Mientras se extienden en el mundo las decisiones de subir las tasas de interés, en la Argentina –que fue abanderada en este movimiento– la tasa de referencia se mantuvo en 40% anual. No fue una sorpresa. Era lo que esperaba el mercado.
El tema es que hoy los inversores son espectadores del futuro, atentos a las consecuencias de la política monetaria de Estados Unidos que volvió a derribar a Wall Street y con los Bonos del Tesoro con un rendimiento de 3,06%.
Pero además de ese problema que se va a prolongar en el tiempo, están los obstáculos internos que se avecinan.
"La Argentina va a tener días complicados hasta fin de junio, por los vencimientos de impuestos y el pago del medio aguinaldo", advirtió José Nápoli de Nápoli Inversiones SA.
Y razón no le falta. Desde fines de mayo se comienzan a pagar impuestos a las Ganancias y Bienes Personales y a fin de junio el medio aguinaldo. Por supuesto, el efectivo va a ser tan necesario como el aire que se respira. Y las tasas indican que endeudarse para pagar impuestos y aguinaldos es un camino demasiado costoso. Muchos van a liquidar posiciones en Lebac o vender dólares. Otros, entrarán en mora.
La situación se refleja en el crecimiento de los cheques rebotados en lo que va de mayo. En las "cuevas", donde las tasas llegan a 8% mensual, impuesto al cheque incluido, están dejando de lado este negocio que se complicó desde la turbulencia cambiaria.
Hay sectores como el gastronómico donde los restaurantes no pueden pagar cargas sociales y cayó su facturación. "La gente está recortando gastos y además enfrentamos juicios laborales impagables", se quejó uno de los propietarios.
Hablar con ellos, es sentirse habitante de un país donde oscureció de pronto, pese a que hay sectores que se van a ver beneficiados por la mejora del tipo de cambio.
Y si la devaluación no golpeó más a los precios, es porque la tasa de interés y el ajuste que se espera pusieron un techo.
Por eso, con el Banco Central manteniendo inmóvil su oferta de USD 5 mil millones a $25, el dólar, en la plaza mayorista, donde se negociaron USD 869 millones, bajó 9 centavos a $24,30.
En bancos y casas de cambio, la divisa cerró a $24,86, cuatro centavos menos que la rueda anterior. El "blue" perdió 10 centavos y cotizó a $25,40 pero casi sin operaciones.
En el mercado de bonos de la deuda, se operó un volumen elevado para aprovechar la atractiva tasa de retorno de los títulos en dólares, una de las inversiones elegidas por los fondos, en desmedro de las acciones y otros activos de riesgo. Por eso, el Bonar 2024, el título de referencia, aumentó 0,10% y el Discount con legislación argentina, que nació con el canje de la deuda y vence en 2033, avanzó 0,82%. La renta de este título está por encima de 7%.
Las Lebac a 56 días (39,95%) continuaron superando en rendimiento a las de 29 días (39,76%). Los inversores tienen puesta su mirada en las Lebac que vencen en julio, agosto y septiembre porque calculan que esas tasas que hoy son altas, se lucirán más en el futuro. Apuestan a que 40% es un techo para las tasas y que con ese rendimiento superarán al dólar.
Entre bonos en divisas y Lebac, se disputan la atención de un mercado cauteloso que no acepta riesgos.
Esto quedó demostrado con la Bolsa, donde con escasos negocios por $674 millones, el índice Merval de las acciones líderes se derrumbó 2,03%. Solo un papel subió: Agrometal (+3,72%).
Banco Supervielle (-8,08%), con un balance con resultados inferiores a los esperados, lideró las caídas. Grupo Galicia perdió 4,04%. Las empresas de gas pagaron las consecuencias del fallo judicial que impide cortar el fluido a los usuarios que están en mora. Por eso Metrogas (-6,73%) y Transportadora Gas del Norte (-4,73%) estuvieron entre las de peor performance.
Los ADR argentinos (certificados de tenencias de acciones) que cotizan en dólares en Wall Street, tampoco tuvieron una buena rueda. Solo Mercado Libre (+1,43%) tuvo un alza ponderable. Los otros cinco papeles que lograron subas, no sobrepasaron 0,50%. La caída más importante fue la de Banco Supervielle (-7,85%) seguida de Central Puerto (-2,03%).
Los días que vienen serán de tensión. Los recortes no solo se harán en el Estado, sino también en el sector privado. El tema es que los privados siempre se anticipan y ya comenzaron a recortar gastos. Pagar impuestos en medio de un ajuste es el peor escenario para los inversores.