plantas industriales, y empleados en comercios y servicios de remis y mensajería”.

El trabajo a distancia comenzó a difundirse a partir del aislamiento que produjo la pandemia, pero se prevé que podría sostenerse en el tiempo en muchas actividades (Foto: Pixabay)

En una apretada síntesis del informe, en lo referente al plano de la economía personal y empresaria, junto a las recomendaciones de política económica, Paolo Surico y Andrea Galeotti, destacan fenómenos que también comenzaron a manifestarse en el plano local:

- Las empresas (especialmente las más dependientes de flujos de efectivo) carecen de liquidez para cumplir compromisos, al tiempo que se enfrentan a una menor demanda y por lo tanto se ven obligadas a solicitar el pedido de concurso de acreedores, y hasta caer en la quiebra, porque la incertidumbre se extiende tanto del lado de la demanda como de la oferta, a causa de la propagación del Covid-19.

- Trabajadores que pierden puestos por el cierre de las empresas dejan de percibir ingresos y eso realimenta el ciclo recesivo de oferta de bienes y servicios: disminuye el consumo, eventualmente deprimiendo la demanda agregada, de modo que la economía ingresa en una espiral depresiva.

- El virus Covid-19 no es ‘solo’ un choque (grande) sobre los fundamentos económicos reales; es un choque en el funcionamiento de los mercados, porque introduce ‘un muro entre la demanda y la oferta’ que se realimenta fuertemente: se contrae el suministro, que lleva a la contracción de las compras, y a disminuir la producción, y conduce a una gran destrucción del superávit económico.

El Covid-19 introduce ‘un muro entre la demanda y la oferta’ que se realimenta fuertemente: se contrae el suministro, que lleva a la contracción de las compras, y a disminuir la producción

De ahí que entre las recomendaciones de los expertos de London Business School se destaca la de “buscar un equilibrio a corto plazo entre el aplanamiento de la curva de la epidemia y el tamaño de la recesión”, porque la lenta disminución del pico de infecciones es probable que prolongue el tiempo que la economía no pueda alcanzar el óptimo de pleno uso de la capacidad de producción de bienes y servicios.

La complejidad del ciclo de los negocios

La economía es compleja, está hecha de agentes interconectados (proveedores, clientes, consumidores, trabajadores, bancos): decisiones racionales individuales pueden causar una reacción en cadena. Los consumidores no gastan porque se autoaíslan; las empresas reducen costos y también la nómina de personal y de proveedores; las entidades financieras recortarán los créditos que no ofrezcan suficiente garantía de repago.

Para la salud, el aislamiento tiene externalidades positivas. Para la economía, el aislamiento tiene externalidades negativas

"Para la salud, el aislamiento tiene efectos positivos. Para la economía, el aislamiento tiene consecuencias negativas" (Reuters)

Efectos directos e indirectos en la economía

El trabajo de Surico y Galeotti detalla el comportamiento habitual de los agentes económicos, y lo sintetizan en cinco momentos o rondas secuenciales:

Primera etapa: las interrupciones del lado de la oferta y el gran número de muertes generan mayor incertidumbre y pánico para los hogares y las empresas;

Segunda etapa: el aumento de la incertidumbre y el pánico conducen a la caída del consumo y la inversión;

Tercera etapa: gran caída de la demanda seca los flujos de efectivo corporativos, desencadenando las quiebras de las empresas;

Cuarta etapa: las desinversiones y la salida de empresas del mercado generan un fuerte aumento del desempleo; y

Quinta etapa: Los ingresos laborales caen significativamente y los préstamos dudosos aumentan, y aumenta aún más la incertidumbre.

Supuesto de rápido control de la pandemia

“En el caso de que se produjera una caída temporal de las actividades económicas: 50% durante un mes y 25% en los dos meses siguientes. Entonces, la caída del PBI sería de casi el 10% de la producción anual (Gourinchas, 2020)”, pronostican los economistas, porque consideran: “Si los países se bloquean más tiempo y agregan la espiral descendente de la oferta/demanda, los costos reales (sin intervenciones de políticas públicas) podrían superar el 15% del PBI”.

Si los países se bloquean más tiempo y agregan la espiral descendente de la oferta/demanda, los costos reales (sin intervenciones de políticas públicas) podrían superar el 15% del PBI

Una recesión mundial en el mundo avanzado es inevitable y una recesión en China parece ahora probable ya en en el segundo trimestre del corriente año”, destaca el paper de marras.

Los líderes del G-20 analizan el escenario mundial por videoconferencia (Reuters)

Los objetivos macroeconómicos recomendables

- Que los hogares retrasen los pagos de hipotecas y de alquileres y tengan efectivo en mano;

- Que los trabajadores reciban sus salarios incluso en cuarentena o si se despiden temporalmente.

- Que las empresas tengan suficientes flujos de efectivo (para pagar a los trabajadores y proveedores), en particular las pequeñas y jóvenes, y pueden evitar la quiebra.

- Apoyar el sistema financiero para evitar la crisis sanitaria se convierte en una crisis financiera.

Apoyar el sistema financiero para evitar la crisis sanitaria se convierte en una crisis financiera

Para poder cumplir con esos objetivos en la actual coyuntura mundial, los economistas sugieren las siguientes políticas macroeconómicas en los países más afectados por la pandemia del Covid-19:

A. Aumento del gasto en salud pública,

B. Alivios fiscales, reducciones de impuestos, feria impositiva, incentivos tributarios, y desgravaciones de actividades;

C. Ingresos universales temporales a los hogares; subvenciones en efectivo a las empresas; y

D. Reducir los tipos de interés, poner en marcha programas de expansión de la cantidad de dinero y planes de préstamos.

“Todas las medidas ayudarían, pero C es lo más aconsejable para detener el colapso económico inmediato”, concluyen los profesores de economía del London Business School.

En la Argentina muchas de las recomendaciones de los economistas fueron puestas en práctica, pero aún se advierte un predominio de medidas selectivas, sin alcance general, pese a que el Covid-19 no discrimina ni por sector y nivel de ingreso, ni por actividad productiva y comercial, porque al final afecta a todo el conjunto.

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