Todavía queda poco menos de un mes hasta que llegue el primero de los aumentos de electricidad del año para el Área Metropolitana de Buenos Aires. En las facturas de febrero los usuarios de Edenor y Edesur verán un incremento de 26 por ciento. Para fin de año, las facturas registrarán un aumento acumulado del 55 pro ciento.
Para entender ese cambio, es importante tomar en cuenta qué información de las boletas son relevantes para saber exactamente lo que se cobra. En definitiva, la medida importante es el kilovatio por hora (kWh) que se consume en el período. El total de lo consumido determina a que categoría pertenece cada cliente.
Para llegar a ese dato, las distribuidoras suman los kWh consumidos a lo largo de dos meses, y se divide. Esa cifra mensual determina la categoría en la que el consumidor entra. Las residenciales van de T1R1 a R9, en orden ascendente. Y la factura final crece en ese mismo sentido. Entre 100 y 401 kWh mensuales, aplican las categorías R1 a R3. Entre 401 y 601 kWh están los R4 a R6, y así sucesivamente.
Cada categoría contempla dos tipos de cargos: fijos y variables. En definitiva, los cargos fijos no cambian dentro de la misma categoría, mientras que los variables si lo hacen. Por ejemplo: un R3 (326 kWh a 400 kWh) que consumió 350 kWh pagará distinto de uno que tenga registrado 375 kWh en la factura, a pesar de tener cargos fijos similares.
A esa combinación de cargos fijos y variables se le suman como un porcentaje los impuestos pertinentes, tanto provinciales como municipales. En ese sentido, hay veces que el factor impositivo es el que termina repercutiendo en mayor escala, con algunos municipios adhiriendo gravámenes como el barrido o incluso en algunos casos el ABL a la factura.
Por eso, explica Ariel Mesch, ingeniero industrial y experto en energías renovables, "lo importante no es consumir un poco menos, el verdadero ahorro es pasar de una tarifa a la otra inferior. Así se deja de pagar por lo ahorrado y lo que se termina consumiendo sale más barato".
En algún momento de 2019 se hará efectivo el traspaso oficial de la tarifa social desde el Estado Nacional a las provincias
Y una reducción significativa en el consumo también tiene otro punto a favor importante. En el caso en el que de un período al otro de referencia (2015 o en el que servicio se dio de alta) se haya consumido un 20% menos, el usuario recibirá una bonificación en la tarifa por 20 por ciento.
Con la próxima actualización de los cuadros tarifarios de Edenor, por ejemplo, los usuarios R1 que en promedio consumían 80 kWh por mes, pasarán a pagar $600 por mes a partir de marzo. En el otro lado del espectro, los R9 que en promedio utilizan 1.811 kWh desembolsaran $12.100 por mes.
Para saber mejor cómo eficientizar el consumo, desde el Ente Nacional Regulador de la Electricidad recomiendan el uso de su Calculadora de consumo eléctrico (en el sitio del Enre en argentina.gob.ar). Allí, los usuarios pueden ingresar el detalle de sus electrodomésticos y la cantidad de horas que están en uso para llegar al de kWh consumidos por bimestre.
En ese sentido, Mesch distingue que no todas las compañías siguen el esquema de Edenor y Edesur. Algunas aplican un sistema de tarifas donde se cobra un precio determinado para el primer tramo de kWh consumidos y después se pasan a pagar más por cada kWh subsiguiente. "Hay muchas empresas más chicas que tienen que distribuir costos entre menos usuarios, con lo cual el costo variable siempre tiende a ser más caro", señala Mesch.
Un cambio importante que se espera en algún momento de 2019 es el traspaso oficial en todas las provincias de la tarifa social que por ahora venía siendo subsidiada por el Estado Nacional, pero no hay confirmación oficial, sólo una intención declarada de Buenos Aires y Capital de hacerlo. Desde algunas jurisdicciones consideran que no están dadas las condiciones para cubrir ese gasto, con lo cual en algunos casos la tarifa social virtualmente desaparecería en esos partidos.
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