Los ADR de empresas argentinas saltaron hasta 7% en Wall Street

Los activos argentinos se despegaron de los precios mínimos que tocaron antes de las elecciones presidenciales

Los precios de acciones y bonos argentinos se acomodaron al nuevo escenario político. (AP)

La semana financiera terminó con claras posiciones ganadoras para las acciones y los bonos argentinos, los activos globales más castigados en el turbulento 2019.

Los títulos se alejaron así del piso de precios observado entre las elecciones primarias y las presidenciales. Lejos de la euforia, el progreso obedeció a un reacomodamiento de precios, acorde con el cambio de signo político en la Argentina, a través del cual se incorporaron mejores expectativas respecto de la inevitable renegociación de la deuda con los acreedores privados.

El índice S&P Merval de la Bolsa porteña avanzó 3,6% y quedó cerca del umbral de los 37.000 puntos, con el empuje de las acciones de los segmentos energético y financiero. El Merval acumuló una mejora en pesos del 6% en las últimas tres sesiones de negocios.

Mientras, los ADR de compañías argentinas que se negocian en las bolsas de Nueva York experimentaron amplias ganancias diarias de hasta 7% en dólares.

Fuente: Rava Online. Precios en dólares

La plaza accionaria operó bajo el impulso de negocios de corto plazo -trading-, al tiempo que el Riesgo País subió a la espera de anuncios económicos concretos por parte del flamante Gobierno de Alberto Fernández, que debe hacer frente a fuertes presiones por el vencimiento de deuda soberana , en momentos de recesión, una inflación anual de más del 50% y una pobreza cercana al 40 por ciento.

El Riesgo País de Argentina, medido por el banco JP Morgan, avanzó 32 unidades a 2.114 puntos básicos, en momentos en que los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) cayeron un 0,4% en promedio.

Analistas estiman que la nueva cúpula del Banco Central apuntará a una baja en las tasas abonadas en las licitaciones de Letras de Liquidez (Leliq), aún en el 63% anual, además de implementar una nueva política de encajes bancarios y de nuevas líneas de préstamos, productivos y para capital de trabajo.

El dólar en la plaza mayorista se mantuvo estable a 59,816 pesos, con la participación de la banca oficial tomando dólares del mercado, mientras que en el segmento informal se ubicó en los $66,75, en una plaza con reducidos negocios.

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