YPF y Shell anunciaron durante la tarde del viernes que los precios de sus combustibles -naftas y gasoil- aumentarán 1,5% a partir del sábado 1 de junio. A pesar de que el Gobierno postergó por un mes el incremento del impuesto a los combustibles, la empresa estatal y Raízen decidieron subir los valores.
¿Cómo quedarían los precios con un aumento en torno al 1,5%? El litro de nafta super en YPF costaba $42,01, mientras que la Infinia velía $48,59 el litro. Con el porcentaje de suba que se hizo efectivo desde la medianoche, la super subió a $42,64 y la nafta premium a $49,20.
En cuanto al gasoil, el Diesel 500 costaba $39,65 y el Infinia Diesel $46,52. A partir de hoy costarán $40,24 y $47,10 respectivamente.
Raizen, la dueña de las estaciones de servicio Shell, se sumó a este incremento con el mismo valor. En las estaciones de servicio porteñas el litro de nafta super se comercializará a $43,63 y el V-Power nafta a $49,98. La Formula Diesel a $42,23 y la V-Power Diesel se venderá en $47,98.
El 1° de julio subirá el impuesto que grava al carbono y a los combustibles líquidos, el cual está contemplado en los precios finales de las naftas, que se ajusta por inflación.
Esta actualización correspondía al Impuesto sobre los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, que se aplica cuatro veces al año: en marzo, junio, septiembre y diciembre, en base a los aumentos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de los tres meses anteriores.
La petrolera estatal confirmó, con esta decisión, lo que indicaba la expectativa general del Gobierno: que YPF dé el primer paso y que detrás de se alineen Axion y Raizen, con los combustibles Shell. Si bien en algunas oportunidades fueron estas firmas las que movieron la ficha primero, en la última suba, con el anuncio de YPF, tuvieron que retrotraer los precios a los de su competencia.
En el sector privado están convencidos de que los precios son fijados unilateralmente por el Gobierno, mediante YPF. La empresa lo desmiente rotundamente y argumenta que si ellos, que tienen más del 50% del mercado, no aumentaran, las privadas tampoco podrían hacerlo.
Las petroleras continuarán aumentando los precios debido a que, según explican, los precios están retrasados entre un 12% y un 15%. En este caso, con el 1,5% de incremento, las subas serán más bajas que las previstas anteriormente, donde se hablaba de un piso de 3% para las naftas y 1,7% para el diesel.
El atraso entre los valores actuales y el precio de importación ronda el 10%, que era aproximadamente el mismo que tenía la industria a comienzos de mes, ya que el valor del crudo y del dólar (dos variables clave en la fórmula que define el precio de los combustibles) prácticamente no se movieron en los últimos 30 días. Es más, el brent bajó de USD 72,03 el barril que costaba el 1º de mayo, a USD 69,86 el barril que sale hoy. El dólar, en tanto, subió de $ 45,45 que valía a comienzos de mes a $ 45,89 ayer.
Fotos: Maximiliano Luna
Seguí leyendo:
Pese a la postergación del impuesto, los combustibles podrían subir entre 4 y 5 por ciento
El Gobierno postergó por un mes el aumento del impuesto a los combustibles previsto para junio