Un escándalo sacude a la NBA. Y el protagonista de la historia es ni más ni menos que una de las estrellas nacientes de la mejor liga de básquet del mundo. Ja Morant, el base de los Memphis Grizzlies, fue separado del equipo por los próximos dos partidos tras aparecer en un video en sus redes sociales con un arma.
El jugador, que viene de ser elegido como uno de los titulares en el último All Star Game de la NBA, hizo un vivo en su cuenta de Instagram durante la madrugada de este sábado 4 de marzo en un espacio nocturno en el que se lo puede ver junto a amigos y varias mujeres en un sector VIP. En un momento, Morant aparece por algunos segundos con un arma en sus manos y la muestra a los seguidores. El hecho ocurrió después de la derrota de su equipo ante los Denver Nuggets, como visitantes.
Una vez que lo sucedido tomó dominio público, la franquicia de la ciudad de Tennessee tomó una drástica determinación y lo separó del equipo. “Los Grizzlies informan de que Ja Morant estará lejos del equipo al menos en los dos próximos partidos”, publicó el equipo en un comunicado en sus fuentes oficiales. De esta manera, el que para muchos es el joven maravilla de la NBA se perderá los partidos contra Los Ángeles Clippers (lunes 6 de marzo) y Los Ángeles Lakers (miércoles 89, ambos en el Crypto.com de California.
Frente a esta situación, el jugador escribió una nota y pidió disculpas tras aparecer con un arma de fuego. “Tomo completa responsabilidad por mis acciones de anoche. Pido perdón a mi familia, compañeros, técnicos, aficionados, colaboradores, la ciudad de Memphis y toda la franquicia”, escribió Moran.
“Me voy a tomar un tiempo para recibir ayuda y trabajar en mejores maneras de gestionar el estrés y mi bienestar en general”, agregó.
Desde su llegada a la liga, Morant revolucionó la NBA con su capacidad atlética y su juego. En lo que va de la temporada 2022-2023, tiene un promedio de 27 puntos por partido (está en el puesto 9 entre los máximos anotadores), 8.2 asistencias (5° en pases gol) y 6 rebotes por juego con más de un 46 por ciento en aciertos de cancha. El base ha sido clave para el crecimiento de los Grizzlies, que ahora marchan en el segundo puesto de la Conferencia del Oeste con récord de 38 victorias y 24 derrotas, solo por detrás de los Denver Nuggets.
Más allá de esta actitud, la NBA abrió una investigación contra el joven de 23 años por otras causas de agresiones. El Washington Post difundió hace unos días sobre un hecho que habría ocurrido durante el verano pasado en Estados Unidos. En el espacio de cuatro días, Morant fue acusado de amenazar a un miembro del cuerpo de seguridad de un centro comercial de Memphis durante un altercado y luego de amenazar con una pistola a un chico de 17 años tras una pelea durante un partido de baloncesto en casa del jugador.
La pelea en el estacionamiento del espacio quedó saldada con una denuncia a la policía por parte de la presunta víctima, pero no hubo arrestos. Por su parte, el chico que habría sufrido la agresión por parte de la estrella de la NBA aseguró además a la policía que, tras la pelea, Morant acudió a su casa con “una pistola visible” en sus pantalones y con las manos en el arma.
Por otra parte, el entorno del basquetbolista también estuvo bajo el ojo de la NBA cuando, en febrero pasado, fueron acusados por los Indiana Pacers de haber apuntado un láser rojo -se presume que pudo haber sido de un arma- contra unos miembros de su cuerpo técnico después de un altercado entre los equipos el pasado 29 de enero en Memphis.
La NBA aseguró a través de un portavoz que sus investigadores entrevistaron a varios testigos y revisaron las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad y que, pese a confirmar que hubo un fuerte altercado, de momento no “pudieron corroborar que algunas personas hayan amenazado a otras con un arma”.
Seguir leyendo: