El acuerdo comercial con la UE será positivo si contribuye a ampliar el intercambio, generar empleos y atraer inversiones

Gonzalo Semilla

La apertura comercial es clave para expandir el potencial de un país (Adrián Escandar)

El análisis macroeconómico del acuerdo histórico entre el Mercosur y la Unión Europea arrojará, al final del día, un resultado positivo, si las exportaciones (generación de riqueza genuina) resultan superiores a las importaciones, generando un superávit comercial que permita un crecimiento del mercado interno, creando empleo, reactivando el consumo, consolidando nuestras instituciones, con creciente inversión extranjera directa , etc.

Las potencialidades son más que atractivas para ambos bloques. Desde el Mercosur, un mercado de más de 500 millones de habitantes, con una participación mundial del PBI europeo cercano al 20%, mientras que para el viejo continente el mercado se amplía en un 50 por ciento.

En tiempos donde las grandes potencias económicas mundiales, Estados Unidos y China, "pujan" fuertemente por la protección de sus industrias y mercados, junto con proyecciones de debilitamiento en los flujos comerciales internacionales, la firma del acuerdo Mercosur-UE es una gran oportunidad para compensar las debilidades mencionadas.

La firma del acuerdo, visto desde el bloque del Mercosur implica una oportunidad de ampliar los destinos comerciales (actualmente en el orden de los 13 países), poniéndose a tono a los tratados alcanzados por otros colegas latinos como son los casos de Chile (con más de 55 países), México con 50 y Colombia con 35 países.

La reunión en Olivos entre Macri y los representantes empresariales en la que se plantearon las oportunidades y desafíos para la industria nacional

Si se analiza lo ocurrido durante 2018, el Mercosur registró un total de USD 361.161 millones en exportaciones y USD 279.600 millones en importaciones, obteniendo un superávit comercial de USD 71.555 millones aproximadamente. El bloque sudamericano representa el 1,8% de las exportaciones mundiales y el 1,4% de las importaciones, guarismos que han ido cayendo marginalmente en los últimos 5 años.

El bloque sudamericano representa el 1,8% de las exportaciones mundiales y el 1,4% de las importaciones, guarismos que han ido cayendo marginalmente en los últimos 5 años

Dentro del bloque, el flujo comercial se reparte en 75% de las exportaciones de productos provienen de Brasil; 19% de Argentina; mientras que el restante 5% se reparte entre Paraguay y Uruguay.

Respecto a las importaciones, el patrón se repite, confirmando la hegemonía de Brasil, dejando a la Argentina en un segundo escalón. Del total de los bienes que salen de las fronteras del bloque, el 67% ingresa con destino a Brasil, el 24% lo hace con destino a nuestro país, mientras que el restante 8% lo reciben Paraguay y Uruguay.

El perfil comercial del Mercosur está compuesto, del lado de las exportaciones, principalemente por 18% de materias primas energéticas (petróleo, gas, carbón, entre otros); 11% oleaginosas y granos diversos (sobresale la soja); 7% minerales (hierro, zinc, níquel); 6% vehículos y autopartes; y 5% carnes, residuos de industria alimenticia y maquinarias.

El perfil comercial del Mercosur está compuesto, del lado de las exportaciones, principalmente por 47% de materias primas energéticas y alimenticias

Mientras que por el lado de las importaciones, la composición de las mismas tienen un sesgo industrial ya que aproximadamente dos tercios corresponden a algún tipo de bien manufacturado. En particular, 23% corresponde a maquinaria y equipamiento eléctrico; 13% está representado por energía (petróleo, gas); 10% vinculado a vehículos y autopartes; y productos químicos y farmacéuticos, fertilizantes y productos plásticos oscilan entre 4% y 5% de participación cada uno.

El caso de Argentina no difiere del que atraviesa el bloque, al tiempo que sus exportaciones se concentran fuertemente en bienes primarios y las importaciones están vinculadas con productos terminados, un esquema de larga data en la historia de nuestro país.

