Ley de góndolas: 7 controles para la posición dominante y las 5 dudas del mercado

Hoy las grandes cadenas de supermercados representan el 35% de las compras de los argentinos: el consumo mayoritario está más allá del canal que deberá controlar y oportunamente reglamentar esta norma

(Shutterstock.com)

“El hombre, indudablemente, no es perfecto. Y todas las instituciones –entre ellas la economía de mercado– que pueda crear participarán forzosamente de esa imperfección”, dijo Ludwig von Mises en su trabajo la “Acción Humana”, en 1949.

En su discurso de la semana pasada, en el Congreso, el presidente Alberto Fernández habló de los supermercados y mencionó la “concentración económica y posición dominante” de algunos de ellos.

Cuando se va de compras a estos centros, se puede verificar que lo que dice el Presidente es cierto en muchas categorías de productos. En Panes Blandos, por ejemplo, tres empresas se llevan el 95% de mercado. En hamburguesas, sólo tres empresas se llevan el 92% de la góndola. En Detergentes para ropa, tres empresas se llevan el 93 % de la góndola. EN Cremas dentales, el 96% pertenece a 3 empresas. Así se podría seguir con casi todo el supermercado.

De acuerdo a un relevamiento de Focus Market y en el caso puntual del Panes blandos, una empresa tiene casi el 70% de participación de góndola a través de diferentes marcas.

Joseph Stiglitz, premio nobel de Economía y mentor de Martín Guzmán, el ministro de Economía de la Nación, ha expresado oportunamente: “Cuando los mercados fallan, el gobierno viene y recoge los platos rotos. Sabiéndolo, el gobierno debe hacer lo que pueda para evitar las calamidades”.

En teoría, la Ley de Góndolas aprobada la semana pasada en el Congreso, vendría a solucionar esta situación de la oferta en el supermercado de la siguiente manera:

1- Debe haber un mínimo cinco proveedores del mismo producto en góndola.

2 - Ninguno puede superar 30 % por marca.

3 - Debe haber espacio disponible para ubicaciones Físicas y Virtuales de un 25% para productos pertenecientes a Pymes.

4 - En la línea de cajas de haber 50% de productos Pymes.

5 - Está prohibido alquilar espacios preferenciales.

6 - Los productos de menor precio deben estar a una altura equidistante entre el primer y último estante.

7 - Los productos de menor precio en espacios virtuales (páginas web de las grandes cadenas) deben estar en la primera visualización de productos.

El Senado aprobó la ley la semana pasada (Télam)

A la ley le falta su reglamentación, pero en el propio debate se plantearon las siguientes dudas e inquietudes:

1 - ¿Las grandes cadenas son un mal del pasado o del presente? Hoy las grandes cadenas de supermercados representan el 35% de las compras de los argentinos. El resto se da en supermercados chinos, autoservicio nacional, comercio minorista tradicional, ferias, canal mayorista y tiendas de descuentos, entre otros. Es decir, el problema de los precios y posiciones dominantes pasaría por un tercio del canal minorista. Hoy, las compras de los argentinos están más allá del canal que deberá controlar y oportunamente reglamentar esta ley.

2 - ¿Concentración por mercado o por culpa del Estado? El Estado intenta regular el funcionamiento de libre mercado del canal de la comercialización minorista en consumo masivo. Sin embargo, la inquietud está dada sobre si no fue el propio Estado que con ciclos económicos de caída brusca de la actividad con recesión, crisis y una presión tributaria enorme dejo fuera de juego en los últimos 30 años a miles de Pymes perdiendo el consumidor opciones de elección y concentrándose la oferta en pocos oferentes en el mercado.

3 - Nivel de Producción y Financiamiento Pyme. En un mercado donde por ejemplo hay dos jugadores que representan el 97% de la góndola estarán las Pymes dispuestas a incrementar su nivel de producción, incorporación de bienes de capital y mano de obra sin reformas estructurales en la economía, como disminución de la presión tributaria y reforma laboral que evite la industria del juicio que a medida que crecían las llevo al peor castigo como es el cierre. ¿El nivel de financiamiento productivo con tasas del 35% –por ejemplo del Banco Nación– es suficiente para un consumo masivo que aún se encuentra en caída, aunque desacelerando, y sin certeza que haya un rebote pero no un crecimiento sostenible en el tiempo? Es lo que se pregunta el empresario Pyme. Tanto el microempresario que fue el 91% de los casos de cierre en el sector Pyme el año pasado que no pudieron sostener la presión tributaria en contexto de caída como el pequeño y mediano.

Cristina Kirchner y Alberto Fernández en la apertura de sesiones ordinarias 2020 (Prensa Senado)

4 - ¿Mercado por Ley o por Competencia? La ley del mercado se da entre la oferta y la demanda en una situación de competencia. En los años 80 y 90, la penetración de las grandes cadenas de supermercados llevó al cierre a miles de almacenes y autoservicios nacionales. Mientras el mundo legislaba para que las grandes superficies no se instalasen en las grandes ciudades en nuestro país el supermercado concentraba la economía minorista. Cuando ya esa concentración no existe y el consumidor compra en otras formas y espacios comerciales por que la propia oferta comercial minorista supero la restricción de la concentración económica del consumo masivo en pocas manos el Estado se platea controlar al menos 25 años más tarde un fenómeno que la propia demanda dejo en el pasado y el mercado lo resolvió con una nueva oferta y cambios de hábitos sociales y culturales de compra.

5 - Control de la Ley de Góndolas. Con el programa de Precios Cuidados vigente desde 2014 en Argentina el Estado intenta establecer precios de referencia para categorías y productos de consumo masivo. La dificultad para ejercer esta tarea se encuentra en controlar al menos unos 3000 puntos de ventas que participan de este programa. En el caso de la Ley de Góndolas la tarea será “titánica” pues no son 311 productos como en el caso de “Precio Cuidados” sino todos los productos pertenecientes a la categorías de consumo masivo controlados bajo 7 variables dispuestos en la ley y señalados arriba tanto para el canal físico y online.

Regresando a la cita de Stiglitz y tomando el caso Argentino puntualmente. No será que en los últimos 40 años las políticas públicas han generado las condiciones para que el Estado sea quien “rompe los platos” con malas decisiones que llevaron a que no haya comida para todos en un país que produce alimentos para 400 millones de habitantes? Hasta el propio liberal Milton Friedman nos da la respuesta. “Por supuesto, la existencia de un mercado libre no elimina la necesidad de un gobierno. Por el contrario, como hemos dicho, el gobierno es esencial como foro para determinar las reglas del juego y como árbitro para aplicar las reglas que se decidan”. No será que los gobiernos que hemos tenido han colocado malas reglas a lo largo del tiempo, que han sido malos árbitros perjudicando el juego de los jugadores del mercado en una economía que año a año cayó en todas las tablas de posiciones del crecimiento y desarrollo a nivel mundial? Dejó la inquietud mientras “voy de compras al chino de la vuelta de casa”.

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