El consumo fue uno de los sectores más golpeados durante 2019, lo que se vio reflejado en la cantidad de locales comerciales vacíos en la ciudad de Buenos Aires. Según un relevamiento efectuado durante enero y febrero de 2020 por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), la cantidad de espacios inactivos —por estar en venta, alquiler, clausurados o cerrados— creció un 13% en comparación con los mismos meses del año anterior. Sin embargo, en relación al período noviembre y diciembre de 2019, la suba fue de 27 por ciento.
En el sector destacan que en situaciones de crisis, en general, muchos dueños de comercios suelen “aguantar” hasta las fiestas de fin de año —una de los picos de venta del año— para luego tomar la decisión de cerrar su negocio o seguir adelante.
La medición se realizó en las ocho principales avenidas y calles comerciales porteñas (avenidas Córdoba, Pueyrredón, Cabildo, Santa Fe, Rivadavia, Avellaneda, Corrientes y peatonal Florida). En total, se detectaron unos 276 locales sin actividad comercial sobre un total estimados de alrededor de 3.000 locales disponibles que existen en esas zonas de la ciudad de Buenos Aires.
El consumo no depende solo del nivel de ingresos sino también de las expectativas
“La macroeconomía está estable. Pero en el consumo hay heterogeneidad porque todavía hay muchos interrogantes, como qué va a pasar con la deuda o el impacto que tendrá el coronavirus. El consumo no depende solo del nivel de ingresos sino también de las expectativas”, señaló Matías Bolis Wilson, economista jefe de la CAC.
Según la medición, la suba en la cantidad de locales vacíos se dio en todos los corredores porteños analizados, excepto en la avenida Pueyrredón, desde Rivadavia hasta Mansilla. En tanto, en la avenida Avellaneda, donde casi exclusivamente los locales se dedican a la venta de indumentaria, fue donde más aumentó la cantidad de locales inactivos: pasó de 3 a 37, en comparación entre enero y febrero de 2020 y entre noviembre y diciembre de 2019.
“En los últimos 60 días el mercado comenzó a moverse con consultas y ofertas. El 2019 fue insólito con crisis de consumo, devaluaciones, elecciones. Cuando un mercado vive de crisis en crisis, se frena. En los primeros meses comenzó a cambiar esa tendencia”, explicó Marcelo Zuliani, gerente Comercial de Colliers International, una empresa de servicios inmobiliarios que analizó el mercado de corredores comerciales.
Un informe de la consultora Colliers mostró que durante el segundo semestre de 2019, la “tasa de vacancia” (porcentaje de locales que se encuentran disponibles para ser alquilados) fue de 1,65%, con una disminución de 0,75 puntos con respecto a la registrada durante el primer semestre de ese año. Los corredores con mayor tasa de vacancia fueron avenida Córdoba, con 5,54% y avenida Santa Fe, con 4,75%. “A pesar de que Córdoba mostró la mayor tasa de vacancia, se observó que el corredor Florida posee la mayor cantidad de metros disponibles en cuanto a superficies netas”, detalló Zuliani. El estudio analizó 13 avenidas y calles comerciales.
Con respecto a los precios de los alquileres, el valor de renta promedio del mercado en los corredores relevados se ubicó en los USD 30,58 por metro cuadrado (unos $1.926). Para un local de 80 metros cuadrados, por ejemplo, es un alquiler de $154.000 aproximadamente. Los precios bajaron un 29% en comparación con el semestre anterior.
Los valores por cada zona analizada, muestran una variación que va desde USD 5,66 ($362) por metro cuadrado en avenida Corrientes a USD 52,89 ($3.384) en la calle Florida. Aunque destacaron que hoy el mercado no tiene un precio estable ya que conviven contratos vigentes de más tiempo, otros recién alquilados y otros que están en medio de una negociación. En la ciudad de Buenos Aires, además, un 8% de los contratos de alquiler ya se fijan en dólares.
“El mercado de retail (comercio minorista) suele tener baja vacancia y en tiempo de crisis bajan los precios y cambia el tipo de comercios o la categoría de los inquilinos. Se mueve un poco más lento que otros mercados porque requiere renegociar contratos, montar un negocio, que son cosas que llevan tiempo", indicó el ejecutivo de Colliers. Un ejemplo es la avenida Santa Fe, cuya oferta de locales fue mutando desde las primeras marcas de indumentaria a más locales de servicios. Los precios también variaron: históricamente era más caro el tramo cercano a Callao y más barato el cercado a Pueyrredón y ahora es al revés.
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