Precios Cuidados, créditos Argenta, Plan Procrear. Es realmente sorprendente cómo el paquete de anuncios que realizaría este miércoles el Gobierno está compuesto por numerosos programas que nacieron durante el kirchnerismo. Cada uno en su momento fue criticado por funcionarios de Cambiemos, pero en ningún momento se dieron de baja. Ahora no sólo eso: se trata de los pilares en los que se apoyan para reanimar el consumo en los meses previos a las elecciones presidenciales.
El apuro por avanzar con un relanzamiento de estos programas tiene dos razones muy palpables: el primer motivo es que Mauricio Macri sigue cayendo en las encuestas y nadie sabe dónde frena. Y el segundo es que el consumo no repunta y que la elevada inflación (se esperan niveles de 4% en marzo y en abril) demorará cualquier recuperación. Al menos para los tiempos electorales, teniendo en cuenta lo poco que ya falta para las PASO, apenas cuatro meses.
"Las ventas en los supermercados vienen horribles. En marzo cayeron 10% contra el mismo mes del año anterior. Todavía no se ve un repunte ni nada que se le parezca", le dijo el dueño de una de las cadenas más importantes de la Argentina al ministro de la Producción, Dante Sica. Fue en la última semana en el medio de las reuniones para definir una lista de productos de la "canasta esencial" de alimentos que no tendría aumentos durante seis meses.
El consumo precisa “anabólicos” para poder reactivarse. Las proyecciones privadas marcan una caída de casi 6% interanual en el segundo trimestre, aún cuando el PBI se recuperará por efecto de la gran cosecha
A lo largo de la semana, los ministros a coro salieron a desmentir que se trabaje con la idea de "congelar" precios. Primero fue Nicolás Dujovne en la cena de CIPPEC. Pero luego fue el jefe de Gabinete, Marcos Peña y más tarde el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, los que se pronunciaron de igual modo. Ninguno quiso quedar pegado a los viejos manejos de Guillermo Moreno, que de prepo salía a congelar la lista de todos los productos alimenticios. El resultado entonces de bajar la inflación fue, como se sabe, nulo.
Durante la semana, Sica y su secretario de Comercio Interior, Ignacio Werner, se reunieron con los ejecutivos máximos del negocio supermercadista y la industria alimenticia. Pasaron por sus despachos Luis Pagani (Arcor), Luis Pérez Companc (Molinos), Alfredo Coto, Federico Braun (supermercados La Anónima), Rami Baltieh, entre los más relevantes. En esos encuentros se terminó de delinear cómo será el relanzamiento de Precios Cuidados.
De estos encuentros surgió la idea de definir 40 productos de la canasta esencial que no tendrán ajustes de precios hasta octubre, es decir por lo menos seis meses. Lo único que los ejecutivos le reclamaron al Gobierno es que se parta de precios realistas y no los obliguen a vender debajo del costo.
Se busca evitar lo ocurrido con La Armonía, la segunda marca de leche de La Serenísima, que costaba la mitad que otros productos de la misma empresa. Eso generó que los consumidores se volcaran por esa opción, generando desabastecimiento. Ahora el compromiso es que los productos que se incluyan dentro de este "núcleo duro" de la canasta (arroz, fideos, leche, aceite, dulce de leche, yerba y otros) estén disponibles en forma permanente y no se produzcan faltantes.
Los supermercados ofrecerán además descuentos adicionales para beneficiarios de planes sociales como la AUH y jubilados, es decir quienes cobran de ANSES. Adicionalmente, el ministro de la Producción de la provincia de Buenos Aires, Javier Tizado, está negociando lo propio para el distrito, apuntando a beneficiarios del plan "Más VIDA", IOMA y el Instituto de Previsión Social.
La caída de 4% del dólar en la última semana trajo alivio en el equipo económico. El inicio de la subasta del Tesoro de USD 60 millones diarios también podría hacerlo bajar un escalón adicional
Las perspectivas de mejorar el consumo previo a las elecciones se fueron diluyendo con el correr de las semanas, por lo que se decidió echar mano a las "viejas recetas". Según estimaciones privadas, el PBI en el segundo trimestre mostrará un repunte del 1,3% contra el mismo período del año pasado, sobre todo por el efecto de la reactivación del campo. Sin embargo, el consumo seguirá casi 6% abajo del 2018. Es por eso que resulta imprescindible darle "anabólicos" para que la recuperación no demore tanto. Para eso será necesario frenar las remarcaciones de algunos productos cueste lo que cueste y al mismo tiempo otorgar créditos subsidiados. Así se busca reforzar la capacidad de compra en un momento crítico.
Mientras que la inflación sigue siendo un gran dolor de cabeza, el dólar comenzó a dar buenas noticias, en línea con lo que el propio equipo económico venía proyectando. La liquidación de las cerealeras comenzó a sentirse y la divisa cayó 4% en la última semana. Pero además desde esta semana arranca la licitación de divisas por parte del Tesoro, a razón de USD 60 millones diarios, lo que agregará más oferta y podría acelerar la caída del tipo de cambio.
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