La devaluación del peso y la disparada del dólar benefició a los uruguayos, que comenzaron a cruzar la frontera para hacer sus compras en el país. Desde el litro de nafta hasta los productos de la canasta básica están mucho más baratos a raíz del tipo de cambio alto.
Atentos a este peso competitivo, la Dirección de Aduanas de Uruguay prohibió el ingreso al país de más de 5 kilos de alimentos sólidos por persona. La decisión causó un malestar creciente en las autoridades y comerciantes de las provincias del Litoral, que comenzaron a reclamar formalmente al Gobierno que disponga de acciones diplomáticas contra estas trabas fronterizas.
A comienzos de este mes, el municipio entrerriano de Colón expresó su rechazo a las restricciones aduaneras en una resolución en la que exhorta al presidente Mauricio Macri y al ministro de Relaciones Exteriores y Culto, Jorge Faurie, a que "efectúen el reclamo diplomático por las medidas tomadas por Uruguay". Y definió informar al Parlamento del Mercosur (Parlasur) para que "emita una declaración y/o recomendación a los Estados tendientes a revertir esta política que conspira contra la real integración de los pueblos".
A esa queja se sumaron los intendentes de Concordia y Gualeguaychú. Junto al jefe comunal de Colón, los tres funcionarios iniciaron gestiones ante el Ministerio del Interior, a cargo de Rogelio Frigerio, para que intervenga a fin de encontrar un punto de equilibrio.
"Esas trabas y controles son inexistentes en la frontera norte de Uruguay y Brasil entre las ciudades de Bella Unión y Quareim, por lo que es evidente la animosidad contraria a facilitar el libre comercio con Argentina, una de las bases económicas del Mercosur", señala una nota enviada al Poder Ejecutivo de parte de los intendentes Enrique Cresto, Mariano Rebord y Martín Piaggio, según consignó el diario El País.
"Quienes habitamos estas ciudades sabemos que históricamente se han repetido situaciones como la presente, y que hasta comienzos de este año 2018, los argentinos consumíamos mercadería y realizábamos compras en el país vecino por la bonanza cambiaria", protestaron en la carta los representante de Colón, Concordia y Gualeguaychú. En ese tiempo, recordaron, la aduana argentina "no puso ninguna restricción que impidiera la libre circulación".
Más visitas
Desde que el dólar se disparó por arriba de los $40, creció con fuerza el flujo de tránsito desde Uruguay hacia Entre Ríos. La mayoría de los visitantes provienen de Paysandú, Salto y Fray Bentos.
Según datos de Migraciones, el primer fin de semana de septiembre en los cruces fronterizos de Colón, Concordia y Gualeguaychú creció un 30% con respecto al primer fin de semana de agosto. En esos tres días fueron 10 mil uruguayos los que ingresaron al país, mientras que Concordia fue la ciudad que más visitantes recibió, con un total de 3.100 extranjeros.
El embajador argentino en Montevideo, Mario Barletta, señaló al mismo medio que "las quejas son entendibles porque los comerciantes de las ciudades argentinas en esta situación ven una oportunidad y colocando un límite se podría decir que los afecta". Si bien aclaró que por el momento no hay una postura del Gobierno por este tema, están dispuestos a recibir más reclamos como ya ocurrió con la postura de la Cámara de Comercio de Colón días atrás, que también rechazó las trabas uruguayas.
Fuerte variación de precios
El precio del litro de nafta súper en Uruguay está a $55, en Argentina a $38. Del otro lado de la frontera, el kilo de azúcar está a $45, mientras que en el país está a $16. El kg. de colita de cuadril cuesta $206 en Entre Ríos, y en Uruguay 351 pesos argentinos.
Con respecto a otros artículos no alimentarios, en la compra de un dentrífico se da una relación similar, de $60 y a $37, respectivamente. Un par de zapatillas, en tanto, puede costar $1.300 en el país y $2.200 en la república vecina.
Para desalentar la compra de combustibles en el país, el Gobierno uruguayo resolvió la rebaja de un impuesto que alcanza a las estaciones de servicio que estén a 20 kilómetros en la frontera con Argentina.
"Somos sensibles a las diferencias que existen ahora con la República Argentina. Hemos arribado a un descuento en el Impuesto Específico Interno (Imesi) de 24% en las estaciones de servicio que se encuentren a 20 kilómetros de la frontera con Argentina, lo que representa un gesto importante del gobierno", anunció la ministra de Industria uruguaya, Carolina Cosse.
En Uruguay también hay fuertes quejas por la fuga del comercio minorista. "Las ventas han bajado un 35% en relación al mismo período del año pasado", dijo Jorge Ledesma, presidente del Centro Comercial e Industrial de Paysandú."El comercio de Paysandú pierde mensualmente un millón de dólares con la transferencia de compras que ahora se hacen del lado argentino. Esto viene así desde febrero", indicó al matutino uruguayo.
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