Este lunes se firmó entre el Gobierno, las cámaras y sindicatos del sector lácteo un acuerdo para la producción y el empleo. El gobierno nacional, junto a cámaras empresarias del sector lácteo (CIL y APYMEL) y la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), suscribieron un acuerdo para mejorar la producción y el empleo.
En la firma del anuncio realizado en el ministerio de Trabajo estuvieron presentes el dueño de casa, Jorge Triaca, el ministro de la Producción, Francisco Cabrera, y el de Agroindustria, Ricardo Buryaille.
"Este acuerdo se logró con el trabajo coordinado con la industria, tanto con las empresas pymes como con las grandes, y el sindicato. Es muy importante haber logrado avanzar en un sector que estuvo paralizado y que hoy empieza a dar pasos para avanzar en conservar el empleo y multiplicar sus posibilidades de crecer. Es un paso más dentro de muchos que se están dando para que la industria argentina sea más competitiva. Creemos que en el mediano plazo será un factor de mejora en la competencia del sector", manifestó el ministro Cabrera.
Por su parte, Triaca explicó: "Es un paso importante para impulsar toda la potencialidad que tiene el sector, trabajando en conjunto con el foco puesto en producir más y mejor. Se llegó al consenso necesario para establecer las prioridades para generar más posibilidades para el sector y crear nuevos puestos de trabajo".
En sintonía, Ricardo Buryaile destacó: "Debemos celebrar la firma de este convenio ya que significa un verdadero logro luego de casi 30 años que no se abre la discusión de un convenio colectivo. Esto significa mayor previsibilidad y reglas claras que permitan aprovechar las oportunidades que da el mercado y proyectar a largo plazo para todos los eslabones de la cadena".
El comunicado dado a conocer por el ministerio de la Producción destaca que "este anuncio se enmarca en los Consensos básicos que presentó el presidente Macri hoy ante gobernadores, empresarios y sindicalistas, entre otros, para derrotar a la pobreza y como él manifestó, tenemos que comprometernos a tomar medidas que favorezcan la creación de más y mejor empleo privado y la producción".
Los aspectos de mayor relevancia de la modificación del convenio colectivo de trabajo de este nuevo acuerdo son:
-Las cámaras empresarias y la asociación sindical se comprometen a trabajar en la capacitación de los trabajadores. Se define un programa de capacitación para mejorar las habilidades de los trabajadores y la modernización de las tareas, acorde a la incorporación de nueva tecnología.
–Se establece un nuevo esquema de premios por presentismo y puntualidad. Para lograr mayor competitividad y posibilitar el desarrollo de los trabajadores se introduce el principio de multifuncionalidad. También se permite incorporar empleados por plazo fijo, es decir, aquellos para necesidades productivas acotadas en el tiempo, y se crea la figura de trabajadores a tiempo parcial (sábados, domingos y feriados).
–Se excluyen del convenio las actividades que no se corresponden con las normales, específicas y propias de la actividad. Y se asume el compromiso de modernizar las categorías y el escalafón, abriendo una instancia de negociación para adecuar las categorías, acorde a la nueva tecnología y nuevos procesos industriales.
"El objetivo es recuperar una industria argentina clave a través de la mejora de la productividad y propiciar un mayor desarrollo que permita multiplicar el empleo y después de casi 30 años se logra avanzar en una modernización del marco normativo del sector, que databa de 1988. El rol relevante en la negociación que tuvieron las pymes, con el fin de potenciar su participación en la industria. La industria láctea es vital para el desarrollo productivo de las provincias de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires y para la salud y alimentación de toda la población argentina. Estas cuatro provincias centralizan el 96% de los establecimientos tamberos, el 96% del ganado lechero y contribuyen con el 97% de la producción láctea nacional", completaron en el comunicado.
LEA MÁS:
Se estima que forman la cadena láctea más de 35.800 mil trabajadores. En la última década, el sector entró en crisis por un contexto internacional adverso, equivocadas políticas locales y, en los últimos meses, situaciones climáticas complejas. Para superar la crisis, el gobierno nacional viene avanzando con empresas y trabajadores para mejorar la competitividad del sector. El 5 de mayo se había firmado un acuerdo para reducir sustancialmente los montos del aporte extraordinario que realizan las empresas al sindicato por trabajador por mes: para empresas pymes (de hasta 70 trabajadores) la suma quedó en $750 y para las grandes se fijó en $1500. Originalmente los aportes eran de $3700 para todas las empresas, sin distinción entre grandes y pymes.
Del acto de firma del acuerdo, realizado en el Ministerio de Trabajo de la Nación, participaron: los ministros de Agroindustria, Ricardo Buryaile; de Producción, Francisco Cabrera; y de Trabajo, Jorge Triaca; el secretario general de ATILRA (Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina), Héctor Ponce; el presidente de la Cámara de la Industria Láctea, Miguel Paulón; y el presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas, Pablo Villano.