La balanza comercial argentina arrojó en junio un superávit de USD 1.061 millones, para sumar diez meses de saldos positivos, y acumula en el año un saldo favorable de 5.589 millones de dólares.
Según el Informe del Intercambio Comercial Argentino (ICA) del INDEC, en junio las exportaciones aumentaron 1,9%, mientras que las importaciones cayeron 23,5% interanual, lo que impactó en el saldo comercial positivo.
"El intercambio comercial (exportaciones más importaciones) disminuyó 11,2% en relación a igual período del año anterior y alcanzó un valor de 9.409 millones de dólares. La balanza comercial registró un superávit comercial de 1.061 millones de dólares", según el ente estadístico.
"Es el primer semestre más positivo desde 2012. Las exportaciones aumentaron 1,9% interanual en valor, mientras que en cantidades crecieron 13,5% interanual", destacaron en el Ministerio de Hacienda que conduce Nicolás Dujovne. Además, es el décimo mes consecutivo de suba.
Según el Indec, el superávit comercial fue producto de un aumento en las exportaciones, que "se explicó principalmente por un incremento en las ventas de grasas y aceites; cereales; y carne y despojos comestibles; y una caída en las importaciones, fundamentalmente, de vehículos terrestres, sus partes y accesorios; máquinas, aparatos y material eléctrico y sus partes; y combustibles minerales, aceites minerales y productos de su destilación, entre otros".
El desplome de importaciones empieza a moderarse luego de los mínimos alcanzados en la primera mitad del año (EcoGo)
Las exportaciones registraron en junio un crecimiento de 1,9% interanual debido a un aumento de cantidades (+13,5%) y pese a la caída en los precios (-10,2%). Desde el Palacio de Hacienda destacaron que el rubro que mejor desempeño mostró fue combustibles y energía (+33,6%), seguido por manufacturas de origen agropecuario (+12,1%) y por productos primarios (+0,3%).
"Sólo las manufacturas de origen industrial no crecieron (-11,9%), afectadas por la caída tanto en precios como en cantidades", explicaron.
Las importaciones, en tanto, cayeron tanto en términos interanuales (-23,5%) como desestacionalizados (-1,7%).
"El desplome de las importaciones, que ya empieza a moderarse luego de los mínimos alcanzados en la primera mitad del año, sumado a la mejora de la cosecha en comparación contra el dato del año anterior donde las exportaciones se vieron fuertemente afectadas por la sequía, contribuyen a mejorar el saldo de la balanza comercial", afirmó la consultora EcoGo.
En junio de 2018 la diferencia entre las exportaciones y las importaciones había arrojado un saldo negativo de USD 322 millones, mientras que desde septiembre del mismo año el saldo comercial no registra ninguna baja mensual.
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