En los últimos dos años la mayoría de los indicadores económicos reflejaron cifras negativas, producto de la suba del tipo de cambio en más del 230% y una inflación que superó el 127%. De ese contexto, no estuvieron exentas la industria y la construcción. En el acumulado de los primeros once meses de 2019 el Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPI) mostró un descenso del 6,9% en comparación con igual período de 2019, mientras que el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) tuvo una baja del 8%, según el Indec.
Asimismo, la venta de insumos para la construcción registró en diciembre una mejora de 9,3% respecto de igual mes del año anterior, pero en el acumulado del año marcó una caída de 7,8%, según el Índice Construya (IC).
Sin embargo, aquellas personas que tenían dolarizados sus ahorros y aprovechan el verano para remodelar o refaccionar su casa o departamento se encuentran hoy con una oportunidad.
Aquellos que tienen ahorros en pesos y no pueden acceder al mercado de cambios con las facilidades que tenían un año atrás, no sólo por el límite mensual de USD 200 que habilita en Banco Central, sino porque desde fines de diciembre deben tributar el Impuesto PAIS de 30%, tienen la posibilidad de dolarizarse invirtiéndolos en su vivienda, porque el precio de referencia de venta se mantiene en dólares.
“Si la casa o el departamento está bien ubicado y solo es un tema de espacio siempre hay opciones para remodelar y muchas veces es más conveniente económicamente que mudarse”, dijo a Infobae el arquitecto y socio fundador de Remodelatucasa, Damián Revelli.
Si la casa o el departamento está bien ubicado y solo es un tema de espacio siempre hay opciones para remodelar y muchas veces es más conveniente económicamente que mudarse (Damián Revelli)
Remarca Revelli: “si el dólar se plancha y no resulta indexado como está sucediendo en estas últimas semanas y el proyecto del Gobierno es que el tipo de cambio siga detrás de la inflación, hoy el mejor negocio para ahorristas es el volcar los pesos en su casa porque se dolarizan ya que las propiedades de buen nivel están culturalmente dolarizadas”.
Ravelli explica que las propiedades se valorizan y mucho más de la plata que se invierte cuando se lleva a cabo una remodelación. “Nosotros les recomendamos a los clientes que tasen la casa antes de remodelar y después de haberla refaccionado con diferentes inmobiliarias para que puedan entender la cantidad de valor agregado que genera una buena remodelación. La cuenta rápida que hacemos es que si a tu casa le ponés 10 mil dólares, se valoriza en mínimo 20 mil dólares. Osea ganas un 100 por ciento de tu inversión. En nuestra experiencia ha sido así”, detalla.
Presupuestos para diferentes espacios del hogar
Baño:
Remodelar un baño estándar que incluya trabajo de albañilería, plomería, electricidad, pintura, volquetes para descartar escombros, el retiro de los mismos del inmueble, limpieza mobiliario y accesorio (toalleros, grifería estándar, portapapel higiénico, espejo, jabonera) puede ir desde los $240.000 a los $290.000, según el relevamiento que llevó a cabo Infobae. El precio incluye la dirección de obra, seguros del personal y garantía.
“Hay varias formas de encarar una reforma, o remodelación. La más económica es que el interesado tenga el tiempo y el conocimiento para encargarse el mismo de la obra y vaya contratando a cada gremio directamente (albañiles, plomero, electricista), comprando los materiales, y coordinando cada trabajo. Esto seguramente va a llevar un poco más de tiempo y siempre se corre el riesgo de que algo salga mal y no va a tener una garantía del trabajo, por lo que muchas veces, después de buscar gente que termine algo empezado o reparen los problemas que hizo otro no es nada fácil y termina saliendo más caro”, sostiene Javier Fernández de León, arquitecto y socio gerente de Remodelaciones Integrales.
