Lejos de cualquier especulación basada en la controversial relación del gobierno con Mercado Libre, varios municipios gobernados por distintas fuerzas políticas se inclinaron por contratar a Mercado Pago, la división financiera de la empresa fundada por Marcos Galperín, para incorporarla a su esquema de cobro de tasas e impuestos municipales.
El objetivo de los intendentes no atraviesa ninguna consideración sobre eventuales vinculaciones de la empresa con el macrismo o peleas con el oficialismo: apunta a mejorar su recaudación y reducir la morosidad, algo vital en tiempos de apremios presupuestarios.
Municipios como San Martín, Lanús, Pilar, Rafaela o Córdoba ya negociaron con Mercado Libre y contrataron sus sistemas de cobro online. Otros gobiernos comunales como San Fernando, Berazategui o Lomas de Zamora mantienen abiertas gestiones para contratar sus servicios. Hay muchos intendentes más que, en el conurbano y en el interior bonaerense, tienen el mismo objetivo.
Fuentes de la empresa aseguraron que la filiación política de los intendentes no influyó en las contrataciones, que éstas siguieron “estrictamente todos los procedimientos que dispone el derecho administrativo”, incluyendo la aprobación de los respectivos concejos deliberantes, ya sea con procesos de licitación o de contratación directa, según el caso.
Por caso, el acuerdo de Mercado Pago con Pilar se cerró el año pasado con Nicolás Ducoté, de Cambiemos, y continúa en pie con Federico Achaval, del Frente de Todos. En Lanús la contratación se llevó adelante con un macrista puro, como Néstor Grindetti, y en el municipio de San Martín el interlocutor fue Gabriel Katopodis, intendente hasta el 10 de diciembre pasado, hoy ministro de Obras Públicas de Alberto Fernández. Una gobernacion también se sumó: Rentas Córdoba también tiene a Mercado Pago como proveedor.
Con poco ruido pero mucha persistencia, Mercado Libre desarrolló este segmento de su negocio en paralelo a episodios como las diatribas contra la empresa de Juan Grabois, las demoras de la ley de economía del conocimiento, una investigación judicial contra Galperín, los intentos de la Bancaria por captar a sus empleados y otros vaivenes.
Desde el lado de la política, la solución tiene un grado de efectividad en términos de recaudación que hace que los intendentes olviden cualquier grieta. En Mercado Pago aseguran que las soluciones de pago pueden llegar a reducir la morosidad de un municipio en un 15%, dependiendo del perfil de los contribuyentes y de las alícuotas de cada partido. Mencionan ejemplos en los que desde su incorporación un 6% del padrón total de contribuyentes ingresó en un plan de moratoria, algo que puede traducirse en mucho dinero para las arcas municipales.
La clave está en que el aporte de Mercado Pago no se limita a ofrecer muchos medios de pago (tarjetas de débito, de crédito y dinero cargado en la billetera electrónica) para pagar los impuestos sino también interviene con precisión a la hora de contactar al pagador. Los datos que la empresa posee sobre el contribuyente, incluyendo las herramientas de geolocalización le permite ofrecer moratorias personalizadas y otros mecanismos con mejor alcance que las tradicionales cartas postales que puede enviar un municipio.
“Colaboramos en el plan de comunicación del municipio y ayudamos a incrementar el tráfico de sus sitios. Con las herramientas de geolocalización, podemos ayudar a enviar mensajes para promover nuestro canal de cobro en forma más eficiente a través de mails, mensajes en nuestra aplicación u otras vías”, explicaron en Mercado Pago.
“Para los municipios, incorporar esta tecnología no implica una inversión específica. Solo es necesario contar con un equipo de sistemas para hacer las adecuaciones necesarias en sus sistemas actuales. La implementación técnica es un proceso que habitualmente ronda entre los 15 y 30 días”, agregaron.
También destacan como beneficio que con el cobro vía Mercado Pago la deuda del contribuyente se cancela online, inmediatamente después del pago, a diferencia de la conciliacion diferida que es necesario realizar si el pago se hace en una ventanilla de una red de cobro, un banco o una oficina municipal.
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