El impactante incidente que vivió el delantero del Mirandés, Joaquín Panichelli, durante el partido de la jornada 20 de LaLiga Hypermotion, generó múltiples reacciones y preocupaciones respecto a los protocolos de salud y seguridad en el fútbol. El encuentro, disputado en el césped del estadio de Anduva, se vio marcado por un fuerte choque entre el argentino y Eric Curbelo, jugador del Sporting de Gijón.
El suceso ocurrió apenas a los 18 minutos del primer tiempo cuando Panichelli, al saltar para disputar un balón aéreo, impactó de forma accidental con la cabeza de Curbelo. El cordobés de 22 años cayó inconsciente sobre el césped, lo que provocó momentos de máxima tensión en el campo. Aunque la acción continuó por unos segundos más, rápidamente los jugadores que presenciaron el accidente solicitaron la intervención de los servicios médicos.
Tras el encuentro, el Mirandés emitió un parte médico inicial tranquilizador a través de su cuenta oficial en la red social X: “Nuestro jugador Joaquín Panichelli se encuentra consciente y estable en el hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro. Las primeras pruebas son tranquilizadoras y el jugador se encuentra bien. Pasará la noche en observación”.
Sin embargo, las críticas en redes sociales no tardaron en surgir, dirigidas principalmente hacia el árbitro y el personal médico por la aparente tardanza en asistir al futbolista.
Un usuario expresó su frustración con estas palabras: “Esto es el mayor despropósito que jamás he vivido en un campo de fútbol. El árbitro no parando el juego, Panichelli convulsionando y la Cruz Roja sin mover un dedo, llevando la camilla los jugadores, el árbitro y los líneas desentendidos del tema”.
Otro comentario reflejó la preocupación general: “Pero como no vas a parar el partido teniendo a Panichelli inconsciente... esos primeros momentos son cruciales en estos casos, podríamos haber visto una desgracia”.
A pesar del susto inicial, el partido continuó y derivó en un penalti a favor del Mirandés, pero el desenlace del evento dejó al equipo conmocionado. El entrenador, Alessio Lisci, se refirió al incidente durante la rueda de prensa posterior. “Pani está bien, las primeras pruebas excluyeron fracturas que era lo más importante. A partir de ahí, ahora iré al hospital y veré cómo pasa la noche, las noticias son positivas”, afirmó el técnico.
Lisci también destacó el impacto emocional en el equipo: “El equipo quedó tocado por eso, en el vestuario en el descanso tuvimos que intentar subirle los ánimos para salir a la segunda parte”. Además, reconoció la importancia de la intervención rápida en incidentes de esta naturaleza, resaltando: “Si me tienen que expulsar por entrar al campo a intentar parar el partido me da igual, lo volvería a hacer porque esas cosas hay que agilizarlas, 30 segundos de diferencia te pueden salvar la vida”.
Por su parte, Panichelli llevó tranquilidad a sus seguidores al día siguiente, agradeciendo los mensajes de apoyo a través de sus redes sociales: “Muchas gracias a todos por los mensajes, ya estoy recuperado y tranquilo, y agradecer a este grupo que se merece todo y más”, escribió el jugador de 22 años.
Joaquín Panichelli, originario de Córdoba, Argentina, ha mostrado su talento en el campo desde su paso por las divisiones inferiores de River Plate en 2021 y 2022. Actualmente, se encuentra a préstamo en el Mirandés hasta junio de 2025, cedido por el club español Alavés, al que pertenece su pase desde el 2023. En las 19 jornadas disputadas hasta ahora en la Segunda División de España, ha registrado ocho goles y una asistencia, destacándose como un joven talento del fútbol.