De manera ampliamente mayoritaria, los analistas e inversores consideran que el 28 de diciembre pasado fue el punto de inflexión en el que comenzó a reinar la incertidumbre sobre el futuro de la política económica en la Argentina. La decisión del ala económica de "recalibrar" la meta de inflación y llevarla al 15% para este año dejó en off side al titular del Central, Federico Sturzenegger. Y a partir de ese momento comenzó el deterioro en el precio de los activos argentinos y un poco después las presiones cambiarias.
Pero hace pocos minutos el presidente Mauricio Macri dio a entender que se revierte esa decisión, algo que le estaría comunicando en estos momentos en un encuentro a solas a Sturzenegger. "Vamos a delegar como corresponde la responsabilidad de bajar la inflación en el BCRA, que irá comunicando qué medidas irá tomando y pronósticos. Queda claro que es fundamental bajar la inflación".
El declive de los activos argentinos comenzó el día que el Gobierno anunció un cambio de la meta de inflación. Ahora le estarían devolviendo esa potestad al Banco Central
La recuperación de la autonomía del Central incluso para fijar la meta de inflación (algo que sucede en realidad en pocos países) va de la mano de otras señales importantes que ayer se ocupó de dar el Presidente. En particular cuando dio a entender que el gradualismo es cosa del pasado. Y dejó en claro que "no alcanza" con las actuales metas de reducción del déficit y que hay que acelerar la disminución del mismo.
El fin del gradualismo fiscal ya llegó
Las discusiones con el FMI pasan, justamente, por el ritmo y la manera en que se irá hacia el equilibrio fiscal. Nicolás Dujovne ya anunció que la meta de rojo primario para este año se bajó del 3,2% previsto en el Presupuesto al 2,7%. Podría haber un recorte adicional. Pero para el año próximo el objetivo es llevarlo a no más de 1% del Producto, es decir muy cerca del equilibrio fiscal. Es, en realidad, la noticia que más esperan los inversores para seguir prestándole a la Argentina: una garantía de que habrá capacidad de repago. Será, por otra parte, la gran discusión que se avecina con la oposición, gobernadores, y legisladores.
Por su parte, Sturzenegger en conferencia de prensa al presentar el Informe de Estabilidad Monetaria, consideró que esta vez la suba del dólar no tiene por qué trasladarse a precios. Y así cruzo a Dujovne, quien había reconocido que tras la devaluación "tendremos una economía con menos crecimiento y más inflación".
En el Central creen que la suba del dólar esta vez no tendría por qué trasladarse a precios. La reducción más acelerada del déficit fiscal ayudaría, pero también la caída del consumo que impide remarcar
Pero en el BCRA consideran que no tiene por qué ser así. Por lo pronto, el titular de la institución adelantó que "en mayo la inflación núcleo está presentando una sensible baja en relación al nivel de abril (2,1%) y no tenemos por qué pensar que el proceso de desinflación no continuará como lo teníamos previsto". Y enfatizó que la suba de las tasas de interés hasta el 40% para el plazo de siete días tiene como uno de los objetivos contener la suba de precios.
“Recalibrar” la meta de inflación y llevarla al 15% para este año dejó en off side al titular del Central, Federico Sturzenegger
Sturzenegger consideró además que este año la inflación será menor a la del año pasado, aún luego del salto del dólar. Sin embargo, muchos analistas creen que no será así y las previsiones ahora marcan que podría terminar superando cómodamente el 24,8% registrado el año pasado.
Además, el funcionario defendió la suba de tasas: "Contener la turbulencia que registramos en las últimas semanas es muy reactivante de la actividad económica", señaló.
Seguí leyendo: