A la gestión realizada en Washington por el secretario de Comercio, Miguel Braun, se sumó ahora el esfuerzo del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. En un breve encuentro bilateral con el secretario del Tesoro americano, Steve Mnuchin, le pidió que Estados Unidos deje afuera a la Argentina del aumento del arancel a la importación de acero y el aluminio.
Dujovne hizo referencia a la "buena relación" desde el punto de vista político y económico que existe entre ambos países. Pero también aludió a la poca participación de la Argentina en el comercio de estos productos específicos. La importación de acero argentino por parte de Estados Unidos es apenas el 0,6% y en el caso de aluminio llega a 2,3 por ciento.
Fuentes argentinas indicaron que el funcionario prometió analizar el pedido. Y aclaró que ya en algunos casos puntuales se eximió de este arancel, como en el caso de los países que integran el bloque del NAFTA.
Recientemente, el Gobierno de Donald Trump impuso una barrera arancelaria de 25% para las importaciones de acero y de 10% a las de aluminio, alegando razones de seguridad nacional.
El tema ya es uno de los de mayor preocupación entre funcionarios que participan del G20, pero también de muchos inversores y banqueros que llegaron a Buenos Aires. Los signos de alarma están relacionados con la posibilidad de una guerra de proteccionismo entre los grandes bloques comerciales, lo cual generaría menos comercio internacional, impactando también las perspectivas de crecimiento económico e inflación.