El 2020 comenzó con nuevos aumentos en los servicios de streaming. Luego del incremento del 8% que estableció la ley de Emergencia Económica para la contratación de servicios digitales, las compañías comenzaron a incrementar sus tarifas: primero fue la plataforma de series y películas Netflix y ahora le llegó el turno a la compañía sueca de música y podcast, Spotify. La empresa notificó a sus clientes que a partir del 3 de febrero, el precio de Premium Individual “va a cambiar de $99 a $139 pesos argentinos + impuestos aplicables”. Esto implica un alza del 40%.
Entre los argumentos de la suba desde la compañía señalaron que les permitirá seguir ofreciendo el mejor servicio de streaming de audio. En el caso del paquete Familiar, el precio pasa de $149 a $239 + impuestos aplicables, dijeron desde la plataforma en su página web. Representa un incremento del 60% en comparación con el costo que tenía el año pasado.
En el caso de los usuarios que ya son Premium, es decir que ya pagan por el servicio, la suba se aplicará recién a partir de abril. “Como ya sos Premium, vas a tener dos meses extra con el precio actual. No tenés que hacer nada - tu factura se va a actualizar automáticamente en abril”, sostuvo la compañía en un mensaje a sus clientes.
No hay que perder de vista que la plataforma de streaming Netflix informó a fines de enero a través de un comunicado un aumento en el precio de sus suscripciones para usuarios de Argentina. El objetivo, explicó la compañía, es “reflejar continuas inversiones en contenido de excelencia y en mejoras en el servicio”.
La empresa californiana comunicó que los precios varían a medida que se agregan al catálogo “títulos exclusivos que incluyen series, películas, documentales, especiales de comedia y contenido para niños”, al igual que “nuevas funciones del producto” y una “mejora en la experiencia” para sus suscriptores.
Para un plan básico que habilita al usuario a reproducir películas y series en una pantalla, la compañía de California cobrará $199 (sube 11,17%). En tanto, si el plan incluye la posibilidad de tener contenido en dos pantallas con alta definición, lo que sería un plan estándar, el costo será de $319 (aumenta un 18,59%).
Mientras que para un plan “Premium”, con el que se puede acceder a reproducir material en cuatro dispositivos al mismo tiempo y en ultra alta definición, el precio será de $499 (se incrementa un 21,68%).
Cabe recordar que la contratación de servicios digitales como Netflix, Spotity o Airbnb no pagan el 30% de recargo, pese a tratarse de consumos en dólares, según se desprende de la reglamentación de la Ley de Solidaridad y Reactivación. En cambio, quedó establecido en el artículo 17º que debe tributar 8%.
En los considerandos de la norma publicada en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo enfatizó que “debido a que determinados servicios digitales indicados en la Ley de Impuesto al Valor Agregado, texto ordenado en 1997 y sus modificaciones, se encuentran gravados por este tributo, es necesario fijar una alícuota reducida”.
Sucede que son servicios que si bien se facturan en dólares, tienen un amplio alcance en la población y, por sobre todo, pagan IVA, por lo que si el recargo del 30% generase un menor consumo de estos servicios, también se vería afectado el Estado con menor recaudación.
Seguí leyendo: