La Encuesta de Indicadores Laborales del Ministerio de Producción y Trabajo dio cuenta de una nueva contracción del empleo privado registrado, pese a las medidas que dispuso el Gobierno en agosto para incentivar el consumo y bajar el costo laboral de las empresas, tras la pérdida de las elecciones primarias.
La incertidumbre que se generó con el cambio de escenario político se extendió hasta las generales de octubre, y de ese modo perpetuaron la continuidad del escenario recesivo que se inició desde la crisis cambiaria en abril del año último.
Y si bien la caída del salario real fue el principal amortiguador del mercado, la extensión del proceso contractivo provocó que en octubre se intensificara el recorte de la nómina de personal registrado en las empresas.
La cartera laboral comunicó que en el último mes “el empleo registrado privado urbano presentó una caída interanual de 2,6% en el total de aglomerados”, más intenso en el área del Gran Buenos Aires, 3%, que en el resto del país, 1,8%, a unas 6,03 millones de trabajadores, 9.000 menos que en septiembre, y 161.100 personas por debajo del registro de un año antes.
Desde que se inició el receso de la actividad fabril y comercial el conjunto del empleo registrado en el ámbito privado se redujo en más de 289 mil puestos asalariados
Destaca el informe: “el empleo registrado privado en empresas de 10 empleados o más se redujo con respecto a octubre de 2018 en todas las ramas de actividad, con excepción de servicios comunales, sociales y personales”, en la construcción bajó 11,1%, en la industria 4,6%, y en comercio, restaurantes y hoteles 3,5 por ciento.
Y si bien a menudo se resalta el perjuicio de la recesión sobre las pequeñas y medianas empresas, probablemente porque fueron las primeras que acusaron el efecto de la pérdida de ventas, la cartera laboral detectó que en los últimos 12 meses "las bajas ocurrieron en todos los estratos de tamaño de empresas entre 10 y 49 trabajadores 1,9%, entre 50 y 199 fue de 2,6%, y en las 200 y más se intensificó a 3,3 por ciento.
Cambió de humor
Pese a que el presidente electo, Alberto Fernández, no dio detalles sobre políticas inmediatas para reactivar la producción y el consumo, en el ámbito empresario se observa un claro cambio de expectativas, en la confianza en que las primeras acciones se focalizarán en mejorar los ingresos de las familias y la reducción del costo del dinero.
Las consultas que el Ministerio de Producción y Trabajo en los últimos días de noviembre determinaron un resultado neto de respuestas de aumento de dotación para los próximos 3 meses, un modesto 0,5% de los consultados, con 4% que planificaron incorporaciones y 3,5% de las empresas que planificaron nuevas disminuciones de su dotación de personal.
Mientras que el 92,5% de las empresas no anticipó cambios netos en su dotación de personal.
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