Estructura comercial de Europa

Desde de la Unión Europea, durante 2018 las ventas al resto del mundo alcanzaron a USD 6,450 billones, en tanto que sus compras totalizaron USD 6,393 billones, registrando un superávit de USD 57.642 millones. Como en el caso del MERCOSUR, se advierte un fuerte liderazgo de Alemania en relación a los flujos comerciales.

El bloque europeo genera un intercambio con el resto del mundo equivalente a más de 22 veces el PBI de la Argentina

En cuanto a los bienes exportados de los 28 países que la conforman, 24% proviene de Alemania; 11% Holanda; Francia contribuye con 9%; Italia 8% y el Reino Unido 7%, entre los más importantes.

Del lado de las importaciones un 20% tiene como destino Alemania; Reino Unido, Francia y Holanda reciben 10% cada uno; un 8% va hacia Italia y 7% a Bélgica. Los restantes países acaparan menos del 6% en todos los casos.

El perfil comercial de la Unión Europea está compuesto por:

1. El 24% de las exportaciones se vinculan con manufacturas tales como maquinarias y equipos eléctricos, 12% vehículos y autopartes, 6% productos farmacéuticos, 6% combustibles y derivados.

2. El 23% de las importaciones responden a maquinarias y equipos eléctricos; 12% combustibles y derivados; 10% vehículos y autopartes, productos farmacéuticos 5% y 4% productos plásticos.

Todos celebraron la iniciativa, pero ahora empieza la tarea fina de cada país en forma individual

Situaciones asimétricas y puntos destacados

Respecto a los puntos básicos del acuerdo "de no pares" o "asimétrico", en el sentido de que las empresas e industrias del Mercosur, en su conjunto, deberán hacer un esfuerzo integral para poder competir con las del bloque europeo. Esto conlleva inversión, reconversión productiva, incorporación de tecnología de vanguardia, estándares de calidad, recursos altamente capacitados, etc. Por supuesto con un rol activo de políticas públicas que acompañen dichos procesos y con una normalización de la situación macroeconómica general.

1. Levantamiento de barreras comerciales: el Mercosur liberará el 91% de las importaciones provenientes del bloque europeo en los próximos 10 años. En algunos sectores denominados sensibles, como el automotriz, el plazo se extiende a 15 años y en los primeros 7 regirán aranceles junto con una cuota de 50 mil unidades. De manera similar, la Unión Europea se comprometió a liberar el 92% de las importaciones provenientes de nuestro bloque.

El Mercosur liberará el 91% de las importaciones provenientes del bloque europeo en los próximos 10 años. En algunos sectores denominados sensibles, como el automotriz, el plazo se extiende a 15 años

2. Eliminación paulatina de aranceles: los países de la Unión Europea levantarán de forma paulatina la totalidad de los aranceles hoy vigentes a los productos manufacturados provenientes del bloque del Sur en el plazo de 10 años. En el caso de las materias primas, productos por excelencia exportados por el Mercosur, los aranceles se reducirán en 82%, con algunas excepciones en productos claves como por ejemplo la carne (vacuna, porcina y aviar), el azúcar, el etanol, el arroz, el maíz y la miel. El Mercosur, por su parte, hará lo propio en sectores industriales como el automotriz, farmacéutico, químico y de producción de maquinaria y equipos, entre otros, que forman parte importante de las exportaciones del bloque europeo. A su vez, se compromete a abrir sus fronteras para productos tales como el vino, aceite de oliva, frutas frescas (manzanas, peras, kiwis), enlatados, malta, papas congeladas, carne de cerdo, chocolates, galletas y bebidas.

3. Licitación de obra pública: el acuerdo prevé una apertura en ambos sentidos para que cualquier compañía pueda licitar contratos de obra pública en ambos bloques. De esta forma, una empresa del Mercosur podrá proveer de bienes y servicios a los distintos niveles de gobierno europeo y viceversa, sin ningún tipo de diferenciación o discriminación y mediante procesos transparentes que garanticen la igualdad de condiciones para la adjudicación de las licitaciones.

4. Normas de conservación medioambiental y condiciones laborales justas: el acuerdo es tajante en lo que a buenas prácticas medioambientales y a las condiciones del mercado de trabajo se refiere. Hace especial hincapié en que el incremento del comercio derivado de este acuerdo no deberá resultar perjudicial para el medioambiente y/o las condiciones laborales. Debe promover el desarrollo sostenible. En especial la conservación del Amazonas (para detener el avance de los cultivos forrajeros).

5. Servicios: con la eliminación de las barreras comerciales y siendo la UE uno de los principales importadores globales de "intangibles", se abre un canal de comercialización un mercado muy atractivo para el sector basado en Conocimiento, dado que es el tercer complejo exportador de la Argentina, luego de los sectores agropecuario y automotor.

Un indicador comúnmente utilizado para medir la integración comercial de un país es el coeficiente de apertura (suma de las exportaciones e importaciones como porcentaje del PBI. Es de interpretación sencilla y nos dice en qué proporción el comercio exterior forma parte del ingreso que genera un país. Por lo tanto, coeficientes más elevados implican mayor penetración del comercio en el producto (y por ende un mayor grado de apertura) y viceversa.

Un indicador comúnmente utilizado para medir la integración comercial de un país es el coeficiente de apertura (suma de las exportaciones e importaciones como porcentaje del PBI

En el gráfico pueden observarse datos correspondientes al coeficiente de apertura de los países del Mercosur, además de Chile, China, Nueva Zelanda, Alemania, Francia, y España en 2018. Del mismo se puede advertir que aquellos que exhiben un coeficiente mayor, es decir, son más abiertos al intercambio con el exterior, muestran un ingreso per cápita más elevado.

Como se puede notar, Argentina y Brasil, cuyas economías alcanzan índices que no superan el 30%, tienen un PBI per cápita del 45% y 34% respecto del promedio de los países analizados, lo cual implica que generan menos riqueza en relación al resto.

Para poner en perspectiva, el coeficiente de apertura promedio de los restantes países asciende al 60%, dos veces el de Argentina y Brasil. Por este motivo, es importante promover una inserción inteligente al mundo, generando nuevos socios comerciales y canales de comercialización que permitan abrir más la economía nacional al comercio.

Es importante promover una inserción inteligente al mundo, generando nuevos socios comerciales y canales de comercialización que permitan abrir más la economía nacional al comercio

Potenciales beneficios y riesgos derivados del acuerdo

En el actual contexto macroeconómico y dada la estructura productiva del país, es fundamental generar un sendero previsible para las empresas que producen. Resulta evidente que en el corto plazo las pymes locales no se encuentran en igualdad de condiciones para competir con las del mercado europeo.

Por otro lado, hay sectores que pueden resultar beneficiados de este mayor grado de competencia, tal como los servicios del conocimiento, economías regionales que producen bienes agroindustriales como la vitivinícola y los tradicionales proveedores de materias primas agrícolas.

LA industria vitivinícola puede ser una de las favorecidas por la apertura del intercambio comercial

En síntesis, el acuerdo firmado puede significar un puntapié importante con el objetivo de generar mayor integración comercial. Sin embargo, es importante recalcar que será beneficioso sí y solo sí se otorgan los incentivos adecuados, entre los cuales podemos destacar la modificación del actual esquema tributario, así como también la implementación de marcos legales que brinden facilidades para exportar y no obstaculicen la producción y la inversión. Dada la magnitud del mercado que se abre, se está ante una posibilidad más que interesante

* El autor es Economista Jefe del Centro Regional del Estudios Económicos de Bahía Blanca (CREEBBA), Fundación Bolsa de Comercio de Bahía Blanca (@creebba)

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