La elevada inflación y la presión del dólar obligaron al Central a subir el piso de las tasas de interés

La entidad monetaria aumentó los rendimientos de Leliq por segunda rueda consecutiva, a 44,3% anual en promedio. En la City el dólar al público se acercó a 40 pesos

La inflación le está quitando margen al BCRA para bajar más las tasas

El Banco Central convalidó este lunes la segunda alza seguida para las tasas de política monetaria, que siguen por encima del 44% anual. Aunque se trata de subas marginales, queda más claro el cierre de un ciclo bajista que se perpetuó por 30 ruedas consecutivas en el inicio de 2019.

Un proceso inflacionario que todavía dista de finalizar, una vez conocido que en enero el INDEC midió un incremento de precios minoristas de 2,9%, alteró el rumbo definido por el equipo de Guido Sandleris para los rendimientos de las Letras de Liquidez (Leliq), que aun como un instrumento exclusivo para bancos es la referencia para todo el sistema financiero.

Mientras la inflación no ceda, el dólar seguirá en un rango atractivo y las tasas deberán mantenerse elevadas

"La inflación sorprendió al alza en enero, marcando un comienzo de año desafiante. Esperando una inflación alta en el primer trimestre de 2019, elevamos nuestra proyección para 2019 a 32 por ciento", estimó el Grupo SBS.

De hecho, en el inicio de 2019 el descenso de los rendimientos de Leliq influyó en la caída de rentabilidad observada en las últimas ruedas para los plazos fijos, que habían sacado amplia ventaja a la evolución del dólar. Ahora la tasa Badlar para depósitos de más de un millón de pesos en bancos privados se sitúa en 36,06%, unos pocos puntos por encima de la inflación prevista para los próximos doce meses. En tanto, los plazos fijos hasta 59 días rinden 34,91% en la banca privada.

El Banco Central efectuó este lunes su habitual subasta Leliq a siete días de plazo, en la que adjudicó $190.000 millones a una tasa promedio de corte de 44,312% anual, con un aumento marginal de 10 puntos básicos respecto del viernes. La tasa mínima adjudicada fue de 43,201%, mientras que la máxima alcanzó 44,7491 por ciento.

El BCRA cubrió los vencimientos de la fecha por $190.000 millones: eso significa que el stock de Leliq permanece inalterado en unos $945.000 millones, aunque se produjo una expansión monetaria de $1.600 millones debido al pago de intereses.

El Central activó la segunda suba de tasas en seis semanas, período en el cual la demanda de dólares estuvo deprimida y el tipo de cambio se encontraba fuera de la zona de no intervención. Por eso, aun con un incremento de la tasa de política monetaria este lunes el billete verde se aproximó a los $40 para la venta minorista, pese a un feriado en los EEUU que redujo a montos mínimos la operatoria financiera doméstica.

Los retornos por depósitos a plazo fijo apenas superan a la inflación esperada para los próximos meses

"El dólar se sostiene en un rango atractivo, la tasa bajó en lo que va del año cerca de 15 puntos porcentuales y la inflación no cede (…) entonces, el riesgo se percibe alto para estar en pesos", estimó un reporte de Portfolio Personal Inversiones.

Además, hizo "hincapié en que las tasas de interés desaceleraron su recorte en las últimas ruedas debido a los efectos de algunos cambios de normativa que limitan la tenencia de Leliq por parte de los bancos".

A partir de abril, el stock de Leliq no podrá exceder al patrimonio neto de los bancos o dos tercios de los depósitos realizados en cada entidad por el sector público y privado no financieros –lo que arroje un saldo mayor– lo que podría producir un impacto sensible de liquidez en el sistema financiero en las próximas semanas.

"En el actual contexto de estancamiento de los préstamos, la rentabilidad de los bancos depende casi íntegramente de las Leliq", indicó un informe de Delphos Investment, en el que estimó que "la tasa real ofrecida por los depósitos a plazo alcanzó un piso".

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