Mar del Plata (Enviado especial). La clásica Encuesta Anual elaborada por el Estudio D’Alessio IROL sobre la base de 240 asistentes al 55 Coloquio Anual de IDEA, presentada por su presidente, Eduardo D’Alessio, y el economista Luis Secco, director de Perspectiv@s Económicas, arrojó como conclusión contundente la perspectiva de estancamiento de la actividad económica en nivel levemente más bajo que el de la situación actual.
Claramente, respecto del anterior relevamiento, en julio último, antes de las PASO, se detectaron con nitidez los cambios de escenarios político y, como un año antes, una nueva devaluación inesperada de un 30%, que desdibujaron las expectativas de salida de la recesión.
Peor aún, Luis Secco resaltó: “La tasa de inversión cayó a menos de 13% del PBI, inferior a la de 2002; y el punto central es que la industria está en el epicentro del pesimismo, porque con el control de cambios es el que más sintió el efecto de la restricción de divisas para la compra de insumos”.
Para eso el economista mostró cómo mientras que las exportaciones del conjunto del sector primario y de manufactura de origen industrial pasaron de USD 27.800 millones en 2018 a USD 22.500 millones en los primeros 8 meses de 2019, las importaciones de manufactura de origen industrial se redujeron en ese período de USD 30.100 millones a USD 14.000 millones.
El sector industrial es el que más acusó el ajuste por el cambio de escenario, porque se encontró con menos divisas para importar insumos y sostener las inversiones (Luis Secco)
Semejante punto de giro explica que de las 4 últimas encuestas en las recientes 3 se han visto frustradas las expectativas de mejora general de los indicadores de ventas, exportaciones, e inversión y empleo, al punto de resultados notablemente positivos, entendidos como mayor porcentaje de los empresarios que esperaban mejora que los que presupuestaban caída.
De ahí que ahora la brecha entre quienes proyectan un segundo semestre mejor que el primero, 31% del total, y los que pronostican estar peor, 37% de los casos, quedó virtualmente empatada. “Eso significa que predomina entre los ejecutivos de las empresas un escenario de incertidumbre”, dijo el experimentado Eduardo D’Alessio.
“Queda claro que el gobierno que viene (cualquiera que sea) no podrá mejorar todas las variables a la vez, las expectativas de los empresarios muestran que la que aparece con más probabilidades de crecer es la exportación, a partir de un tipo de cambio alto, que se prevé se sostendrá”, dijeron los expositores.
Queda claro que el gobierno que viene (cualquiera que sea) no podrá mejorar todas las variables a la vez, las expectativas de los empresarios muestran que la que aparece con más probabilidades de crecer es la exportación, a partir de un tipo de cambio alto, que se prevé se sostendrá
Claves para elevar la competitividad y superar la crisis
Hacia adelante, los empresarios manifestaron que los principales factores que contribuirán a aumentar la productividad, no sólo de sus organizaciones en particular, sino del país en general, son más de una docena, pero 5 se diferenciaron del resto:
1. Reforma impositiva;
2. Baja de la inflación;
3. Reforma laboral;
4. Buen funcionamiento de las instituciones y la Justicia; y
5. Acceso al crédito.
Y si bien luego de un mes en el que el crédito al sector privado cayó en un 35% en términos reales, la necesidad de acceso a líneas de préstamos accesibles para el crecimiento de las empresas no aparece como las primeras prioridades, Luis Secco lo justificó porque en el escenario de estancamiento en un muy bajo nivel de actividad “sólo se demanda asistencia financiera para capital de trabajo, porque los planes de inversión virtualmente se han frenado y declinado respecto de lo que se esperaba”.
En tanto, sobre las medidas que se consideran apropiadas para promover la inversión en 2020 sobresalieron en el relevamiento a 240 empresarios que participan del 55 Coloquio:
1. Eliminación de impuestos distorsivos, como a los Ingresos Brutos. “Impiden la tercerización de actividades por parte de las grandes empresas, y traban el desarrollo de las pymes” dijo D’Alessio, porque es la forma de atenuar el efecto cascada;
2. Clarificación de reglas de juego;
3. Política fiscal pro inversión;
4. Financiamiento de largo plazo;
5. Recomposición de costos laborales; y
6. Renegociación activa con los organismos internacionales.
En síntesis, Luis Secco concluyó: “En el conjunto de los empresarios se observa que persisten niveles de incertidumbre muy altos para el corto plazo”.
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