Cumbre tributaria en Punta del Este: los empresarios están preocupados por la repatriación de activos y evalúan el cambio de residencia

Unos 200 empresarios asistieron este miércoles a una exclusiva charla que ofreció el tributarista César Litvin en Punta del Este, donde vacacionan muchos de los que hoy están preocupados por el impacto que la reforma tributaria, contemplada en la ley de emergencia económica, tendrá sobre sus patrimonios.

El encuentro fue el primero que el especialista en impuestos dio respecto de la reforma tributaria en la ciudad balnearia uruguaya, aunque da permanentemente charlas sobre estos temas para el mundo corporativo. Y la inquietud, es siempre la misma: con historias tan cercanas como el Plan Bonex, el corralito y la pesificación, hay un fuerte temor de ingresar al país el 5% de los bienes para evitar pagar el 2,25% de Bienes Personales por los fondos en el exterior, ya que “ante una situación de crisis con altos niveles de pobreza, nadie va a salir a defender ese dinero si el Estado lo necesita”, dijo un empresario.

“Sería mucho más conveniente que se duplique la repatriación al 10 o 15% y que permitan invertir en la economía real, en inmuebles, en empresas mediante la Bolsa, donde se generaría mucho más impacto en la actividad productiva”, señaló Litvin, ante la consulta de Infobae. Y agregó que, ante las inquietudes de los empresarios, su recomendación es que sería atinado modificar el texto de la norma.

Todavía no está claro si el Gobierno permitirá utilizar ese dinero para este tipo de inversiones o deberá mantenerlo inmovilizado en una cuenta bancaria, hasta diciembre. Este sería el peor escenario, ya que desalentará la repatriación de los activos, no sólo por el temor de que ante una situación de extrema necesidad el fisco pudiera apelar a esos fondos, sino porque no tiene sentido tener dinero estancado sin que genere renta. Muchos contadores, de hecho, están recomendando a sus clientes esperar a que la AFIP publique la reglamentación respectiva para luego evaluar cómo proseguir. “Estamos trabajando para que la reglamentación esté lista en las próximas semanas", dijeron en el ente que preside Mercedes Marcó del Pont.

En esa norma, el organismo recaudador podría o no fijar posibilidad de inversión de ese dinero, pero la decisión debería ser tomada por el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien hasta ahora no se expidió sobre el tema.

De acuerdo con la Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva sancionada a fin del año pasado, la alícuota de Bienes Personales para bienes en el exterior alcanza al 2,25%, por lo que "alguien que tiene un ahorro afuera de USD 10 millones, con esa tasa tiene que pagar USD 225.000 por año. Es por eso que muchos están analizando con detenimiento la situación, ya que si traen al país el 5%, pagan por todos sus activos las alícuotas que rigen para bienes en el país, que tienen un máximo de 1,25%.

La duplicación de las alícuotas para los bienes del exterior rige por dos años. Pero para volver a acceder al beneficio el año próximo, por el impuesto de 2020, el contribuyente debería repatriar otro 5%.

También hay muchos empresarios que están analizando radicarse en otro país, como por ejemplo Uruguay. Tal como informó ayer Infobae, el presidente electo del vecino país, Luis Lacalle Pou, anticipó el plan del mandatario es flexibilizar los trámites para que los inmigrantes obtengan la residencia legal y también otorgar beneficios en el aspecto fiscal, para que puedan llevar sus capitales a tierras uruguayas. Su intención es que unos 100.000 argentinos se muden —o lleven sus bienes— al país vecino, según trascendió. Una de las flexibilizaciones será la reducción de los montos de patrimonio en bienes inmuebles o en inversiones que se exigen para la obtención de la residencia fiscal. “Hay muchas consultas por cambio de residencia. La gente quiere cuidar su patrimonio”, remarcó Litvin, al ser consultado por este tema.

De todos modos, son muchas las exigencias que impone el fisco argentino para perder la residencia fiscal y dejar de tributar en el país. Según repasó el tributarista, “piden que el centro de tus intereses vitales (familia, actividades personales) esté fuera de la Argentina; además, te piden tener una residencia tributaria en otro país junto con una mudanza a ese país, y el plazo de permanencia en la Argentina luego no puede superar los 90 días”.

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