El ministro de Hacienda de la Nación, Nicolás Dujovne, pidió "no ponerse nerviosos" por el aumento que registró el dólar en los últimos días, que llevó a la divisa norteamericana a cerrar el jueves en $20,50 luego de la intervención del Banco Central.
"Pongamos en contexto el movimiento que ha tenido el tipo de cambio esta semana, 30 centavos, 1,5% en una moneda que es flotante con intervención, es nada… Los argentinos no estamos acostumbrados a la flotación (del dólar), pero tenemos que ponernos menos nerviosos cuando se mueve el tipo de cambio", dijo el funcionario.
En declaraciones a Radio Mitre, Dujovne ratificó que el BCRA tiene el apoyo del Gobierno para utilizar las herramientas necesarias para evitar que la moneda norteamericana suba, acompañando el proceso de apreciación que está registrando en el mundo.
"La primera semana de enero el Banco Central le compró al Tesoro 9.000 millones de dólares en un día. Que venda en un día 1.500 millones tampoco nos tiene que poner nerviosos", explicó el ministro y aclaró que "cada vez que la autoridad monetaria vendió fuerte en el mercado, ganó dinero".
Al ser consultado sobre el error de cálculo respecto al plan antiinflacionario, Dujovne admitió que lo que se instrumentó no terminó resultando como se pensaba. "Las metas que se anunciaron a comienzo de la gestión de Mauricio eran muy ambiciosas; acá enfrentamos una situación incidida: un programa económico que está bajando la inflación, corrigiendo años de descalabros en el precio de los servicios públicos, lo cual dificulta la tarea", señaló.
En este sentido, aseguró que la inflación se está bajando sin recurrir a los atajos típicos que tomaron los argentinos durante los últimos 70 años, que no funcionaron, como fijar tarifas, salarios y el tipo de cambio. "Es cierto que hemos ido un poco más despacio de lo que pensábamos en términos de inflación", reconoció.
Sin embargo mantiene el optimismo y el rumbo elegido para contener los precios. "El gobierno no tienen ninguna duda que la inflación va a seguir bajando", enfatizó.
El ministro se tomó unos minutos para explicar por qué la inflación va a bajar muy fuerte a partir de mayo. "En los primeros meses del año, arrancamos el año con un arrastre muy fuerte de la suba de la electricidad en diciembre. Después tuvimos nuevas recomposiciones tarifarias en febrero y marzo. Pero ese proceso está llegando a su fin. En abril tuvimos la suba del gas. Después nos quedan pequeñas subas en agosto y en octubre. Pero en mayo los precios regulados no suben. Y como la inflación núcleo ya está bajando en las últimas semanas, de la composición de ambos fenómenos (…) sabemos que en mayo vamos a tener números más bajos; y esperemos que se consoliden en junio y julio y sigamos con este proceso de desinflación".
Al ser consultado sobre las proyecciones de inflación que maneja el Gobierno para todo el año, el ministro señaló: "Proyectar hoy la inflación del 2018 mirando los primeros tres meses de este año lleva a sobrestimar la inflación que vamos a tener al final". Sin embargo, dijo que el IPC esperado a 12 meses por los analistas del sector privado está en 14 o 15 por ciento.
Dujovne reiteró que "la meta de inflación en el 2017 era entre 12 y 17% y se terminó con 25%, con un desvío de diez puntos. Esas metas que se habían puesto a pocos días de asumir no reflejaban el ritmo al que estaba bajando la inflación y no funcionaban como guía por ejemplo para los acuerdos salariales".
Así, el ministro explicó que este año los acuerdos promedio en el sector privado se han cerrado en torno al 16% de alza salarial, y casi todos sin cláusula gatillo. "Esto es muy importante para la economía. Nos va a permitir avanzar en la desinflación", enfatizó.
Al mismo tiempo, el titular del palacio de Hacienda dijo que la economía argentina hoy está repitiendo su segundo año de crecimiento y que las expectativas de crecimiento para el año que viene son más altas que para este año. "Algunas cosas buenas están ocurriendo en la economía argentina más allá de la volatilidad de corto plazo y de que la inflación tarde un poquito más en bajar", señaló.
Finalmente, Dujovne rechazó bajar el IVA a los servicios públicos como habían sugerido desde algunas provincias. "Es un impuesto que debe ser votado por el Congreso. Pero la verdad es que no tenemos espacio fiscal para reducirlo". "Si las provincias pensaran que deberíamos bajarlo, deberíamos discutir como compensamos lo que perdemos", concluyó.
Seguí leyendo: