El sindicato de Comercio acordó un aumento salarial de 6% para los meses de enero, febrero y marzo, tras activarse la cláusula gatillo de monitoreo de la inflación. De esta manera, el gremio de Armando Cavalieri cerró definitivamente la paritaria 2017 que aglutina a la mayor cantidad de empleados del país, con una suba anual del 26 por ciento, aunque desde el sector empresario salieron a aclarar que aún se está negociando.
Las tratativas confirman el aval del Ministerio de Trabajo de la Nación, a cargo de Jorge Triaca, a la aplicación de la cláusula gatillo o de revisión inflacionaria para los gremios que así la incluyeron, luego de que el Gobierno revisara las metas del alza de precios para 2018.
En el caso de Comercio, los empleados mercantiles percibirán un incremento sucesivo de 2% que se aplicará para los meses de enero, febrero y marzo. La liquidación se abonará sobre los sueldos de convenio de abril de 2017 y será en carácter remunerativo.
Sin embargo, desde CAME aclararon que por ahora mantuvieron charlas informales y que el porcentaje de aumento final está en discusión. "No se ha definido cuál será el ajuste contemplado", dijeron a través de un comunicado de prensa. "Hasta el momento solo existieron conversaciones entre las partes para evaluar las distintas propuestas", subrayaron, y precisaron que la cláusula de enero "aún no fue acordada y continuarán las negociaciones en los próximos días".
Fuentes de la cartera laboral señalaron a Infobae que la negociación está encaminada, pero que las partes están esperando la difusión de los números de inflación del mes de diciembre, que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) publicará este jueves.
El acuerdo paritario de Comercio se firmó en marzo del año pasado y rige hasta el 31 de marzo próximo. Contemplaba un 10% no remunerativo para los meses de abril a junio, y un 10% no remunerativo desde julio en adelante. Ese entendimiento alcanzado entonces con el presidente de la Cámara Argentina de Comercio, Jorge Fiori, y el titular de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide, contemplaba dos revisiones en caso de que aumentaran los precios: una en octubre y otra en enero, que ocurrió ayer.
De confirmarse la nueva suba, el gremio de Cavalieri se perfilará con una de las paritarias más altas logradas en las rondas del corriente año. Según el Ministerio de Trabajo, el promedio de los acuerdos salariales firmado en 2017 fue del 22,5%, aunque si se toma el "año calendario" ese porcentaje asciende al 25,6 por ciento.
Desde hace meses, otro de los sindicatos que pusieron el grito en el cielo para la aplicación de la cláusula gatillo es la Asociación Bancaria, dirigida por Sergio Palazzo. La semana pasada, la representación gremial de los bancarios exigió a las cámaras empresarias y el Banco Central (BCRA) la aplicación de la cláusula gatillo para reparar el avance del proceso inflacionario.
A diferencia de los empleados de Comercio, el mecanismo de actualización salarial acordado por los bancarios el año pasado es retroactivo al mes de enero. Sin embargo, la puesta en marcha de este mecanismo automático quedó congelada por la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo, en el marco de una dura pulseada que mantiene el bancario con el Gobierno nacional.
Las negociaciones en la actividad financiera están trabadas tras vencerse el acuerdo paritario de 2017. Ahora se está discutiendo la suba anual del corriente período. El impedimento para avanzar radica en que el sector empresario ofreció un incremento anual del 9 por ciento, lo que fue interpretado por Sergio Palazzo como una "provocación" de parte de las empresas y del Poder Ejecutivo, que mantiene la representación de las entidades con de mayor peso relativo en el sector como el Banco Nación, el Banco Provincia (Bapro) y el Banco Central (BCRA).
Los estatales también esperan novedades de actualización salarial. El titular de UPCN, Andrés Rodríguez, firmó cláusula gatillo un el año pasado e indicó a principios de diciembre que su gremio "no tiene que presentar ningún pedido porque ese aumento es automático". Según el dirigente, la actualización de la paritaria, que cerró en 20%, "se cobrará en enero próximo, o a más tardar en los primeros días de febrero". Como en Comercio, la expectativa está depositada en los números que arroje el Indec este jueves.
Otro de los gremios que espera activar la cláusula gatillo es Sanidad, que encabeza uno de los triunviros de la CGT, Héctor Daer. Al igual que Cavalieri, el dirigente es uno de los interlocutores gremiales con mayor llegada a la Casa Rosada. A mediados del año pasado, su gremio cerró un aumento salarial del 23% en dos cuotas e incluyó también una cláusula de revisión inflacionaria aplicable a enero de 2018. El mecanismo establecía un incremento automático adicional proporcional al aumento de precios, más un dos por ciento, en caso que el IPC del Indec fuese superior al 21% en diciembre.
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