Con el dólar en un valor récord y el barril de crudo por encima de los USD 70, las petroleras analizan por estas horas el porcentaje conveniente para definir otro incremento en el precio de los combustibles. La duda nuevamente es: ¿shock o gradualismo?
Desde la Cámara de Empresarios del Combustible advirtieron que hay un atraso del 20 por ciento. Raúl Castellanos, vocero de la entidad, aseguró que "los componentes que hacen al costo de producción del combustible se han disparado, tanto el precio de petróleo en dólares como el tipo de cambio, que ha subido, y eso ha generado un atraso en el precio que en algún momento se va a traducir en un aumento".
Consultado en radio La Red, Castellanos habló de "un desfasaje superior al 20%, si además se toma como punto de partida el momento de la desregulación de los precios, en octubre del año pasado".
Desde el mes pasado, los precios vigentes son $25,24 para el litro de nafta súper, y $29,28 para la premium. En el caso del gasoil, los valores quedaron en $22,06 para el D500, y en $25,70 para la premium Infinia.
Desde la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines también advirtieron sobre la necesidad de un ajuste en el precio de los combustibles. Pero ¿cuánto debería ser el precio de la nafta? "Hay margen para que el combustible aumente entre un 10 y 12%, pero no hay oportunidad. En este momento debe ser gradual el aumento", sintetizó Carlos Gold, presidente de la entidad.
Para tratar de justificar el reclamo del sector, el empresario explicó que un barril de crudo "en octubre del año pasado –antes de que el Gobierno liberase el precio– valía 1.000 pesos y en este momento estamos en 1.600 pesos. Tenemos un insumo que creció 60% contra un combustible que creció un 30%. Pero eso no quiere decir que tiene que aumentar 30% de una", añadió.
En este marco, Gold admitió que la presión sobre el tipo de cambio de los últimos días tomó por sorpresa a los estacioneros. "El día de ayer fue ajetreado, con mucha incertidumbre y pensando un poco cómo se van a ir encaminando la cosas", manifestó.
Por estas horas, los principales directivos de las petroleras se debaten entre dos posibilidades conocidas para el mundo de la economía y la política: shock vs. gradualismo.
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