Por diseño, por moda, porque algunas no son fáciles de conseguir y, sobre todo, por la necesidad de "pertenecer". Las marcas aspiracionales siempre fascinaron a los argentinos de clase media. Y cada año a los productos clásicos se suman nuevos íconos por los que algunos consumidores están dispuestos a pagar bastante más de lo que cuestan en el exterior o en relación a otros productos similares. ¿Cuáles son hoy las nuevas marcas y productos más deseadas por los argentinos, a pesar de su precio?
Las mochilas Fjall Raven y Herschel
En el rubro de "accesorios hipster", la estrella es la mochila Kanken, el modelo insignia de la marca nórdica Fjall Raven que se lanzó a fines de los '70 pero fue redescubierto en los últimos años. De tela de lona, su precio ronda los USD 50 (unos $2.000) en sitios de venta online de los Estados Unidos. En la Argentina se pueden conseguir en Mercado Libre con precios que llegan hasta $6.000, según colores y materiales.
Otro caso es el modelo Little America, de la firma canadiense Herschel, con su detalle de tiras de cuero marrón. Este producto sí se puede comprar en locales en la Argentina, a unos $6.000. En Amazon, el mismo modelo cuesta entre USD 77 y USD 100 (entre $3.000 y $ 4.000).
También en la cocina
Las marcas aspiracionales tienen su lugar hasta en la cocina. Detrás de las cafeteras Nespresso, que revolucionaron el mercado hace una década con un primer local en Recoleta, surgieron otras como Kitchenaid, con sus coloridas batidoras retro. El modelo Artisan se puede conseguir a USD 329 ($13.000) en los Estados Unidos. En la Argentina se venden en locales especializados en gastronomía y en algunas cadenas de electrodomésticos, con un valor que ronda los $18.000.
Menos conocida, pero con venta en exclusivos locales de decoración, son las cacerolas y los productos de decoración para la cocina de la marca estadounidense MacKenzie Childs, famosa por sus diseños floreados.
Parlantes y tecnología
Los parlantes inalámbricos Megaboom 3, de la marca Ultimate Ears también entraron en la lista de productos aspiracionales. La empresa nació como fabricante de parlantes y auriculares exclusivamente para profesionales, pero terminó llegando al mercado de consumo masivo, con el primer parlante portátil con sonido de 360 grados. Sus modelos de altavoces Boom 3 y Megaboom son famosos por su diseño resistente. En los Estados Unidos se venden a USD 200 ($8.000) y en la Argentina a $12.000.
Pero en el top del rubro tecnología, sin embargo, siempre se mantienen los teléfonos iPhone, un objeto de deseo para muchos argentinos que se fue incrementando durante los años donde su entrada al país estuvo limitada y solo podían acceder quienes viajaban al exterior o pagaban altos precios en el mercado informal. Hoy el modelo iPhone X S de 256 GB se vende a $100.799 en Buenos Aires y a USD 1.149 ($46.000) en los Estados Unidos, donde según la ciudad en que se compre hay que sumar entre 6% y 8% de tax, lo que da unos 48.500 pesos. El teléfono paga un 16% de aranceles y 11,5% de impuestos para "nacionalizarse" a lo que después se suman otras cargas.
La moda de las zapatillas retro
Las impusieron las IT girls que marcan tendencia, como Kylie Jenner, la más chica del clan Kardashian. Así el modelo Falcon de Adidas Originals rápidamente reemplazó a las icónicas Stan Smith o Superstar en las preferencias de las chicas más jóvenes. Están inspiradas en un viejo modelo de 1997, por eso se conocen como las "zapatillas de papá". En los Estados Unidos pueden costar menos de USD 80 ($3.200), aunque hay algunas más caras según materiales y colores. En la Argentina, su precio va desde $4.799 a 5.299 pesos.
Anteojos clásicos, pero renovados
Los emblemáticos anteojos Wayfarer de Ray-Ban fueron en la década del '50 los primeros que dejaron de lado el metal y lo reemplazaron por el plástico. Con un diseño renovado, el modelo sigue vigente y es uno de los más buscados por los argentinos. También entre los accesorios aspiracionales están otros clásicos: los Ray-Ban Aviator, que tuvieron varias versiones y rediseños durante su larga historia.
Las gorras de los famosos
Más allá de la moda, detrás de la marca estadounidense Goorin Bros hay más de 120 años de historia de fabricación de gorros, gorras y sombreros. No obstante, se convirtieron en tendencia gracias al modelo "Animal Farm Truckers", con bordados de animales en el frente, y por ser elegido por deportistas como Lionel Messi y Neymar. En Mercado Libre su precio arranca en màs de $2.000 pero también hay muchas imitaciones.
Un termo para mostrar
Del mundo de las expediciones y los campings, los termos verdes de la marca Stanley comenzaron a verse cada vez más en las casas, las playas y las oficinas argentinas. Y se transformaron en uno de los ejemplos más llamativos de cómo un producto importado en la Argentina puede llegar a costar cuatro veces más que un supermercado de Miami. La polémica arrancó en las redes sociales con imágenes del mismo producto a USD 19,82 (unos $775) en un supermercado de los Estados Unidos y a $3.899 en la Argentina.
El consumo aspiracional
¿Por qué algunas marcas logran alcanzar esta categorías de aspiracional y otras no? "La sociedad argentina es una sociedad prototípica de clase media, que está construida y define su identidad no solo por la propia mirada sino por la mirada del otro. Vienen de un proceso de modalidad ascendente, miran para arriba para ver cómo siguen subiendo y temen volver hacia abajo", explica Guillermo Oliveto, de la consultora W.
Por eso, los íconos de consumo se terminan transformando en una consolidación de la identidad de clase media. Esto es porque los productos mencionados en la lista si bien son caros dentro de su categoría están lejos de ser inaccesibles, como un auto de alta gama o un reloj de lujo.
La sociedad argentina es una sociedad prototípica de clase media, que está construida y define su identidad no solo por la propia mirada sino por la mirada del otro
Con todo, son consumos que quedan reducidos a las clases altas (ABC1) y media superior (C2), que tienen ingresos familiares superiores a los $68.000. "Dentro del país tenés cinco clases sociales. Este fenómeno de los íconos hoy no corre más allá de los segmentos altos, el 5% de la población, y medio altos, que son el 17%. Pero con eso solo alcanza para provocar un fenómeno como el de los termos", añadió el especialista.
Oliveto destaca otros factores, además de la accesibilidad, que convierten a un producto hoy en aspiracional: la portabilidad, que lo puedas llevar y mostrar, y que sea instagrameable. "Los productos aspiracionales tienen una condición estética muy relevante. Hoy son los que lucen bien en las redes sociales", agregó.
Para Mariela Mociulsky, de la consultora de tendencias Trendsity, a los argentinos les gusta invertir en diseño, siempre en el caso de la punta más alta de la pirámide. Y pueden invertir tanto en el exterior como en la Argentina. "En el caso de la moda, hay distintas ocasiones de consumo. Quizás para productos más cotidianos, como remeras, jeans o ropa interior se compran marcas masivas como H&M, Gap o Forever21. Pero también hay mucha atención con el diseño de las marcas locales", añadió. "Es una etapa del consumo expresivo, donde lo que queremos es reflejar nuestra identidad", concluyó.
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