Hay varias formas de encarar una reforma, o remodelación. La más económica es que el interesado tenga el tiempo y el conocimiento para encargarse el mismo de la obra y vaya contratando a cada gremio directamente (albañiles, plomero, electricista), comprando los materiales, y coordinando cada trabajo
Para remodelaciones pequeñas como baños, cocinas o un departamento, el profesional recomienda buscar una empresa o estudio de arquitectura que se especialice en este rubro y encargue de todo, de la “ejecución de obra, manejo del personal, cómputo y listados de materiales, gestión y asesoramiento”.
“Contratando a empresas o estudios el precio va a ser un poco mayor que si lo hace el dueño del departamento, pero si son profesionales deberían otorgar una garantía por el trabajo y seguramente la obra va a resolverse correctamente y en un plazo óptimo. Teniendo en cuenta que el propietario puede seguir con su trabajo mientras se realiza la obra”, destaca.
Cocinas:
Las cocinas suelen ser un poco más caras que los baños, básicamente por el mueble y la mesada. El costo de una mediana varía según la dimensión y los objtivos, se estima que puede llegar hasta $350.000 o $400.000 las que tienen el formato de isla. Las refacciones tienen que ver con el cambio de la cerámica de pared, pileta común, sustitución de caños. Y llevan además alacenas, pintura del techo e incluye luz tanto en la alacena como en la cocina general.
“Nosotros trabajamos con un sistema que llamamos VAP (Visita de Asesoría Profesional), donde va un arquitecto a tu casa y te asesora y si va todo bien se confecciona un CDC que es un Costeo, Desarrollo de Tareas y Cómputo que permite tener una bitácora de obras donde se puede seguir cada paso”, agregó Ravelli, de Remodelatucasa.
Es muy importante confeccionar un listado preciso ya que de lo contrario el cliente luego suele quejarse cuando la obra siempre sale mucho más de lo que creía que le iba a salir y suele culpar a los profesionales
El arquitecto advierte que es muy importante confeccionar un listado preciso ya que de lo contrario el cliente luego suele quejarse cuando la obra siempre sale mucho más de lo que creía que le iba a salir y suele culpar a los profesionales. Por eso ofrece a sus clientes la planificación pormenorizada de los gastos. “¿Quién pone en su listado de tareas el costo de limpiar o el costo de ajustar las puertas con un buen cerrajero?”, pregunta Ravelli. Y añade: “Hoy en día un rollo de cartón corrugado vale en promedio $500 y tal vez en una obra bien protegida se usan 10 o 20 rollos para que no se te lastimen los pisos o los muebles”.
Parrillas:
El arquitecto Fernández de León, de Remodelaciones Integrales, dijo: “construir una parrilla nueva, con materiales y mano de obra (incluye la herrería, tejuelas refractarias, chimenea, pulmón, materiales de albañilería y revestimiento) puede costar unos $70.000 y demorar unas dos semanas.
En tanto, Ravelli, agrega que se pueden conseguir las parrillas premoldeadas que arrancan en $50.000. Aunque no deja de lado que las fabricadas integralmente pueden superar los $300.000 (aquellas que tienen tapa y chimeneas bien resueltas).
Cabe destacar que los precios de todas las remodelaciones pueden variar entre un 10% y 20% según la zona. Es que la complejidad de las obras elevan los costos. Por ejemplo, si es una casa, hay costos más baratos como dejar el volquete en la puerta por dos días.
“Si la obra es en pleno centro o en una zona muy densamente poblada y con tráfico, tenemos que sacar los escombros un domingo o embolsarlos, por ejemplo. Lo mismo con los ascensores que algunas cosas ni siquiera entran”, alertan los más experimentados en refacciones y ampliaciones.
Por último, remarcam los expertos que hoy en día, con un dólar tan alto, la construcción es rentable para la gente que se ha dolarizado. “Si tenés la plata en dólares hoy es el mejor momento para invertir en el mercado de la construcción o remodelación”, coinciden.
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