El dólar finalizó con escasas variantes este lunes, después de que el Banco Central incrementó la tasa de interés de política monetaria unos dos puntos porcentuales respecto del viernes.
En sucursales del Banco Nación se ofreció al cierre a 42,30 pesos, con alza marginal de 10 centavos en sus valores al público.
En el mercado mayorista se transó a 41,30 pesos, después de haberse operado con una baja cercana a 2% en el comienzo de los negocios.
En Argentina, los analistas prevén que el dólar mayorista se ubicará en la zona de entre 40 y 41 pesos, luego del abrupto salto en la tasa de interés convalidada por el Banco Central, ahora en torno a 60% anual.
No se descarta una potencial volatilidad cambiaria por indicadores adversos de la macroeconomía nacional, como una alta inflación, y la recesión imperante.
El incremento del tipo de cambio se produjo en la última hora de los negocios, en una rueda con un discreto monto operado, de USD 573 millones en el mercado de contado (spot).
En futuros se pactaron USD 944,2 millones en el ROFEX, donde las posturas para fin de mes cerraron a $42,42, mientras que para diciembre de 2019 concluyeron a 56,50 pesos.
El peso argentino lidera la debilidad de 2019 entre las monedas emergentes, con una depreciación del 8,5 por ciento. En el mismo sentido, el billete verde acumula un alza de 9,5% en lo que va del año.
El real de Brasil, en tanto, seguirá cotizando al compás de las noticias sobre la reforma al sistema de pensiones que busca el presidente Jair Bolsonaro para apuntalar las alicaídas cuentas públicas.
La semana pasada el dólar en Brasil avanzó un 2,5 por ciento. Este lunes cede 0,6% y se opera a 3,84 reales.
"El mercado aún está receloso con relación a las pensiones. Lo que deja más nervioso al mercado es que el Gobierno está mostrando que no está muy enfocado en la reforma, se está dejando llevar por otros asuntos políticos", dijo a Reuters un operador de una institución financiera brasileña.
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