Salarios vs inflación en 2020: los analistas dudan sobre la recuperación del poder adquisitivo

No hay previsiones de que el contexto recesivo pueda revertirse con facilidad por lo que es improbable que los ingresos de los trabajadores puedan recuperarse en términos reales, en especial en el sector informal

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El gobierno entrante podría impulsar
El gobierno entrante podría impulsar los salarios a través de un aumento por suma fija, según trascendió

Mediante varios de sus interlocutores económicos, el gobierno de Alberto Fernández transmitió su clara intención de que el salario real se recomponga en 2020, luego de dos años de bruscas caídas como consecuencia de la aceleración de los precios. Creen que es la base para que vuelva a crecer la economía, de la mano del consumo y del mercado interno. Pero algunos economistas ya advierten que no será tan sencillo lograr una mejora real del poder adquisitivo, en un contexto de fuerte inercia inflacionaria y recesión. En un escenario optimista, con el anuncio de un plan económico creíble y sólido que pueda anclar expectativas, las chances son mayores, pero aún si hubiera una mejora hacia el segundo semestre, sería marginal, coinciden los analistas consultados.

“El salario real se desplomó, pero no veo un espacio para que el salario le gane a la inflación; porque la actividad va a seguir en caída. Con el arrastre de este año, vamos a estar con una baja de entre 3,5% y 4% del producto. Las empresas están mal, la economía está totalmente paralizada, por lo que el desafío de los primeros meses es que la economía encuentre un piso”, aseguró Rodrigo Alvarez, de Analytica.

Trascendió en los últimos días que el gobierno que llega apostará a generar un rápido impacto en materia salarial, probablemente con un aumento de suma fija por decreto para lograr que los sectores de menores ingresos perciban una recuperación real de sus ingresos, antes de negociar, por sector, las normales paritarias. La CGT mantuvo una reciente reunión con quien más suena para ser el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y varios dirigentes de la central obrera dejaron trascender esta posibilidad, que si bien fue cuestionada por el sector empresario, no se descarta que pueda concretarse en un escenario de emergencia y, tal vez, a cuenta de futuros aumentos o pago de impuestos.

El asalariado no va a tener un cambio sustancial en su capacidad de consumo el año próximo. A lo sumo, podrá balancear un poco el deterioro que viene sufriendo

Esta medida, enmarcada en un contexto de diálogo tripartito, podría generar una recuperación real del salario durante los primeros meses del año, pero lo que advierten los economistas es que luego la inflación terminará licuando esta mejora. “Es un sube y baja porque luego la inflación te come. El asalariado no va a tener un cambio sustancial en su capacidad de consumo el año próximo. A lo sumo, podrá balancear un poco el deterioro que viene sufriendo”, remarcó Alvarez.

Coincidió con este diagnóstico el economista de Ecolatina, Matías Rajnerman, quien aventuró que, en el promedio anual, el salario real formal volverá a caer 3% y se acumulará así el tercer año en rojo. En la comparación punta a punta, “puede ser que los sueldos le ganen a los precios, en el sector formal; en el informal, van a volver a caer”, enfatizó. La explicación es que en un contexto recesivo y de aumento del desempleo, los sindicatos priorizan conservar los puestos de trabajo en lugar de lograr una mejora del poder adquisitivo. “Estamos previendo una caída del PBI de 2% para el 2020; seguirá siendo una economía que no genera empleo, que destruye puestos de trabajo y por eso creemos que el salario real va a seguir cayendo. Este año, además de esto, influyó que la inflación fue inesperada”, aseguró el economista.

Para Gabriel Camaño, de la consultora Ledesma, “si el ancla van a ser los salarios a través del acuerdo económico y social, los sueldos correrán detrás de la inflación, pero si hay un programa de estabilización genuino que ancle expectativas, el escenario puede ser más optimista. El salario no va a volar en ningún escenario; la discusión es si sigue cayendo o si empieza a recuperar algo”.

“Es muy difícil saber qué sucederá en 2020 con el salario porque todavía no tenemos una pauta de inflación. De todas maneras, este año cerrará con una suba de precios importante, lo que te deja un arrastre alto. Entonces, suponiendo que se aquieten las aguas, que el dólar esté quieto, que haya una política fiscal y monetaria coordinada, solamente por la inercia, la inflación va a estar orillando el 50% por medio año”, consideró Facundo Martínez, economista de Macroview. Agregó, sin embargo, que “si de golpe el Gobierno autoriza subas importantes a comienzos de año, quizás en el primer trimestre el salario real recupere, aunque luego puede irse licuando con la inflación a lo largo del año y terminen empatados”.

El índice general de salarios del Indec mostró que en 2017 una suba, punta a punta, del 2,1%; en 2018 una caída del 12,1%, y en los primeros diez meses del 2019, una nueva caída de 6,3%.

Martínez no se quiso arriesgar a afirmar que el escenario será de una nueva caída del poder adquisitivo, ya que ello dependerá de muchas variables que se desconocen. “Si el dólar se mantiene en $60, si se hacen aumentos tarifarios muy por debajo de la inflación, si hay una política fiscal austera, se reestructura la deuda y se regula el timing de la emisión, la inflación del año que viene tiene espacio estadístico para terminar en 35% y los salarios hasta pueden ganarle a los precios. No sé si hay margen para otro año de pérdida de salario real”, aseguró el economista.

El índice general de salarios del Indec mostró que en 2017 una suba, punta a punta, del 2,1%; en 2018 una caída del 12,1%, y en los primeros diez meses del 2019, una nueva caída de 6,3%. En este caso, el cálculo fue realizado en base a proyecciones salariales de septiembre y octubre, ya que todavía para esos meses no está disponible el dato oficial.

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