Las intensas negociaciones que vienen llevando adelante el Ministerio de Hacienda y la provincia de Santa Cruz cerrarían exitosamente esta semana. Según se negoció en las últimas horas, la gobernadora Alicia Kirchner se comprometerá a bajar el déficit fiscal de la provincia. Pero lo hará, al igual que el gobierno nacional, con un esquema gradualista. "No les vamos a pedir más de lo que estamos haciendo nosotros a nivel nacional", explicó un alto funcionario que detalló las características centrales del inminente acuerdo a Infobae.
El objetivo es que para el año 2020 la provincia salga del rojo y ya presente superávit fiscal. Actualmente, el pasivo asciende a $5.000 millones y tendrá que ir descendiendo de acuerdo a metas pautadas en los próximos tres años. La provincia tuvo problemas en los últimos meses para pagar los sueldos de los empleados provinciales. Y pudo hacerlo por adelantos de coparticipación girados por la Casa Rosada. Pero se trata de apenas un préstamo "puente" por algunas semanas.
El Gobierno ya le había bajado el pulgar a una emisión de deuda internacional a Santa Cruz. A cambio, le prestará a través del Fondo Fiduciario de Desarrollo Provincial
El objetivo es ir hacia una solución de fondo. Para eso resulta imprescindible que la provincia presente un plan de ajuste que vaya cumpliendo a lo largo de los próximos años. Y a medida que esas metas se alcancen el Gobierno liberará créditos a largo plazo. Todavía no están cerradas las condiciones que tendrá ese financiamiento, pero se aclaró que será con condiciones favorables para la provincia tanto en términos de plazo como de tasa de interés.
El Ministerio de Finanzas, a cargo de Luis "Toto" Caputo, ya le había bajado el pulgar a Santa Cruz para que saliera a emitir deuda en los mercados internacionales, como era el objetivo que se había trazado hace un mes. El motivo era que la tasa de interés que exigirían los inversores resultaría demasiado elevada, perjudicando la imagen de Argentina como deudor, en un momento en que está bajando el riesgo país.
Por lo tanto, el dinero será aportado por el Fondo Fiduciario de Desarrollo Provincial (FFDP). Se trata de un fideicomiso creado a mediados de 1990 para socorrer a la banca pública en medio de la crisis del efecto tequila. Paradójicamente, fue creado en aquel momento por un alto funcionario del gobierno actual: Rogelio Frigerio, hoy ministro del Interior y en aquel entonces secretario de provincias durante la gestión de Roque Fernández como ministro de Economía.
El FFDP se mantenía inactivo hace varios años pero tenía activos bajo administración, básicamente plazos fijos que se van renovando en forma regular. De allí saldrá el dinero para financiar a la provincia, con lo cual no impactaría directamente en las cuentas del sector público.
En cuanto al plan de ajuste "gradualista" aún no se conoce demasiado. Pero según las negociaciones de las últimas semanas, se plantearon distintas opciones: congelar el número de empleados públicos tras el enorme crecimiento de los últimos años, eficientizar el cobro de impuestos provinciales y revisar el flexible sistema jubilatorio de la provincia, entre otras opciones.
El objetivo es que todo quede ya zanjado esta semana, dejando atrás varios episodios violentos en la provincia, que incluyeron un cerco a la casa de gobierno provincial impidiendo que saliera durante toda la noche la gobernadora. En uno de esos episodios estaba acompañada por su cuñada, la ex presidenta Cristina Kirchner.
LEA MAS: