En una jugada que algunos economistas consideraron cuestionable, el Banco Central (BCRA) anunció ayer que le compró al Tesoro USD 400 millones que se terminarán de acreditar la semana próxima y que pasarán a engrosar las reservas, que se ubicaban hasta ayer en casi USD 64.000 millones. De esta manera, el organismo monetario suma poder de fuego ante eventuales riesgos cambiarios en estos meses preelectorales.
Según el comunicado del BCRA, la mitad de esos dólares fue liquidada ayer y la otra mitad se concretará el lunes. La explicación de la entidad que dirige Guido Sandleris es que el Tesoro tuvo que enfrentar un "importante pago en pesos por el servicio del bono dual y del bono en pesos a tasa de política monetaria (BOTAPO), de $ 65.500 millones".
"Como preparación para este pago, el Ministerio de Hacienda y Finanzas realizó el día 13 de junio una licitación de letras vinculadas al dólar estadounidense (LELINK) y de BOTAPO. Pero gran parte de las suscripciones, que podían realizarse tanto en pesos como en dólares, se hicieron en moneda extranjera. Por lo tanto, el Tesoro quedó con un exceso de dólares con relación al pago en pesos que debe realizar", explicó el Central.
Como el Tesoro no puede, por el acuerdo firmado con el FMI, vender más de USD 60 millones por día, el BCRA decidió comprarle los dólares y engrosar las reservas, en momentos en que podrían volverse muy necesarios para mantener la paz cambiaria. Hoy el dólar está en caída debido a la cosecha gruesa y el efecto "Pichetto", pero un resultado favorable al kirchnerismo en las PASO podría volver a revertir el escenario, aseguró el economista Federico Furiase, de EcoGo.
De hecho, el propio BCRA plantea que "los dólares adquiridos pasaron a engrosar sus reservas internacionales netas (RIN)" y "aumentan los recursos disponibles para ser utilizados, si la autoridad monetaria lo considerara necesario para evitar una eventual volatilidad disruptiva en el mercado cambiario".
El organismo aclaró también que "esta operación no modifica el compromiso de crecimiento cero de la base monetaria sostenido por la autoridad monetaria", ya que se absorberán los pesos emitidos para comprar las divisas vía las Leliq.
En diálogo con Infobae, Furiase planteó que "en el acuerdo con el FMI se eliminó la posibilidad de emitir por compra de dólares al Tesoro, aún con posterior esterilización", pero que "en una coyuntura de incertidumbre política" como la actual no considera mal que "el BCRA sea pragmático y aproveche el ingreso de capitales en letras del tesoro para acumular reservas y tener mayor poder de fuego por si la incertidumbre política escala". Siempre y cuando, claro está, se mantenga "a rajatabla" el compromiso de crecimiento cero de la base monetaria.
Además -remarcó el economista-, "en un contexto de baja del riesgo país, dólar y tasas de interés como el de los últimos días, el Central no tendría problemas en términos de presión alcista en la tasa de las Leliq para esterilizar". Porque la base monetaria puede no crecer, pero si las tasas son altas, aumentan los pasivos remunerados del BCRA. Vale recordar que esta situación fue la que hizo que se engrosen estos pasivos durante la vigencia régimen de metas de inflación, que se extendió entre 2016 y comienzos 2018. Fue el problema de las Lebac.
Por su parte, el economista de Ecoledesma, Gabriel Caamaño, sostuvo que la decisión del BCRA "pone en evidencia nuevamente que el organismo monetario está subordinado a las necesidades del programa financiero". "Al Tesoro le sobran dólares; el Central luego deberá esterilizar los pesos y eso tendrá su correlato por el lado de los pasivos remunerados, si es que los esteriliza con Leliq. Pero lo que vemos es que el régimen que se anunció en septiembre se fue desdibujando y quedó lo que hay: un esquema enfocado a reducir la inestabilidad cambiaria y subordinado a las necesidades financieras del Tesoro", precisó el analista.
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