Aumento de la luz: habrá que mirar las facturas de 2015 para pagar menos

El Gobierno anunció subas que van del 61 al 148% para residenciales para marzo de este año. Habrá descuentos para quienes ahorren energía, pero la comparación no será interanual

Por el momento, las subas quedaron suspendidas

Las audiencias públicas quedaron atrás, y antes de que finalice el primer mes del año, el gobierno nacional anunció las nuevas tarifas de la luz. El impacto en el bolsillo será importante: las subas arrancan en un 60% hasta un 148% para los usuarios residenciales de Edenor y Edesur, en la Ciudad y en el área metropolitana de Buenos Aires.

"El 83% de los usuarios tendrán un aumento inferior a $183 por mes" aseguró Juan José Aranguren, ministro de Energía y Minería, en una conferencia de prensa. Como ya había sucedido en 2016, el ahorro será clave para suavizar el impacto de la primera suba de este servicio, que comenzará a regir a partir del 1 de febrero.

Esta vez la comparación no será interanual porque se determinó al 2015 como año de referencia para ahorrar. "El año pasado hubo muchos cambios en las tarifas y en 2017 tomaremos ese año como base", aseguró una fuente del ministerio de Energía a Infobae.

Es por eso que los clientes de estas dos compañías deberán buscar sus facturas de hace dos años y mirar el bimestre enero-febrero o febrero-marzo, según el corte que le corresponda a cada uno. A partir de allí, se deberá mensualizar el consumo. ¿Esto qué significa?

Por ejemplo, si un cliente consumió 550 kw/h en un bimestre, esto da un promedio de 275 kw/h por mes. Este nivel entra en el mismo rango de consumo de cuatro de cada 10 usuarios residenciales del área metropolitana de Buenos Aires.

Ahorro de energía

Con el plan estímulo residencial, el usuario que reduzca su consumo con respecto al mismo período de 2015 tendrá una bonificación del 50 o del 100% sobre el aumento del precio estacional mayorista (PEM), que es lo que reciben los generadores de electricidad.

Para tener un precio bonificado, el ahorro debe ser de entre un 10 u 20 por ciento, y un cliente que genere un ahorro mayor al 20%, directamente no pagaría este aumento del PEM. Este precio es sólo una parte del servicio de la electricidad, que incluye a la generación, transporte y distribución, y luego en la factura se agregan los impuestos.

El ahorro energético será mucho más fácil de hacer para los hogares de consumos medios (de 300 a 600 kWh por mes) y altos (de 600 a 1500 kwh mensuales), que desde marzo tendrán una factura tope de $1175 y $3524 respectivamente, con aumentos del 90 y 148% con respecto a enero.

Más allá de cada etapa, el consumidor se deberá fijar ante todo en el consumo por kilowatt-hora para poder ahorrar, y en el hogar hay ciertos cambios que se pueden tener en cuenta para esquivar parte del aumento:

1. Aire acondicionado: los filtros del aparato se deben limpiar cada seis meses para que no genere un mayor gasto de energía, en verano el equipo se debe dejar en 24 grados, y se tiene que apagar cuando no haya nadie en el ambiente refrigerado por un tiempo prolongado.

2. Luces: instalar las lámparas de bajo consumo sobre todo en los ambientes donde se necesite iluminar por mucho tiempo.

3. Lavarropas: usarlo lo más cargado posible. El programa de agua fría consume menos energía que el de agua caliente.

4. Termotanque y heladera: el termostato debe estar regulado entre 40 y 45 grados centígrados. En el caso de la heladera, revisar que los burletes no estén defectuosos. No hay que colocar la comida caliente de forma inmediata, primero hay que dejarla enfriar a temperatura ambiente para que el motor no tenga un gran gasto energético. El artefacto tiene que estar lejos al menos a unos 15 centímetros de paredes y otros muebles.

5. Televisores y equipos de audio: esa pequeña lucecita roja o azul también consumen energía. Es mejor desconectarlos y no dejarlos en "stand by".

6. Computadoras: si no se usa, es mejor apagarla. Una PC en modo de espera equivale a hasta un 70% de su consumo en modo encendido.

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