Luego de la decisión del Gobierno de aumentar las retenciones, el campo analiza volver a las protestas

A menos de una semana de su asunción, el gobierno de Alberto Fernández anunció cambios en el actual esquema de retenciones, que había implementado el ex ministro de Economía, Nicolás Dujovne, en septiembre del año pasado.

La medida llegó en un momento de altísimo nivel de comercialización de la cosecha de la actual campaña, por el temor que había al aumento de las retenciones, y que se suma a los bajos precios internacionales y al impacto que empieza a tener la falta de precipitaciones en las principales zonas productivas del país.

Todo esto complica el panorama a un gobierno que una vez más apuesta a que el campo aporte las divisas que se necesitan para salir de una profunda crisis económica y social. Y recordar, que todas las veces que se aplicaron este tipo de medidas, el efecto fue negativo, por la caída de la siembra y producción. Y la dirigencia rural lo marca todo el tiempo: las retenciones no incentivan la producción, sino todo lo contrario.

A partir de las medidas implementadas por el gobierno, el interior productivo comienza a reunirse. Hoy, a las 16, en la rotonda de acceso a la ciudad entrerriana de Crespo, habrá un encuentro ampliado de la Filial de la Federación Agraria Argentina, para luego entregar a la Mesa de Enlace provincial las propuestas de acciones a programar.

Por otro lado, el lunes a las 9:30 en el Parque 9 de Julio, en San Miguel de Tucumán, se reunirán los integrantes de la Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor). Y ese mismo día, en horario a confirmar, se reunirá la Mesa de Enlace Nacional en la sede de Confederaciones Rurales Argentinas.

El malestar, en el interior productivo, es muy grande no solo por el aumento de las retenciones, sino también por el procesamiento y embargo, de los ex dirigentes de la Mesa de Enlace de 2008, luego del sobreseimiento que se había dictado en 2017, por una causa que se había iniciado tras una protesta realizada en pleno conflicto por las retenciones móviles, en la ciudad bonaerense San Pedro.

Alcances del Decreto

Ayer el gobierno eliminó la fórmula de imponer retenciones de 4 pesos por cada dólar exportado, para cereales y otras materias primas de origen agropecuarias. Para estos productos habrá que esperar mayores definiciones el lunes, ya que el ministerio de Agricultura anunció el cierre del registro de exportaciones de granos y subproductos solamente para ese día, y posiblemente haya anuncios de un nuevo esquema.

Hay expectativa entre los productores sobre lo que sucederá con el porcentaje de retenciones a la soja y sus derivados, que en la actualidad tributaban un 18% de retención fija, más los 4 pesos por dólar, que ahora fueron eliminados. En el caso que no existan modificaciones, la oleaginosa volvería a tributar retenciones del 30%, y en el caso del maíz y el trigo del 12%.

Y en aquel caso que las retenciones estén por encima de dichos porcentajes, se deberá modificar por una Ley del Congreso, el artículo 81° del Presupuesto Nacional de este año, que establece que las retenciones no podrán superar en ningún caso el tope máximo de 30% para la soja, y del 12% para el trigo y el maíz.

Por tal motivo, al ser consultados por este medio, los referentes de las cuatro cadenas de valor, aguardan mayores precisiones del gobierno nacional sobre el alcance de la medida, para luego pronunciarse. El próximo martes, dichas entidades realizarán su evento de fin de año, donde hay expectativa por el pronunciamiento que efectúen. Habrá un capítulo especial del mismo dedicado a los anuncios de este sábado.

Además, el Decreto Presidencial contempla dos anexos. En el primero de ellos, abarca a los productos lácteos, frutas, hortalizas, y otros productos regionales. Para todas estas producciones, la medida anunciada por el gobierno “sustituye el Anexo I del artículo 2° del decreto 793/18 y sus modificaciones”, que fue implementado en septiembre pasado por el gobierno de Mauricio Macri. En aquel caso se definió que esos productos no pagarían más de 3 pesos por dólar exportado, lo cual equivale ahora a una alícuota cercana a 4 por ciento. Se entiende entonces que esos productos seguirán pagando esa alícuota mínima.

Y por otro lado, la decisión oficial en su artículo 3, expresa que “cuando se trate de las mercaderías comprendidas en las posiciones arancelarias detalladas en el Anexo II, la alícuota del derecho de exportación será del 9 por ciento”. Es decir que habrá una serie de productos contenidos en este anexo que pagarán ese porcentaje, y dejarán de abonar un tope de 4 pesos o 3 pesos por dólar. Allí se encuentra las carnes, el maní, el maíz pisingallo, la harina de trigo, las legumbres, la leche en polvo, la lana, etc.

