El titular del Banco Central, Guido Sandleris, explicará hoy por la tarde, en una conferencia de prensa en el BCRA, la evolución de la política monetaria y cambiaria que el Gobierno fijó con el FMI en la renegociación del nuevo acuerdo con la institución que será tratado este viernes por el staff de ese organismo.
Sandleris aprovechará la reunión mensual del IPoM, "Informe de Política Monetaria", para dar a conocer, tal vez con más detalles, las metas monetarias y cambiarias hasta el 2021 y también números de la evolución del programa monetario y cambiario puesto en funcionamiento desde el 1º de octubre pasado.
Según pudo saber Infobae, el BCRA dejará claro el compromiso que el Gobierno asumió con el FMI. En particular que por el momento mantendrá una política de tasa de interés activa alta en pesos cercana al 65% anual. "Esa tasa no se reducirá hasta que no tengamos la evidencia de que la inflación comenzó a bajar", dicen en el Gobierno.
En su exposición del viernes pasado en el 54º Coloquio de IDEA, luego de que se conocieran los altos índices de inflación de septiembre con un IPC del 6,5%, el ministro Nicolás Dujovne destacó que "la inflación está desacelerándose desde hace 10 días. Cuando miro los datos diarios, desde hace 10 días la inflación diaria cae, lo que nos muestra que la política monetaria está haciendo efecto". Dujovne reconoció que la inflación de octubre y noviembre van a ser altas.
Pero en referencia a la proyección de inflación anual en torno al 45%-48% que proyectan la mayoría de la consultoras económicas, Dujovne explicó que "mirar esta proyección y mirar para adelante es como mirar el futuro con el espejo retrovisor". Desde el Ministerio de Hacienda y Finanzas y desde el BCRA consideran que la política monetaria "muy dura" empezó a dar sus frutos y la fortaleza de la moneda ya no depende de la intervención del Central, "sino de lo restrictiva y creíble que sea la política monetaria". En el Gobierno insisten con que la inflación comenzará a bajar desde diciembre junto con las tasas de interés.
También destacan que el IPC registrará tasas cercanas al 4,5%, 3% y 2% en octubre, noviembre y diciembre, respectivamente. Y que la tensión sobre los precios descenderá al tiempo que las expectativas acompañarán para que de esa forma las tasas de interés puedan comenzar a reducirse y comenzar a perforar el piso del 65% mensual. Junto a ello tendrá lugar una reducción en el valor del dólar que irá de $37 a cerca de $34,50 a fin de octubre. Un valor apenas por encima del piso de la banda cambiaria de $34 para comenzar a comprar dólares y poder emitir dinero sin alterar el programa de crecimiento cero de la base monetaria fijado con el FMI hasta junio de 2019.
Con respecto al actual régimen de bandas de flotación cambiaria, el economista Ricardo Arriazu manifiesta que "un 99% de los economistas en los Estados Unidos y 95% de los economistas en Argentina son partidarios de un sistema de tipo de cambio flotante, por considerarlo técnicamente superior, sin tomar en consideración las realidades propias de cada país, pero esa práctica de ideologizar la elección de algún esquema por sobre otros puede ser muy dañino para los países".
La tasa bajo el esquema Sandleris es fijada por el mercado y su nivel surge después de cada licitación que el Banco Central realiza para absorber pesos de manera que el promedio de la base monetaria se mantenga constante mes a mes. En Hacienda confían en que con la estabilización del dólar, más una coordinación rigurosa entre la política monetaria y la actualización de tarifas, la inflación descenderá a partir de diciembre próximo.
En su primera aparición pública al frente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), el 25 de septiembre pasado cuando la cotización del dólar superaba los $41, Sandleris anunció la nueva política monetaria y cambiaria que la institución comenzó a aplicar desde el 1° de octubre. En esa conferencia Sandleris explicó que el régimen de metas de inflación como fue implementado en estos casi tres años no dio los resultados esperados.
Desde el Gobierno consideran que el programa monetario acordado con el FMI en el nuevo acuerdo provee para el corto plazo lo que los economistas llaman un ancla nominal y en que en este momento la Argentina necesita de un ancla simple y contundente. Esta ancla nominal está cimentada en el estricto control sobre la cantidad de pesos en la economía. Pero el costo es una tasa de interés activa en pesos muy alta cercana al 65% anual que el BCRA mantendrá hasta que no baje la inflación.
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