La decisión del Gobierno de implementar un recargo del 30% a las compras y los consumos realizados en el exterior no impactará solo en los viajes y el turismo. Hay muchos servicios que se ofrecen en la Argentina —y se pagan en pesos— pero que en realidad son realizados por empresas que facturan fuera del país y, por lo tanto, también se podrían ver afectados por este incremento en su precio final. El costo extra correrá incluso para alquileres temporarios dentro de la Argentina pero contratados a través de plataformas globales, del tipo AirBnb.
El jefe de Gabinete Santiago Cafiero confirmó este fin de semana que el impuesto propuesto será del 30% y estará dentro de la Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva que deberá ser aprobada por el Congreso. Entre la lista de servicios que se incrementarán están plataformas como Netflix, Spotify, Tinder y todas las que ofrezcan servicios online o de streaming pero que se facturan desde el exterior. Como aún no se conoce la “letra chica” del nuevo impuesto, no se sabe si se aplicará sobre el precio final, con el 21% del IVA ya sumado.
El impuesto también abarcaría otros servicios, menos conocidos pero muy utilizados por las pequeñas y medianas empresas, como los de publicidad que ofrecen las empresas como Google y Facebook
“Hay que ver finalmente cómo se define el impuesto para que no haya doble imposición con el IVA porque en esos casos la facturación es en pesos y se presume que están en el país”, explicó el tributarista Iván Sasovsky, titular de Sasovsky & Asociados. Si se considera que estas empresas facturan a nivel local, finalmente no estarían incluidas en el tributo. “Entiendo que es una contradicción”, agregó. Se estima que la AFIP recauda unos $200 millones mensuales por el IVA a las empresas de servicios digitales.
Consultados sobre el impacto de la medida, desde Netflix no pudieron dar aún precisiones. El impuesto, además, abarcaría otros servicios menos conocidos, pero muy utilizados por las pequeñas y medianas empresas, como los de publicidad que ofrecen las empresas como Google y Facebook, o de cloud —almacenamiento en la nube— de compañías como Amazon, Microsoft o Google.
“Google cumple con todas sus obligaciones impositivas en cada uno de los países en los que opera, incluida la Argentina. Estamos a la espera de que se sancione la nueva normativa para poder determinar el impacto que tendrá en los productos que comercializamos”, explicaron desde la empresa de tecnología.
Desde algunas de las plataformas de servicios de delivery también aclararon que están constituidas en la Argentina y cobran íntegramente en pesos argentinos a través de medios de pago locales. Por lo tanto, no estarían incluidas en el nuevo tributo, como cualquier otra compra en el país.
Aunque aún no hay detalles de cómo será la implementación, el Gobierno confirmó que el impuesto se aplicará tanto a las compras realizadas fuera del país como a las que se realizan desde la Argentina pero en moneda extranjera, lo que incluye plataformas de comercio electrónico, servicios de streaming o aplicaciones. “El impuesto a las compras en el extranjero es del 30%. Tiene una lógica solidaria y contributiva. Los argentinos que tengan la posibilidad de viajar al extranjero y hacer sus compras con las tarjetas, esas compras después se pagan con dólares del Banco Central. Esos dólares los tenemos que cuidar mucho”, aseguró Cafiero en declaraciones radiales.
También aclaró que el recargo del 30% será para todos los consumos que tengan un valor fijado en dólares, más allá de que se realicen dentro o fuera del país y que en el resumen de la tarjeta de crédito aparezcan convertidos en pesos. ″Si se paga en dólares, si se paga afuera, eso después en la tarjeta de crédito uno lo tiene en pesos, con la conversión a pesos. Cualquiera de esas compras va a tener un 30%", detalló Cafiero en diálogo con Radio 10.
El Gobierno confirmó que el impuesto a los consumos en dólares en el exterior será del 30% y se aplicará tanto a las compras realizadas fuera del país como a las que se realizan desde la Argentina pero en moneda extranjera
Otro servicio que sufriría recargo es el de alquileres temporarios a través de plataformas internacionales, ya que desde septiembre del año pasado, AirBnb tomó la decisión de cobrar en dólares los alquileres dentro de la Argentina. Desde la compañía tampoco tienen aún precisiones sobre si podrían implementar cambios en su forma de facturar en la Argentina.
En tanto, desde la plataforma Booking —otra red global de alquileres— aclararon que cada vez que un cliente argentino reserva un alojamiento dentro de la Argentina, el pago se realiza directamente al propietario en pesos argentinos, según el tipo de cambio del día y por lo tanto exenta del recargo. “Es una transacción de pago local y no internacional”, aclararon.
Este lunes, ante la aplicación del recargo, desde las empresas de turismo advirtieron que se pondrá en riesgo a muchas agencias. “Esta medida podría, en función de su implementación, llevar a una situación crítica, poniendo en riesgo la continuidad del trabajo de las más de 5.000 empresas de viajes y turismo, de las cuales la mayoría son pymes. Hay que tener en cuenta que alrededor del 35% de los viajes emisivos son vacacionales; el resto responde a negocios, deportes, intercambios científicos, que se verían afectados con esta medida también” explicó Gustavo Hani, presidente de la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (FAEVYT).
Desde el sector hotelero, advierten que podría generar una reacción por parte de algunos países que reciben turistas argentinos, lo que los podría llevar a tomar medidas similares
Hani también advirtió que podría generar una reacción por parte de algunos países que reciben turistas argentinos, lo que los podría llevar a tomar medidas similares.
Con este recargo adicional, el llamado “dólar turista” pasaría a valer aproximadamente $81,90 contra los $63 del cierre del dólar del viernes pasado. Desde el sector financiero, advierten que la medida podría tener como consecuencia no deseada una suba en el dólar libre, cuyo último valor se estimaba en menos de $67, con lo que quedaría por debajo del dólar más el recargo del 30% y motivaría a muchos viajeros a abastecerse en el mercado informal antes de viajar fuera del país.
El “dólar turista” ya estuvo vigente desde 2012 hasta el 2015, durante el segundo gobierno de Cristina Kirchner: comenzó con un recargo del 20% y llegó finalmente al 35 por ciento. La medida, ahora, apunta a reducir el déficit de la balanza turística, que en 2018 rozó los USD 8.000 millones y este año, aunque en baja, estaría en cerca de USD 5.000 millones.
A fines de octubre pasado, después del triunfo electoral de Alberto Fernández, el Banco Central limitó la compra de dólares a USD 200 mensuales pero no puso límites al uso de tarjetas de crédito en el exterior. Sí a las extracciones en cajeros fuera del país que no eran realizadas desde una cuenta local en dólares.
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