Alcances de las medidas

La especialista en mercados de granos, Paulina Lescano, explicó que es “muy difícil dar un dato concreto. Imagino que a partir del lunes o martes habrá noticias más específicas”, afirmó en diálogo con Infobae. La ingeniera agrónoma sostuvo que el riesgo es que si declaran la Ley de Emergencia, el Poder Ejecutivo tendría también la potestad de modificar por encima de estos valores los derechos de exportación.

Con respecto a cómo cambiarían los precios con el 12%, la profesional dijo: “En los cereales tendríamos una baja adicional a lo que fue el cierre del mercado a término: en el caso del trigo casi 8 dólares por debajo de lo que cerró el viernes, en el caso del maíz, serían cuatro o cinco dólares, y en soja 9 dólares. Creo que vamos a tener un mercado totalmente paralizado, sin oferta y sin demanda”.

Y recalcó: "Como siempre el mayor daño que se le hace al mercado es la incertidumbre, porque si el productor sabe cuáles son las reglas de juego trabaja en base a eso; imagino que lunes y martes estará todo paralizado".

Desde la Sociedad Rural Argentina, transmitieron su sorpresa por los anuncios, y agregaron, “cuando junto con las entidades colegas de la Comisión de Enlace fuimos a presentarle nuestra propuesta de Políticas Públicas para el sector siendo aún candidato, el presidente Alberto Fernández propuso permanentemente diálogo y gustaran o no, iban a consultar las medidas”.

Y también comentaron: “Solicitamos audiencia al flamante Ministro de Agricultura, Luis Basterra ni bien asumió, quien la semana pasada también habló de cercanía y diálogo. Nos encontramos en eventos con él en estos días, y no se nos anticipó ninguna medida. Sin duda, todo esto no contribuye a inaugurar relaciones fluidas y de confianza”.

“Esto se traducirá en un fuerte desincentivo a la producción, la inversión y la creación de empleo futuro, en un momento en el que Argentina los necesita especialmente para salir de la profunda crisis económica y social en la que se encuentra. El campo es el sector más dinámico de la economía y el que mayor capacidad tiene para generar divisas, trabajo y activación en todo el territorio nacional”, enfatizaron desde la entidad que preside Daniel Pelegrina.

Y por último, manifestaron: “El pedido de ajuste y contribución recae nuevamente sobre los ingresos de los sectores productivos, el campo primero siempre. Nada se dice de cuál va a ser la contribución concreta de la política o de los distintos estamentos de los Estados, que no anuncian compromisos con la reducción del gasto público, como principal componente del déficit fiscal”.

Más repercusiones

Carlos Iannizzotto, presidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro), aseguró, “estamos sorprendidos por la forma inconsulta y por el contenido del Decreto, porque es una medida aislada, sin saber qué va a suceder con el financiamiento y las otras variables de la economía. Estas medidas atentan contra la inversión, la producción, el trabajo y el empleo”.

Por otro lado, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes, aseguró en un comunicado, que el gobierno nacional “arrancó mal con el campo, porque la medida es un freno a la producción, a las inversiones y a la generación de empleo, y además porque en los anuncios de asunción del presidente Alberto Fernández hubo un compromiso de diálogo que no se cumplió. Producir con más carga impositiva y sin ningún estímulo es inviable para el productor pero además paraliza el ingreso de más divisas al país porque así no podemos trabajar”.

"El campo puede generar mucho más sin estas medidas y lo hemos demostrado. Con retenciones, desfinanciamiento, sin infraestructura y sequía el panorama es pésimo. Los gobiernos se empeñan en secar el bolsillo del que siempre pone. Es tiempo de pensar una nueva dinámica tributaria, una misma política impositiva para todos los segmentos de la economía y que la política entienda que el ejemplo siempre empieza por casa. “Estamos esperando ese gesto”, dijo Chemes.

Además, el flamante titular de CRA, expresó: “Es llamativo el silencio y la falta de comunicación de la medida por parte del ministro del área, lo que constituye otra pésima señal. Y por otro lado, la medida desguaza al productor del interior que ya trabaja en condiciones desfavorables”.

Desde el ámbito legislativo también opinaron sobre la decisión del gobierno nacional de modificar las retenciones. Pablo Torello, diputado nacional por Juntos por el Cambio por la provincia de Buenos Aires, desde su cuenta de Twitter, manifestó: “Entenderá el gobierno de Alberto Fernández, y el ministro, Luis Basterra, que modificar las reglas de juego en el medio de la campaña agrícola, lo único que hace es destruir confianza”.

Por su parte, el ex ministro de Agroindustria y actual diputado nacional por Formosa por la Unión Cívica Radical, Ricardo Buryaile, comentó: “Si la suba de retenciones es la que acabamos de tomar conocimiento, ¿para qué cerraron los registros de exportación? ¿Será que después de la Declaración de Emergencia, subirán más?”.

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