Mantener estabilizado el tipo de cambio le salió caro al Banco Central. La entidad monetaria tuvo una intensa participación vendedora en el mercado de cambios para estabilizar la volatilidad de la divisa, después del fuerte salto de agosto.
El dólar mayorista, cuyo movimiento de precios se traslada a todos los segmentos del mercado, trepó en las tres ruedas posteriores a las elecciones primarias un 33,4%, desde los $45,25 del 9 de agosto a los $60,40 del 14 de agosto.
A partir de ese momento el valor de la divisa estuvo sujeto a un movimiento muy acotado, supervisado de cerca por la entidad que preside Guido Sandleris. Alcanzar este objetivo, prioritario para evitar un mayor golpe inflacionario y sepultar cualquier chance de reelección de Mauricio Macri, exigió un sacrifico de reservas de enorme magnitud.
Desde las PASO las reservas cayeron USD 23.000 millones y los depósitos, unos USD 13.000 millones
Sólo en la semana previa a las elecciones, el BCRA vendió USD 2.685 millones en las cinco ruedas entre el 21 y el 25 de octubre. En octubre las ventas en el segmento de contado alcanzaron los 4.098 millones de dólares.
Asimismo, el BCRA informó un saldo neto negativo de USD 7.460 millones por su participación en el mercado de cambios entre el 12 de agosto y el 25 de octubre, lo que significa que entre las PASO y las elecciones presidenciales la entidad vendió casi USD 7.500 millones para tener frenado al dólar debajo de los 60 pesos en el segmento mayorista.
Consumado el triunfo de la fórmula del Frente de Todos en las elecciones presidenciales del 27 de octubre, la imposición de un control de cambios más riguroso fue evaluada por el oficialismo como la alternativa más accesible para detener la pérdida de reservas y extender la calma cambiaria en el mercado formal, tal como solicitó el mandatario electo, Alberto Fernández.
Las ventas al contado no son la única vía de salida de reservas. Los pagos de deuda en moneda extranjera y el retiro de depósitos en dólares también impactan en el monto de activos internacionales. Por eso, el desplome de los activos del Central fue mucho mayor que el del monto vendido en el mercado de cambios.
Las reservas continuaron el miércoles con su caída por 66° rueda consecutiva y se ubicaron en niveles de USD 43.269 millones, según datos sujetos a ajuste, al monto más bajo desde el 25 de enero de 2017. Desde las PASO los activos restan USD 23.040 millones (-34,7%), y unos USD 22.537 millones desde el inicio de 2019.
Por su parte, los depósitos privados en dólares en efectivo del lunes 28 (último dato disponible) presentaron un retroceso de USD 312 millones (-1,6%), para alcanzar los USD 19.553 millones, la cifra más baja desde el 18 de noviembre de 2016. Desde las PASO la salida de estos depósitos del sistema financiero fue de USD 12.946 millones o 39,8 por ciento.
El Banco Central decidió esta semana modificar el límite inferior de la tasa de interés de las Letras de Liquidez (Leliq), que demarca el sendero de política monetaria, al 63% ante las proyecciones de una desaceleración en la tasa de inflación.
En tanto, ratificó que la profundización de los controles cambiarios fue por “un aumento importante en la demanda de dólares” y tiene el fin de “preservar las reservas internacionales”.
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