La carrera por colocar los últimos billetes de $5 entró en la recta final. En apenas 3 días la moneda que nació en 1992 finalmente saldrá de circulación con un valor, medido contra el dólar, de 0,07.
La fecha original para que el billete de 5 pesos deje de tener validez era el 31 de enero, pero el Banco Central retrasó el cronograma durante un mes por pedido de diversas cámaras empresarias y comerciales, que señalaron que necesitaban más tiempo para acceder a las monedas y organizar sus circuitos administrativos.
Además, la decisión también tuvo en cuenta que el cronograma original para sacar el billete de 5 pesos de circulación se había iniciado el 1° de agosto de 2019, fecha en que el BCRA dejó de distribuirlos entre los bancos y comenzó a retirarlos para su destrucción. Desde entonces, habían salido de circulación 50 millones de billetes, pero esa cifra representa sólo un 10% del total del circulante de billetes de cinco pesos en todo el país. Según las estimaciones, en ese entonces aún quedaban en los bolsillos de los argentinos otros 450 millones de billetes.
En este sentido, el BCRA dispuso una mecanismo de entrega directa de monedas a entidades comerciales y empresas. Los interesados pueden consultar al respecto en ayudaenlinea@bcra.gob.ar. Pero la fecha ya quedó establecida: a partir del 29 de febrero los locales comerciales ya no tienen la obligación de aceptar el billete.
Pero esto no significa que, una vez que termine el mes, aquel que se quedó en su poder con el billete que lleva la imagen de José de San Martín sólo tenga la opción de enmarcarlo o venderlo en el mundo de la notafilia a un coleccionista de billetes.
El Central dispuso que entre el 1° y el 31 de marzo, quienes todavía tengan billetes de 5 pesos en su poder podrán presentarlos en cualquier sucursal bancaria del país, donde podrán depositarlos en una cuenta. También podrán canjearlos por las nuevas monedas de 5 pesos o por monedas y billetes de otros valores. A partir del 1° de abril, no habrá más opciones para recuperar su valor, ni presentándolos en los bancos, ni en el Banco Central, ni por ninguna otra vía.
Asimismo, hasta su desaparición total el billete de 5 pesos coexistirá con la moneda del mismo valor, de color plateado y con la imagen del arrayán.
Presentes en los bolsillos de los argentinos desde 1992, la salida de circulación de los billetes de 5 pesos ejemplifica la pérdida de poder adquisitivo de la moneda local, como producto de tantos años de inflación. Cuando salió por primera vez a la calle, el billete verde servía para comprar 5,2 kilos de pan o 9 kilos de azúcar. Hoy, apenas se podrían comprar con él 50 gramos de pan o 110 gramos de azúcar.
Adiós, General
Además, cuando el próximo 1 de marzo deje de existir este billete, la imagen del general José de San Martín volverá a estar ausente después de 78 años de presencia ininterrumpida en los sucesivos signos monetarios argentinos.
Como un testigo involuntario de cómo se fue desvalorizando el dinero de circulación legal que tuvo el país desde 1881 (peso moneda nacional, peso Ley 18.188, peso argentino, austral y el actual, convertible hasta enero de 2002), San Martín estuvo presente en por lo menos cuarenta billetes y nueve monedas.
El debut de San Martín en los billetes locales fue en uno de 1 peso con respaldo de plata boliviana, emitido por el Banco de Londres y Río de la Plata, en 1826 en la provincia de Santa Fe.
El ingreso de San Martín al peso moneda nacional, el primero de los signos monetarios de curso legal en todo el territorio argentino, tuvo lugar en 1883, dos años después de la creación de la unidad monetaria que regiría por 88 años.
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