La Argentina está a pocos días de terminar un año de "tormentas sucesivas". Así lo resumió el propio presidente Mauricio Macri pocos días atrás, durante el brindis de fin de año en la Casa Rosada. "Tormentas" y "turbulencias" son las dos formas más elegidas por el mandatario y su equipo para definir el 2018 económico de país.
Aquí un repaso por los principales hechos de un año donde la economía entró en recesión:
11 de enero: Los datos oficiales mostraron que la inflación en la Argentina estaba por encima de la meta del Banco Central, impulsada por el costo de los servicios públicos, los combustibles y el transporte público.
23 de enero: Se registra un déficit comercial de USD 8.500 millones en 2017, en comparación con un superávit del año anterior. Las importaciones totales saltaron como consecuencia de una recuperación económica y la liberalización del comercio, pero las exportaciones retroceden debido, en parte, a la fortaleza del peso. 5 mar: El Banco Central de Argentina vende 30 millones en el mercado spot, su primera intervención significativa durante el mandato de Macri para impulsar el peso de cara a las crecientes dudas de los inversores sobre su habilidad para lidiar con los desequilibrios financieros del país.
12 de marzo – Desde el agro se descarta cualquier recuperación en los rendimientos de la soja, afectada por una sequía de cuatro meses. La temporada está "muerta" para la principal exportación del país.
13 de marzo – El ministro de Finanzas, Luis Caputo, dice que no se venderán bonos extranjeros adicionales en 2018 y reconoce que los inversores están preocupados por la rápida acumulación de deuda del país después de su retorno a los mercados de capital.
21 de marzo – La Reserva Federal de Estados Unidos sube por primera vez las tasas de interés, fortaleciendo el dólar en todo el mundo e impulsando una huida financiera de los mercados emergentes más riesgosos.
23 de abril – Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años de referencia de Estados Unidos alcanzan su máximo en más de cuatro años debido a las crecientes expectativas de inflación, reduciendo el atractivo de los activos de los mercados emergentes.
25 de abril – Después de usar más de USD 600 millones en dos días, el Banco Central vende otros USD 1.470 millones en reservas en el mercado de divisas. Fue su mayor intervención en los últimos 15 años para defender el peso.
7 de junio – Argentina alcanza un acuerdo preliminar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para obtener una línea de crédito stand-by por 50.000 millones de dólares, con el que el Gobierno busca llevar calma a los inversores tras recientes turbulencias financieras.
14 de junio – Luego de una disparada del dólar, renunció Federico Sturzenegger, quien era presidente de Banco Central. Lo reemplazó Caputo, ministro de Finanzas.
2 de agosto – Cifras muestran que, en junio, la producción industrial de Argentina experimentó la mayor caída anual desde que el país se encontraba en medio de una crisis económica en 2002.
13 de agosto – Presionado por la volatilidad en otros mercados emergentes, especialmente en Turquía, el peso se desliza a un mínimo histórico de 30 unidades por dólar.
17 de agosto – Macri reconoce que es probable que más argentinos estén viviendo en la pobreza en comparación con el año pasado, ya que la economía del país se desliza hacia una recesión después de la crisis monetaria y la grave sequía que dañó la producción agrícola.
30 de agosto – El Banco Central eleva la tasa de política monetaria a 60 por ciento desde 45 por ciento a medida que el peso colapsa, alcanzando mínimos históricos de 42 unidades por dólar antes de finalizar el día a cerca de 38.
3 de septiembre – Macri anuncia nuevos impuestos a las exportaciones y fuertes recortes en un intento de equilibrar el presupuesto del próximo año, mientras que su Gobierno de centro-derecha pretende persuadir al FMI para que acelere el programa del país.
25 de septiembre – Renuncia Caputo al BCRA y es reemplazado por Guido Sandleris, el segundo de Dujovne en Hacienda. Además, el sindicato más grande convoca una huelga de 24 horas para protestar contra el manejo de la economía por parte de Macri. El mismo día, Argentina nombra al nuevo titular del banco central, el tercero en 2018.
26 de septiembre – El FMI amplía el programa crediticio a tres años con Argentina en 7.000 millones de dólares a 57.000 millones de dólares. El banco central argentino se compromete a detener las intervenciones a gran escala para respaldar el peso en crisis y adopta una banda de flotación.
24 de octubre – La policía argentina dispara balas de goma, gases lacrimógenos y agua a los manifestantes que marchan frente al Congreso contra el proyecto de ley de presupuesto 2019 del Gobierno.
15 de noviembre – El Senado de Argentina aprueba el proyecto de ley de presupuesto para el 2019 del Gobierno, que reduce el gasto público y aumenta impuestos para alcanzar el equilibrio fiscal primario acordado con el FMI.
19 de diciembre – Por el riesgo país alto y la falta de crédito, el Gobierno canceló los nuevos proyectos de participación público privada (PPP):
20 de diciembre – El riesgo país supera los 800 puntos y es el punto más alto en en gobierno de Macri.
Seguí leyendo: