La nafta argentina se mantiene entre las más caras de la región

El precio por litro es de USD 1,16 tras el aumento y está por encima del promedio mundial. Pero hay un país limítrofe en el que vale un 35% más. El rol de los impuestos

Los costos internos y la devaluación inciden en la variación de precio del combustible. (IStock)

El aumento en combustibles del 8% que empezó a regir esta semana fue uno de los más anunciados, y se concretó tras meses de idas y vueltas sobre el día y el porcentaje. El litro de nafta súper escala por encima de los $18,45 en la ciudad de Buenos Aires con YPF -es superior en el interior del país- y arranca en $18,85 con otras marcas más caras.

El anuncio se enmarcó en un acuerdo de transición hacia el fin del barril "criollo" para que el país ya no esté a contramano del mundo. Ahora el petróleo está en suba -el WTI cerró a USD 52,39 el barril- y los precios en todo el mundo suben, pero si baja se expresan en las expendedoras de combustible. En la Argentina esto no ocurría ni ocurre, y la idea es liberar los precios hacia delante.

El rubro energético local afronta varios obstáculos. La devaluación del peso impacta en el precio, los costos internos suben por la alta inflación y hoy el país necesita inversiones para aumentar la producción local. Con todo, la nafta argentina se mantiene entre las más caras de la región.

El litro de nafta súper desde hoy se paga USD 1,16 al tomar el promedio de los valores del mercado, unos 15 centavos por encima del promedio mundial, según consigna el sitio Global Petrol Prices, que hace un seguimiento país por país con datos oficiales. Este valor está muy por encima de Bolivia (USD 0,59) y los Estados Unidos, donde se ubica en 0,69 centavos de dólar.

El valor en México es de USD 0,82 por litro, mientras que en Paraguay se ubica en USD 1, con precios actualizados al 9 de enero. Esto explica la razón de que muchos argentinos crucen la frontera para cargar el tanque del auto en el país fronterizo. Cargar un tanque de 50 litros sale $805 contra los $932 en la Argentina, con los valores actualizados.

La nafta de Chile se ubica levemente más barata que la de Argentina -USD 1,15 -, mientras que en Brasil (USD 1,18) y Cuba (USD 1,36) resultan más caras que en suelo local. Uruguay, país que depende enteramente de la importación de petróleo, tiene la nafta más cara de la región: los 1,57 dólares por litro hacen que la nafta salga un 35% más que en Argentina.

La oscilación del barril del petróleo no es el único valor que condiciona al precio de la nafta en cada país. El precio de los impuestos internos y la devaluación son claves en los cambios de los valores al público. Es por ese motivo que, por ejemplo, el litro en Venezuela cuesta un centavo de dólar. El país es un gran productor de petróleo y por eso es tan barata, pero la depreciación de la moneda local incide con fuerza en este número final: los precios de una economía con hiperinflación están distorsionados.

El peso de los impuestos

El componente impositivo de los hidrocarburos impacta en el precio final que paga el consumidor argentino con su bolsillo, y como es un componente imprescindible para financiar a las administraciones de las provincias productoras, el valor cambia según la localidad y el municipio.

Al respecto, destacan en la industria petrolera que "en el mundo, el precio de los combustibles en el surtidor es fijado políticamente por los gobiernos a través de los impuestos, para alcanzar determinadas metas recaudatorias".

Y en muchos casos, agregan: "Con la intención política de mantener el precio en el surtidor, hay países que suben los impuestos de los combustibles cuando el precio baja y, viceversa, bajan el impuesto cuando el precio sube. Otros países, como China, fijan el precio directamente.

En los Estados Unidos, por ejemplo, el componente impositivo en los combustibles se ubica entre el 10 y 15%; en Inglaterra está en el orden del 75%, mientras que en la Argentina alcanza el 40 a 50 por ciento. Este componente hace que el principal beneficiario de los incrementos en los combustibles sea el Estado Nacional".

En la Argentina cuando el precio del crudo internacional baja, las naftas igual suben.

En Argentina, se da el siguiente debate: cuando el crudo baja, las naftas suben. Pero la realidad es que el crudo baja en dólares pero sube en pesos. En diciembre de 2015, los refinadores pagaban el petróleo crudo a 9,70 pesos por dólar. Luego de la devaluación del peso decidida por el gobierno nacional hoy el barril de crudo se paga a un tipo de cambio de 16 pesos, lo que originó un incremento de costos afrontado por el sector refinador de casi un 70%. Mientras tanto, en el mismo período, los precios en el surtidor se incrementaron un 31% ya que los aumentos que se preveían para la segunda mitad del año pasado no se aplicaron.

Recuerdan los petroleros que "durante el último año, a través de un acuerdo entre Gobierno, sindicatos y la industria petrolera, dicho acuerdo, se redujo un 16% el precio de los crudos locales en dólares (10% a principios de año y 6% en la segunda mitad del año) y se acordó también aumentos paulatinos en el precio de los combustibles".

La petrolera estatal YPF es líder en el expendio de combustibles, con una participación del 57% en el mercado. Le siguen Shell (17,9%); Axion (14%); Petrobras (5,5%), y Oil Combustibles (3,5 por ciento).

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