La aceleración de los aumentos de precios generales se evidenció en los últimos meses, son datos inflacionarios por arriba del 3%. De cara a lo que resta del año, y el primer semestre del próximo, la baja de la inflación no aparece entre las posibilidades en un futuro cercano.
Según la última Encuesta de Expectativas de Inflación del Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella, efectuada en la primera quincena de septiembre, los consumidores esperan que de cara a los próximos 12 meses el aumento de precios llegue a un 40 por ciento en promedio. El dato es casi 5 punto más alto que el informado en agosto, cuando a nivel nacional se esperaba una suba de 35,3 por ciento.
El salto devaluatorio de la última semana de agosto, con su esperada transferencia a los precios, junto con las últimas "cuotas" que restan desde las corridas de junio, presentan un piso difícil de perforar en términos inflacionarios. Para septiembre, las consultoras privadas ya establecen una expectativa de entre 5 y 7 por ciento.
Si bien el primer efecto devaluatorio sobre alimentos y bebidas se distribuye de forma equilibrada, los aumentos tarifarios tanto en transporte como en energía que se concentraron este año en el área metropolitana de Buenos Aires generan que los bonaerenses esperen precios más elevados que el resto del país. La expectativa promedio del Gran Buenos Aires es de 41,7%, contra un 38,7% para el interior del país.
Según el último reporte del Banco Central con datos de fines de agosto donde se recopilan las expectativas de las consultoras privadas, los analistas del sector esperan que de cara a fin de 2018, la tasa de inflación llegue a 40,3%. El dato representA un salto de 8,5 puntos porcentuales respecto del pronostico anterior de julio.
La aceleración inflacionaria es uno de los puntos más débiles en el programa económico del Gobierno, donde el ajuste de múltiples metas en lo que va del año (de 10% a 15% a 27%) ya generó un desgaste importante de la credibilidad del Banco Central. La consecuencia más reciente de este desgaste se vio con la renuncia de Luis Caputo.
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