El sistema financiero puso en marcha hoy el clearing bancario luego de la suspensión dispuesta originalmente para los días de aislamiento social preventivo y obligatorio. El regreso del sistema de compensación de cheques respondió al pedido de empresas preocupadas por el quiebre de la cadena de pagos, pero su reinstauración es también un arma de doble filo para aquellas que vieron caer sus ventas por el parate económico y ahora tienen que encontrar fondos para cubrir esos documentos.
En los bancos, la jornada fue exigente desde el punto de vista operativo. Los cambios regulatorios que se establecen a toda velocidad los obligan a adaptar sus sistemas y procedimientos a toda velocidad, con la mayor parte de su personal trabajando en forma remota. Cuentan que el contacto de empresas preocupadas porque no pueden completar un pago o que no se concretó un cobro es constante, y que están trabajando en asesorar caso por caso.
Los problemas eran esperados. La Cámara Argentina de Comercio (CAC), se dirigió el miércoles al Banco Central para expresar su “preocupación por la reactivación del clearing bancario”. El argumento de la cámara de los comerciantes es que si bien parte de sus miembros gozan de un nivel de actividad de normal a por encima de lo habitual -como venta de alimentos y medicamentos-, el 70% de las empresas de restantes del sector se encuentran cerradas y sin flujo de fondos.
Desde antes, algunas entidades pyme pidieron a los bancos que dupliquen y hasta tripliquen el límite a los giros en descubierto o hasta que financien el pago de sueldos con un crédito blando o incluso a tasa cero. Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), pidieron que “se reformule la apertura del clearing” para las pymes, considerando que hace una semana se les cayeron los ingresos, interrumpiendo la cadena de pagos.
Muchas empresas están acostumbradas a procesar los cheques en ventanilla y ahora sólo quedan las vías electrónicas. La mayor parte de los bancos tiene los sistemas y las terminales de autoservicio para hacerlo todo digital, incluso desde homebanking.
Las alternativas que están dando las entidades financieras a sus clientes en caso de que no cuenten con los fondos para hacer frente a un cheque que emitieron a cuenta de ventas que se cortaron son distintas según el caso.
Por ejemplo, una de las formas en que tratan de administrarlo es recurriendo a otros cheques que las firmas tengan para cobrar a futuro, para descontarlos y adelantar el efectivo.
Otra, según el banco y la situación crediticia de cada empresa, es ampliar el límite al giro en descubierto, pero los bancos no pueden ampliarlo en general para todos sus clientes.
Por último, en breve debería estar en vigencia en todas las entidades la línea de créditos a 24% con la que el Banco Central espera que el sistema inyecte $350.000 millones para financiamiento empresario de corto plazo. Todo ello puede ayudar a patear hacia adelante el problema de liquidez que sufren hoy.
“Estamos atendiendo caso por caso, no es un día para aplicar el piloto automático”, contó Ángela Carulli, gerente de banca empresa de Credicoop.
“No damos una respuesta uniforme a todos, pero según el caso si estamos ante algún cliente que no puede cubrir un cheque les pedimos que aceleren descuentos de cheques que tengan por cobrar para hacerse de efectivo, o si es sujeto de crédito podemos pensar en alguna forma de financiamiento para que salga de la situación, pero cada caso es distinto. En algunos casos los cheques se van a tener que rechazar y renegociar entre las partes, porque hay sectores como turismo, restaurantes o comercios minoristas que inexorablemente van a pasar por una situación de dificultad que producto de las medidas que va tomando el Gobierno con flexibilidades entendemos que van a poder ir mejorando su situación”, agregó la ejecutiva.
En otro banco, en el que pidieron no ser mencionados, resaltaron las medidas que ya tomó el Gobierno para tratar de flexibilizar la situación para que las empresas afronten la caída en ingresos que causó la cuarentena.
“En principio, ya el Banco Central impide que se le cobre multas al que tiene un cheque rechazado, y tampoco permite que se le cierre la cuenta, hay alguna flexibilidad para los problemas que puedan surgir hoy. Eso más la línea de crédito para capital de trabajo con el tiempo van a ir ayudando a los que enfrenten problemas”, dijeron.
En breve debería estar en vigencia en todas las entidades la línea de créditos a 24% con la que el Banco Central espera que el sistema inyecte $350.000 millones para financiamiento empresario de corto plazo.
¿Y las empresas que esperaban cobrar un cheque que termina rechazado? “Si se rechaza es porque la situación crediticia no permite seguir financiando, en ese caso lo mejor es renegociar entre proveedor y cliente, el financiamiento en la cadena de proveedores, que siempre es un recurso extra al que recurren las pymes”, agregaron desde el mismo banco de capital nacional.
Otra fuente del sector, mientras tanto, dijo que van a ser días difíciles no sólo por los potenciales rechazos de cheques o necesidades de liquidez.
“Hay dos dimensiones. Una es la operativa, que tiene que ver con que muchos clientes están acostumbrados a procesar los cheques en ventanilla y ahora sólo quedan las vías electrónicas. La mayor parte de los bancos tiene los sistemas y las terminales de autoservicio para hacerlo todo digital, o incluso desde homebanking”, dijeron.
“La otra dimensión es la falta de liquidez de las empresas que frenaron a cero en estos días, a las que se está asistiendo desde distintos niveles, no sólo en el sector financiero. Desde postergaciones de vencimientos, de aportes patronales o hasta líneas de crédito dirigidas, el Gobierno va tratando de administrar esto y es algo dinámico, si lo decidido no alcanza van a sumar nuevas medidas”, dijeron.
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